Innovaciones tecnológicas para mejorar la productividad en las plantas procesadoras de aves

Hace más de 20 años, los clientes que entraban a los supermercados tenían que abrir las puertas, olvidando a veces cerrarlas.

En su afán por disminuir el impacto tanto en la eficiencia y operación de los equipos de aire acondicionado, la administración asignaba a un grupo de funcionarios para garantizar que las puertas se mantuvieran abiertas el tiempo estrictamente necesario durante el ingreso y salida de los clientes con sus respectivas compras.

Hoy afortunadamente esta estresante actividad es historia, ya que es normal observar unas especies de pequeñas lámparas – sensores de aproximación – que operan las puertas automáticamente como por arte de magia.

Haciendo un símil con las plantas procesadoras de aves, todavía nos encontramos con situaciones parecidas que afectan la calidad de la operación y los gastos. Para mayor ilustración citemos algunos ejemplos cotidianos:


Aturdimiento.
Es de todos sabido que en las plantas se procesan pesos promedios de pollos. Si hay una amplia desviación estándar, se notará fácilmente la disparidad de tamaño.

A pesar de que los modernos aturdidores cuentan con eficientes sistemas neumáticos que los suben y los bajan para ajustarlos milimétricamente, desafortunadamente en la mayoría de las plantas los responsables de la administración y operación de este delicado equipo que tiene un gran impacto en la calidad de los pollos procesados, no los utilizan. Por tal motivo, no es de extrañar que algunos pollos salgan del aturdidor con distintos niveles de inconsciencia.

Con el propósito de aportar una solución a esta oportunidad de mejoramiento, ya se puede encontrar en el mercado la tecnología que permita graduar la altura del gabinete o tina automáticamente utilizando sensores especiales de aproximación.

Complementando lo anterior, a los tradicionales sistemas de ajuste manual de los equipos existentes se le pueden adaptar sistemas neumáticos con operación automática.


Iluminación
De otra parte, quienes trabajamos en las plantas, más de una vez hemos encontrado secciones completas iluminadas que están en receso. Al indagar al respecto nos informan que al personal se le olvidó apagar los interruptores. Situaciones parecidas ocurren en muchas habitaciones de los hoteles donde los huéspedes por diversas razones no se aseguran de apagar las luces, hecho que incrementa los gastos de energía por iluminación y hasta el aire acondicionado. Es por ello que en la actualidad los hoteles les entregan a sus huéspedes una tarjeta para entrar a la habitación que luego debe insertar y de esta forma disponer de la energía dentro de la alcoba y en caso de salir de ella, debe retirarla.

En las plantas de proceso, también se puede utilizar esta efectiva tecnología para el control del gasto de energía por iluminación y reposición futura de los bombillos y/o lámparas, al cumplirse aceleradamente el número de horas establecidas por el fabricante.


Apagado Equipos
Otra situación parecida se presenta al olvidarse apagar equipos de operación silenciosa como transportadores de banda, que desafortunadamente permanecen en servicio hasta cuando se inicia el turno al día siguiente. Nuevamente se incrementa su cuenta de energía y mantenimiento de estos equipos por el acelerado desgaste. Tecnologías especializadas nos pueden ayudar al control de estos involuntarios olvidos.


Ahorro en Agua
Por último, cuando en las plantas se presentan paradas sorpresivas de más de un (1) minuto – se excluyen corte en el fluido eléctrico -, los rociadores de agua quedan operando incrementándose el consumo de agua y los gastos posteriores para el tratamiento de la misma. La tecnología de los sensores especiales nos pueden ser de gran ayuda para reducir los gastos de operación en las plantas procesadoras de pollos.



Barranquilla, 26 de Mayo de 2010