Introducción.
Una hernia umbilical es una protrusión del contenido de la cavidad abdominal por un punto débil del anillo umbilical debido a un defecto en el cierre de la pared abdominal.
Generalmente se identifican y diagnostican en los becerros recién nacidos, tienen un índice de heredabilidad del 1 al 3%. Su incidencia en los centros de producción intensiva puede alcanzar hasta un 5 u 8%.
Las hernias umbilicales “congénitas”, es decir presentes al nacimiento, se manifiestan en las primeras semanas de vida. Una mayor frecuencia en la consanguinidad familiar en la descendencia de ciertos toros permite concluir una predisposición genética, probablemente poligénica (con la participación de influencias ambientales modulantes).
Entre las causas de hernias umbilicales adquiridas pueden citarse: prácticas inadecuadas utilizadas durante el parto asistido, especialmente si hay necesidad de realizar maniobras obstétricas y posteriormente ejercer tracción para ayudar a la cría a salir del canal de parto; esta maniobra puede ser excesiva cuando la cría no está bien posicionada, es demasiado grande o la madre presenta estrechez pélvica y no existe dilatación adecuada de las estructuras asociadas; estas manipulaciones ejercidas sobre el becerro van a provocar la separación y debilitamiento de los músculos abdominales, ocasionando la presentación de la hernia, otras causas pueden ser la debilidad o lisis del anillo en el curso de las onfalitis, la succión del ombligo entre becerros, la distención de la pared abdominal a causa de presión interna (parto distócico, sobrealimentación, timpanismo), lesiones externas, cuerpos extraños migrantes salidos del abomaso o de los preestómagos y úlceras abomasales.
El diagnóstico presuntivo se realiza a la inspección y se confirma por la palpación del anillo herniario. Cuando a la palpación de esta estructura, es posible introducir más de cuatro dedos, la reducción de la hernia se complica y es necesario utilizar una prótesis para reducir la hernia adecuadamente. En el pasado, se ha utilizado pericardio de bovino, actualmente existen mallas.
La utilización de malla de polipropileno de uso humano para la reducción de hernias umbilicales en bovinos, generalmente es una práctica reservada para animales con alto potencial genético para la producción de leche. Sin embargo, es importante considerar que un porcentaje de las hernias umbilicales en bovinos tienen un importante componente hereditario.
Valoración de la Hernia.
El procedimiento de reducción inicia con la valoración de la hernia, mediante la palpación del anillo herniario con la finalidad de delimitar el tamaño de éste y determinar qué estructuras anatómicas pudieran estar involucradas.
Procedimiento quirúrgico.
Se procede a la tranquilización de la becerra con xilacina al 2%, a una dosis total de 0.7 ml, utilizando la vena caudal, con la finalidad de posicionarlo con facilidad en decúbito dorsal, actitud que mantendrá
durante toda la intervención.
Una vez postrado se le sujetan tanto miembros anteriores como miembros posteriores con cuerdas, con el propósito de reducir el riesgo de un movimiento brusco por parte del animal. Se coloca a la becerra sobre una superficie limpia y mullida (colchón plástico).
Una vez que la becerra ya se encuentra en plano quirúrgico y en posición de decúbito dorsal, se procede a lavar enérgicamente con agua y jabón, y a rasurar el área en donde se va a realizar la intervención quirúrgica.
Una vez más se realiza la palpación del anillo herniario para determinar sobre todo si existe alguna estructura involucrada (asas intestinales, rumen, abomaso, epiplón).
Se realiza la analgesia local con Lidocaína al 2% con epinefrina en el área a incidir. A continuación se lleva a cabo una antisepsia enérgica del campo quirúrgico con clorhexidina.
Un ayudante sujeta la piel sobre el anillo herniario con pinzas de Allis para mostrar al cirujano el área a incidir. Se realiza una incisión en piel en forma elíptica alrededor del anillo herniario, procediendo a diseccionar la piel y tejido subcutáneo utilizando el bisturí y pinzas de disección, con el propósito de retirarlos.
A continuación se realiza una pequeña incisión para introducir unas tijeras rectas y comenzar a retirar el tejido involucrado en el anillo herniario, cuidando al mismo tiempo que no exista alguna víscera comprometida junto con éste. En caso de existir una víscera adherida al anillo, se procederá a liberarla con extremo cuidado.
Posteriormente se reavivan los bordes del anillo herniario haciendo un corte extendiéndose de 1-1.5 cm alrededor del anillo. Es importante aplicar una solución de suero salino fisiológico con antibiótico frecuentemente durante la intervención, con el fin de lavar y mantener hidratados los tejidos de la región.
Como siguiente paso se sitúa la malla de polipropileno sobre el área quirúrgica para determinar el tamaño que se utilizará para reducir la hernia. Se corta la malla abarcando la herida completamente y sobrepasando sus bordes 2 cm, se separa la piel y el músculo contiguos al anillo herniario, introduciendo la malla entre estos dos tejidos. A continuación se fija la malla con Catgut crómico o Braunamid de calibre #2 o #3, iniciando la fijación con cuatro puntos separados ubicados en los cuatro puntos cardinales, cada uno de ellos.
Una vez fijada la malla, se procede a colocar la primera línea de puntos separados, involucrando el borde de la herida y 1 cm de tejido abdominal, hasta suturar toda la herida. Se realiza a continuación una segunda línea utilizando el mismo patrón de sutura (puntos separados simples) a una distancia de 1-1.5 cm con respecto a la primera línea de sutura.
Posteriormente se vuelve a humectar con la solución antibiótica y se sutura la piel y tejido subcutáneo utilizando Nylon, calibre 0.7 mm., con un patrón de sutura de puntos en “U”. Como último paso se procede a limpiar el área quirúrgica, aplicar un antiséptico y cicatrizante sobre la herida.
Cuidados postoperatorios.
Alojar a la becerra en un corral limpio con cama abundante. Ofrecer forraje verde y agua adlibitum. Aplicar diariamente cicatrizante sobre la herida. Administrar antibióticos como Penicilina Benzatínica a una dosis de 22,000 UI/Kg PV durante 5 días cada 24 horas y un analgésico no esteroidal (AINES) durante 3 días como Meglumine de Flunixine a una dosis de 1.1 mg/Kg PV cada 24 horas. Se recomienda retirar los puntos a los 15 días.
LITERATURA CITADA
1. Dirksen G., Gründer H., Stöber M., Medicina Interna y Cirugía del Bovino, Volumen 1 y 2. 4ª Edición. Ed. Inter-Médica. Buenos Aires, Argentina, 2005.
2. Noordsy J. L., Food Animal Surgery. Ed. Veterinary Learning Systems.
3. Oehme F. W., Prier J. E., Textbook of Large Animal Surgery. Ed. The Williams & Wilkins Company. Baltimore, USA, 1976.
4. Ordoñez M. R. Atlas de Técnicas Quirúrgicas en Bovinos, Teoría y Práctica. Ed. Trillas, México, 2008.
5. Susan L. Fubini, Norm G. Ducharme. Cirugía en animales de granja. Ed. Inter-Médica. USA, 2005.