CULTURA EMPRESARIAL GANADERA
22 de noviembre de 2014
Hola Juan Pablo,
Tienes toda la razón con aquello de los tiempos de la naturaleza vs los tiempos del ganadero de hoy con insumos artificiales. Pero hay que verlo de esta manera: Producir a base de químicos y venenos, es producir comida para hoy con el riesgo de aguantar hambre mañana. A eso se refiere la producción SOSTENIBLE Y SUSTENTABLE de alimentos para la humanidad.
A veces, por la forma como yo me desempeño profesionalmente, la gente cree que es uno el que emite conceptos (y tal vez creerán que son opiniones personales y lanzadas a la ligera). Pero NO SOY YO quien dice que haya que producir alimentos sin químicos ni venenos, tampoco es un asunto exlusivo de los que trabajan PRV, es un asunto de más fondo, pues hay serias, sendas, complejas y completas investigaciones que demuestran que si seguimos usando indiscriminadamente e irracionalmente los químicos y venenos para producir alimentos, nos vamos a ver enfrentados a dos situaciones en un futuro que cada vez está más próximo:
1. Que estamos "envenenando al mundo", y contribuyendo así a que los humanos padezcan enfermedades metabólicas, como obesidad (hay más gente obesa en el mundo que aquellos que padecen de subnutrición), o también problemas hormonales, o deficiencia en el funcionamiento de algún órgano en particular, etc.
2. Estamos AGOTANDO las tierras para producir alimento (hoy se cuenta con 2.000 metros cuadrados por habitante en el mundo para producir el alimento que necesita, y se espera que para el 2060 la cifra haya reducido a menos de 1000 m2 por habitante (porque para entonces se espera que haya el doble de seres humanos poblando el planeta), pero a la vez, una tierra más deteriorada, cansada, y en muchos casos, desertizada, y el que no lo crea, que consulte sobre el fenómeno de desertización de tierras en países como España (solo para citar un ejemplo).
Así pues, que aunque lastimosamente no todos los productores están dispuestos a acoplarse a los tiempos de la naturaleza, y más bien insisten en que la naturaleza se acople a sus tiempos, pues muchos dirán que no les importa lo que ocurra en el 2030 o 2060 porque tal vez para entonces ni sean ganaderos, o tal vez nisiquiera tengan vida, pero para los que si estamos interesados en que a nuestros hijos y nietos les quede un mundo habitable, y no se vean enfrentados a un mundo que tenga que rebuscarse la alimentación o la tengan que pagar a costos inalcanzables, entonces nos preocupa también la SOSTENIBILIDAD Y SUSTENTABILIDAD de la producción ganadera.
Es un asunto muy serio, pero parece que todavía se queda en las esferas académicas y políticas, y no desciende al sector primario, que a pesar de ser el que padece las consecuencias, insiste en la necedad de producir a base de químicos, y no les culpo, porque quienes comercializan químicos, y quienes estudiaron para esa industria, pues ejercen una presión muy fuerte para poder seguir vendiendo los químicos y venenos para la producción de alimentos.
Puedo asegurar (y estas palabras van a tener más valor después y no tanto ahora), que los únicos ganaderos que van a poder mantenerse en el negocio para el año 2030, serán aquellos que hayan aprendido a manejar los TIEMPOS DE LA NATURALEZA, y no hayan insistido neciamente en imponer sus tiempos acelerados de la industria convencional.
Yo no tengo NADA en contra de los insumos convencionales, como muchos piensan, pues a veces hay que usarlos, de forma RACIONAL, pero solo a veces, no siempre, y en casos muy puntuales. Tampoco estoy en contra de la industria convencional, pues ellos darán cuentas en su momento y no a mi (no soy quien para eso), sino al mundo.
Contra lo que si estoy es con el hecho de que los productores inistan en acelerar los tiempos de la naturaleza, y eso no por ser un Voisinista, más bien, porque eso es lo que tiene a los productores en muchos casos "arruinados", y lo que peor aún, tiene a un mundo cada vez más enfermo. Soy un consumidor de alimentos orgánicos, y eso lo decidí hace poco tiempo realmente, porque comencé a sentir como ser humano la necesidad de preocuparme más por mi salud. Y aquí hay otro problema, y es que los humanos en su mayoría casi hemos perdido la autonomía, ante la oferta abundante de alimentos contaminados con químicos y venenos que se comercializan por todo el mundo como si no pasara nada. Y como la oferta de orgánicos es más poca, son más costosos los alimentos, entonces muchos se obligan a comer lo que sea. Por eso insisto como profesional del agro, en jalonar una mayor producción de alimentos orgánicos de origen animal, para presionar a que al haber mayor oferta, los costos para un ser humano alimentarse de orgánicos sean más bajos.
Tal vez yo solo no lo logre, pero mientras Dios me preste la vida, haré todo lo posible para que el mundo entero llegue a tener una vida más sana y saludable, y mi tarea entonces está en esparcir la semilla que algún día dará su fruto, y si no lo puedo cosechar yo, que lo cosechen mis hijos y nietos.
Bendiciones y hasta pronto!