3 de enero de 2019
Estimado José Carlos, te adjunto copia de un trabajo de campo realizado por el suscrito en Maiz en la zona occidental del Pacifico en Nicaragua.
Espero que la presente publicacion responda a tu pregunta. Saludos de mi parte!!
Ing. Octavio A. Menocal, PhD, University of Florida!
Efecto de la aplicación foliar de Quick-Sol® en el crecimiento y rendimiento del cultivo de maíz (Zea mays L.)
Octavio Augusto Menocal Barberena1
Francisco Alberto Espinoza Salinas2
1 Ing. Agrónomo, MSc., PhD. Asesor Inv. Varias Punto Agrícola. omenocal@ufl.edu; dirinvestigacion@yahoo.es
2 Ing. Agrónomo, MSc. Especialista Genetista de Maiz – Investigador SEMSA, Leon. falbertoespinoza@gmail.com
INTRODUCCION
El maíz (Zea mays) es una planta que se cultiva en un amplio rango de condiciones climáticas alrededor del mundo (Maiti et al., 1996) y ocupa la tercera posición entre los cereales más cultivados mundialmente detrás del arroz (Oryza sativa L.) y el trigo (Triticum aestivum L.) [Kage et al., 2013] (Foto 1).
Foto 1. Lote de maíz (Zea mays L.), var. NB-6 previo a la aplicación de Quick-Sol®. La plantación de maíz tiene 22 días después de emergido (DDE) con riego por aspersión.
El silicio (Si) es el segundo más abundante elemento en la corteza terrestre sin embargo, muchos científicos discrepan acerca del rol bioactivo de este elemento en las plantas ya que en la mayoría de los suelos, su contenido es bajo (Epstein, 1994, 1999, 2000, 2001, 2005, 2009; Korndörfer and Lepsch, 2001; Epstein and Bloom, 2005; Quero Gutiérrez, 2009).
El silicio, hasta hace varios años se le consideraba como ‘elemento no inerte’ del suelo y por lo tanto ‘no esencial’ para el desarrollo y crecimiento de las plantas, aunque se reconocen los beneficios de su uso y aplicación en la agricultura (Silva, 1971; Exley, 1998), méxime cuando las plantas se exponen a estreses bióticos y abióticos (Savant et al., 1997; Ma, 2004; Hayat et al., 2010).
En la actualidad, el Si es considerado un ‘elemento mineral casi-esencial’, especialmente para las plantas Gramineas (Poaceae) como: arroz, maíz, sorgo (Sorghum bicolor Moench.), trigo, cebada (Hordeum vulgare L.), bambú (Guadua aculeata Rupr.), caña de azúcar (Saccharum officinarum L.) [Lewin and Reimann, 1969; Takahashi et al., 1990; Currie and Perry, 2007].
Aplicaciones de fertilizantes edáficos mantienen la fertilidad de los suelos y la productividad de los cultivos (Ren et al., 2002), ya que los mismos suplen los requerimientos nutricionales con los cuales expresan su máximo potencial de crecimiento y producción (Xing and Zhang, 1998). En maíz se reporta que la adición de Si hidrosoluble incrementa la eficiencia en el uso del agua al reducir la transpiración a través de las hojas, regulando la apertura y cierre de los estomas, así como disminuyendo la tasa del flujo de agua a través del xilema de la planta (Gharineh and Karmollachaab, 2013), mejora la arquitectura y el área foliar, al igual que retrasa la senescencia de las hojas (Gao et al., 2004; Zou et al., 2007).
El Si hidrosoluble es absorbido por las plantas en forma de ácido ortosilícico (H4SiO4) durante su desarrollo vegetativo y su contenido en las plantas varía de 0.1% hasta 10% (Epstein, 1999). A pesar de no ser un elemento esencial para el desarrollo vegetativo de las plantas, para el cultivo del maíz, la deficiencia de Si causa un desbalance de los nutrientes del suelo que puede provocar el pobre desarrollo de las plantas (Savant et al., 1999). La aplicación foliar de Quick-Sol® (36% Si) incentiva la absorción de micronutrientes los cuales son requeridos en pequeñas cantidades por las plantas (Silva, 1971).
