Interacción de la microbiota y el sistema inmune en el intestino de las aves y cerdos.

La presión actual por parte de los consumidores para la menor utilización de antibióticos en los alimentos de los animales de granja ha aumentado la necesidad de conocer más a detalle las relaciones entre el Sistema Inmuene Asociado al Intestino (SIAI) y la microbiota. Esta relación se inicia desde la primera semana de vida, iniciando al parto o la eclosión. Esto significa que la primera microbiota que aparece es la relativa al donde el animal es colocado para su desarrollo en las siguientes semanas.

 

Esta primera microbiota seguirá un patrón de colonización que va de la boca al ano, ocupando todos los nichos posibles y adaptándose lentamente a las condiciones que se van dando dentro del intestino (cambios de acidez- alcalinidad, receptores de tipo azucares en las células del intestino, ambiente más o menos anaerobio y otras condiciones. Sin la presencia del sistema inmune, sería la propia composición de la microbiota primigenia la que determinara el desarrollo futuro. Sin embargo, esto no es así, da la intervención del SIAI.

 

En animales que no sufren de inmuno-depresión o supresión temprana (especialmente por virus como Mareck, Gumboro, PRRS y otros, o la presencia de micotoxinas en el alimento) se presentarán diferentes migraciones de células inmunes que van poblando la Lámina propia, los cúmulos linfoides, los ganglios linfoides (en mamíferos) así como colocándose en entre los enterocitos para poder determinar los antígenos presentes en el alimento o en la microbiota.

 

Existe un gran número de células que participan en el proceso de defensa del intestino, se calcula que al menos el 70% del total del sistema inmune de un organismo está localizado en algún momento en el intestino y la producción de IgA supera por mucho la producción de cualquier otra inmunoglobulina. El proceso por el cual el SIAI puede reconocer patógenos potenciales y discriminar de aquellos microorganismos que solo requieren “control o tolerancia” se ha descrito con mucho detalle y se reconoce que diferentes estrategias permiten modular dicha respuesta.

El objetivo final de conocer la interacción microbiota-SIAI es mantener a este en la menor actividad pro-inflamatoria, lo que permitirá al animal mantener su consumo de alimento y por lo tanto la tasa de crecimiento que genéticamente puede desarrollar con base en la dieta que se ofrece.

Palabras clave. Microbiota, sistema inmune.