Soluciones contra la Salmonella
La salmonelosis es la enfermedad zoonótica más común, junto con la campilobacteriosis en la UE, siendo la Salmonella una causa común de los brotes de enfermedades transmitidas por los alimentos (EFSA). En la UE se notifican más de 91.000 casos de salmonelosis cada año (79.698 en 2018 teniendo en cuenta los serovares más frecuentes), produciendo pérdidas económicas globales de hasta 3 billones de € al año (EFSA). La prevalencia general de Salmonella en piensos de origen animal y vegetal en 2018 en la UE fue del 0,93% en 28.680 unidades, y del 0,52% en piensos compuestos de 10.497 muestras analizadas para aves de corral (EFSA – Report 2018). Se considera que los piensos son la fuente más común de contaminación por Salmonella en avicultura en situaciones de producción comercial (Jones&Richardson, 2004), siendo importante su control y un buen manejo asegurando una producción limpia y segura en toda la cadena alimentaria, a fin de evitar la infección humana por contaminación derivada de animales infectados. Hoy en día, el tratamiento térmico es el más común para reducir la Salmonella, pero existe un alto riesgo de recontaminación debido a la contaminación ambiental de las fábricas de piensos, principalmente durante el proceso de enfriamiento y secado, aunque también durante el transporte y el almacenamiento por la contaminación cruzada. Además, es una bacteria capaz de formar biofilm en diferentes superficies, conviertiéndose en una fuente de contaminación en los piensos en las diferentes líneas productivas. Por lo tanto, debemos aplicar medidas adicionales en la lucha contra la Salmonella. Otro de los factores asociados a la contaminación de Salmonella es el recuento de Enterobacteriaceae (Jones, 2011), observándose su presencia en niveles superiores a 10.000 ufc/g de Enterobacteriaceae en los piensos no procesados y 100 ufc/g en los piensos procesados (Jones y Richardson, 2004). El polvo también está relacionado con los recuentos de Salmonella (Haggblom, 1994; Jones y Richardson, 2004), lo que pone de manifiesto la importancia de su control en las fábricas de pienso. Altos niveles de Salmonella pueden afectar no sólo a la calidad de los piensos y al rendimiento de los animales, sino también a la reputación de la granja. Por lo tanto, debemos considerar diversas medidas para reducir o eliminarla en las fábricas de piensos, entre ellas la mejora de la higiene mediante un buen plan de limpieza y desinfección, la utilización de ácidos orgánicos u otros conservantes químicos para piensos, el tratamiento térmico o el uso de aditivos para piensos para modular la microbiota intestinal. Adiveter ha establecido los siguientes niveles para las muestras de materias primas y piensos para garantizar la seguridad de los mismos: no detección de Salmonella / 25g y Enterobacteriae < 4log cfu/g.