Quick-Sol® es un producto que contiene Si hidrosoluble, el cual es elaborado y vendido en los Estados Unidos de Norteamérica, en países de Centro y Sudamérica, así como en otros países del mundo. Elaborado químicamente, Quick-Sol® esta formulado para mejorar los niveles de fertilidad de suelo y simultáneamente, facilitar la absorción de nutrientes a través del sistema radicular de las plantas debido a su constitución de producto anfótero y a la promoción del intercambio de las cargas eléctricas de los elementos en el suelo, los que enriquecen la solución del mismo e incrementan la capacidad de intercambio catiónico (CIC) y con ello la fertilidad del suelo (Beyond International, 2015). Es por ello que la interacción química-iónica del Si soluble permite una mejor movilidad de los minerales, nutrientes, carbohidratos, metabolitos secundarios y proteínas (acuaporinas) a través de las células y tejidos de las plantas, los cuales promueven los procesos metabólicos y con ello inducen a que las plantas tengan un mayor crecimiento, mayor producción de biomasa, mayor productividad y rendimiento (Quero Gutiérrez, 2009).
Simultáneamente, Quick-Sol® incrementa la actividad enzimática y microbial, estimulando el desarrollo de la flora microbiana del suelo la cual tiende a incrementar la fijación y asimilación del nitrógeno (N2) a través de las bacterias nitrificantes del suelo (Micorrizas, Nitrobacter, Bradyrhizobium, Rhizobium, Azospirillum, Algas cianófitas [microalgas] y otros.
Estos microorganismos tienen un papel importante en la disolución del silicio ya que coadyuvan a su movilización en conjunto con otros minerales a través del sistema radicular de las plantas, dados los procesos de descomposición de la materia orgánica del suelo por parte de la flora microbiana (Quero, 2009). Aplicaciones de Quick-Sol promueven el desarrollo del sistema radicular de las plantas el cual se observa a través del mayor desarrollo, tamaño y diámetro de raíces (Beyond International, 2015).
Formulado a base de silicio, el Quick-Sol® es hidrosoluble, el cual contiene: Ca, Cu, Fe, Mg, Mn, Zn, Sodio (Na), ácido fúlvico y húmico. Las características y bondades del uso de Quick-Sol® son:
• Biodegradable
• Estimulante microbial
• Rompe tensión superficial, siendo un excelente surfactante
• No ácido, no caustico, no inflamable y no tóxico.
• Soluble en agua
• Nutriente vegetal
• Certificación orgánico
• No carcinógeno
Entre otros efectos benéficos del Quick-Sol® (Si hidrosoluble), la resistencia de las plantas a los factores bióticos radica en: 1) el incremento de la resistencia a los ataques de hongos fitopatógenos debido a la formación de la doble capa de Si en la pared celular de las hojas, 2) la formación de compuestos polímeros complejos de Si en las paredes celulares de los tejidos de las plantas que incrementan las defensas del sistema inmunológico de las mismas, y 3) el incremento de los compuestos fenólicos y fitoalexinas que incrementan la actividad de la quitinasa, peroxidasa y polifenoles oxidasa en respuesta a la infección por organismos fitopatógenos (Takahashi, 1996; Datnoff et al., 2001; Ma, 2004). Adicionalmente, el Quick-Sol® incentiva las defensas de las plantas contra los ataques de plagas y enfermedades, incrementa los mecanismos de defensa contra los efectos tóxicos de los metales pesados, salinidad de los suelos, estrés hídrico (sequía o aniego), altas y bajas temperaturas debido al cambio climático, deficiencia de minerales esenciales, alta incidencia de los rayos solares ultravioleta (Rayos UV), etc. (Datnoff et al., 2001; Ma et al., 2001; Ma, 2004).
