Pasando lista a la guachera

INTRODUCCIÓN

En general en los tambos argentinos las pariciones son continuas, por lo que tenemos terneros casi todo el año. Aun así el mayor caudal de pariciones es en otoño e invierno, épocas más desfavorables para la crianza. Es por ello que llegando el frío debemos repasar la lista de tareas en la guachera para poder lograr buenos resultados.

HAY QUE ESTAR PREPARADOS PARA LA LLEGADA DE LOS RECIÉN NACIDOS

Según la distribución de las pariciones, en otoño y en invierno, época más complicada para la crianza, es cuando más animales tenemos en la crianza.

Por otro lado, en cada uno de los tambos, la distribución de las pariciones suele ser semejante año a año. Pero puede suceder que un año se presente con situaciones diversas, como por ejemplo: problemas reproductivos, un mayor ingreso de vaquillonas propias a parir, compra de vaquillonas a parir, o bien dado el buen precio de la carne se decide comenzar a criar los terneros machos, y tanto la distribución como la cantidad de pariciones puede variar drásticamente con respecto al año anterior.

Estas situaciones de incremento de partos o de animales que ingresan a la crianza, suelen encontrar a las mismas, en déficit de elementos necesarios para conducirlas con éxito. Por eso, proponemos realizar una simple pasada de lista, para ver que no nos falte nada, para recibir adecuadamente a los terneros. La idea es que no se cumpla un dicho popular que reza: "Cuando el niño se ahogó, María tapó el pozo"

1.- PERSONAL

Calculamos que un guachero, puede atender entre 70 y 90 terneros. Revisemos si la cantidad de existencias previstas en la guachera, se condice con la cantidad de personal destinado a la misma.

Hay que tener la previsibilidad suficiente para designar un nuevo guachero o un ayudante puntual para la temporada de pariciones.

Chequear si el personal de la crianza ha recibido capacitación en los últimos 6 meses de actividad.

El denominado franquero, quien cubre al guachero en los francos, vacaciones o licencias por enfermedad, debe estar definido, entrenado y al tanto del funcionamiento de la crianza.

2.- INSTALACIONES

Revisar que el freezer del banco de calostro se encuentre operable.
Contar las botellas plásticas disponibles para guardar el calostro.
Contar baldes y estacas (sistemas individuales).
Calcular disponibilidad de corrales (sistemas colectivos).
Parece una obviedad, pero si faltan estacas, se corre el riesgo de retener animales en el centro de parición o sacar antes de tiempo de las estacas terneros que no están en condiciones. En el caso de las crianzas colectivas, aumentar la cantidad de terneros por lote maximiza los riesgos de cohabitación.
Controlar que la capacidad de los recipientes de traslado de la leche sean la adecuada.
Prever la disponibilidad de agua caliente en tiempo y temperatura para la preparación del sustituto y calcular los tiempos de calentamiento de la leche, de tal modo que no se atrasen los horarios de administración de la dieta láctea y el uso óptimo del tiempo del personal.

3.- REPAROS

El recuento de capas, rollos y demás, deben estar disponibles antes que empiecen los días fríos y los temporales.

Capas protectoras: las capas deben ser impermeables, abrigadas, fáciles de colocar y sacar, cubrir el 80 % del cuerpo del ternero y durar, al menos, dos años. En la elección de las capas no sólo hay que considerar los precios, sino todos los puntos señalados al inicio de este párrafo. Una alternativa de costo cero, es la utilización de bolsas de plastillera para armar dichas capas. La plastillera debe ser de trama cerrada para que sea impermeable pero hay que saber que no proveen abrigo. Se confeccionan abriendo un lateral sin llegar al extremo. Para pasar la cabeza del ternero, se corta en ángulo el otro lateral. Con la misma bolsa se cortan las tiras de sujeción.
Rollos: Cuando se hacen rollos en el campo, se suelen guardar en los lotes o en otros lugares establecidos. Puede ser una opción guardarlo en la crianza, y aprovechar el reparo que puedan proveer. Hay que considerar que el acarreo tiene su costo e incomodidad. Los rollos se pueden ubicar en una fila compacta, o ubicar uno por estaca, y mover los terneros alrededor del mismo. Este es una forma muy práctica de manejar el reparo de rollos.
Alambres perimetrales forrados con plásticos: se pueden usar los plásticos que quedan de los silo bolsas, o plásticos en desuso, o usar bolsas de plastillera, y atarlos aprovechando el alambrado. Este reparo es muy útil en los temporales porque podernos trasladar las estacas a ese lugar y hacerles cama de paja si el piso no aguanta. En los sistemas colectivos (terneros sueltos) los animales se acomodan ellos mismos buscando el reparo.
Cama de paja de trigo: mantener a los terneros secos, o en su defecto aislados del barro y el agua, es invalorable durante un temporal. Disponer para los temporales de rollos que no sirvan como alimento, para ser utilizados como cama, no siempre es posible. Por esa razón deberíamos encargar, durante la cosecha de trigo, rollos de paja de trigo, ya que son económicos y brindan una cama más seca y duradera que otros materiales. Es una previsión para estas situaciones climáticas adversas.
Galpones o techitos en el lote: las crianzas colectivas, pueden preparar reparos fijos, a los que los terneros accedan solamente durante los temporales o días de lluvia, o en las noches muy frías de invierno. Es fundamental que estos lugares puedan ser desinfectados luego del uso, porque la concentración de animales puede favorecer el contagio de enfermedades. Estos lugares reparados de emergencia, pueden ser habilitados en realidad para cualquier sistema, cuando las condiciones son extremas, y sobre todo para los terneros más chicos. Pero debemos insistir con la necesidad de que estos lugares puedan ser higienizados y desinfectados, luego del uso, y mientras se encuentren terneros alojados, extremar las medidas de higiene, incluso el uso de camas de paja, aserrín u otro elemento disponible, ayudan a mantener el piso seco.

4.- ELEMENTOS DE ENFERMERÍA Y VETERINARIA

En la crianza, se debe contar con los elementos necesarios para realizar los cuidados preventivos y los tratamientos indicados por el médico veterinario, a saber:

Vacunas para aplicar a las madres (al secado y al preparto).
Vacunas para aplicar a los teneros (al desleche y en recría).
Tintura de Yodo, o alcohol yodado para la desinfección de los ombligos.
Curabicheras en pasta o aerosol.
Materiales para realizar el Test de inmunidad: reactivo, jeringas, agujas, tubos de ensayo, gradilla.
Set de rehidratación oral: sonda bucoesofágica, sales de rehidratación oral.
Set de rehidratación endovenosa: butterfly, guía de macrogoteo, cinta, elástico, abocat, solución fisiológica, etc.
Antibiótico sugerido por el veterinario según los antecedentes y/o antibiograma realizados en el establecimiento.
Otros productos veterinarios indicados por el profesional asesor.

Publicado originalmente en Producir XXI, Bs. As., 19(234):54-56.

Pasando lista a la guachera

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