El objetivo del presente estudio fue el de evaluar el efecto de la aplicación foliar de Quick-Sol® (36% Si) en un cultivo de maíz para producción de semilla.
MATERIALES Y METODOS
En la región del occidente del país, en el departamento de León, Nicaragua, se realizó un estudio de campo donde se aplicó Quick-Sol® (Na2SiO3) 36% p/v de Si-hidrosoluble, a un cultivo de maíz var. NB-6, para la producción de semilla durante la época de siembra de primera (Junio-Octubre, 2015).
El estudio de campo se llevó a cabo en un lote de 0.5 ha, en una plantación de maíz para producción de semilla (Junio 2015). El objetivo fue el de evaluar la aplicación foliar de 1 lt•ha-1 de Quick-Sol® en maíz bajo condiciones de riego y manejo agronómico que tiene contemplado la empresa SEMSA (Semilla Mejorada, S.A. – fbaltoda@turbonett.com.ni), León, Nicaragua). Complementariamente, se realizó una aplicación foliar de los productos siguientes: Crop Plus, Cyto Nutri Boro, Cyto Nutri Zinc y Cyto Elicitor Cobre (productos de la línea Cytozyme). Estos productos fueron aplicados foliarmente 7 dias después de la aplicación de Quick-Sol a dosis de 500, 350, 350, y 350 ml/mz, respectivamente.
Se escogieron 12 surcos lineales por bloque (4 bloques) para un total de 48 surcos lineales y un área experimental de 0.25 ha. El suelo es de tipo franco-arcillo-limoso. La aplicación de Quick-Sol® fue realizada a plantas de maíz en desarrollo a 22 días después de la emergencia (DDE). El testigo fue un área de maíz sin aplicación de Quick-Sol® con una área de 0.25 ha.
Se evaluaron las siguientes variables: Altura de planta y de mazorca (cm), longitud y ancho de hojas (cm), días a floración, clorofila (SPAD), longitud y diámetro de mazorca (mm), peso de mazorca (g), número de hileras y granos por mazorca, peso total de granos (g), rendimiento (kg/ha), porcentaje de humedad (%) y, diámetro (mm) y peso de raquis (g).
Las mediciones de clorofila se realizaron a los 22, 30 y 42 DDE (Julio 29, Agosto 6 y Agosto 18), para la variable clorofila, respectivamente. Un total de cuarenta y ocho (48) observaciones fueron colectadas por bloques de 12 surcos en un área de 0.25 ha. Las restantes variables fueron medidas a los 66 DDE y los datos de rendimientos fueron medidos a los 113 DDE.
El diseño experimental utilizado fue el de Bloques Completamente al Azar (BCA) con cuatro repeticiones y el análisis estadístico fue realizado usando SAS 9.4 (SAS Institute, Cary, NC), utilizando el procedimiento PROC GLM para el ANDEVA de doble entrada, PROC t-Test para la separación de medias y Tuckey, p = 0.05, PROC MEAN STDERR para las medias, PROC REG para las líneas de regresión.
RESULTADOS Y DISCUSION
Altura de Planta
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® con 220.29 cm. superior al tratamiento control (197.06 cm), en un 12%. Las líneas de regresión confirman que el tratamiento Quick-Sol® es superior al tratamiento control. Adicionalmente se infiere, que dados los valores bajísimos de los coeficientes de regresión para el tratamiento Quick-Sol® (r2=0.001) y el control (r2=0.005), existe una gran heterogeneidad en las alturas de plantas y que otros factores, además del efecto de la aplicación foliar de Quick Sol®, pudieron influenciar las diferencias estadísticas para la variable altura de planta (Foto 2).
Longitud de Hoja
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, siendo superior el tratamiento Quick-Sol® con 102.85 cm. al tratamiento control (98.50 cm), en un 4.4%. Las líneas de regresión indican un incremento positivo para el tratamiento Quick-Sol® y negativo para el control dados los valores de los coeficientes de regresión de 0.24 y 0.003, para el Quick Sol® y el Control, respectivamente.
Foto 2. Plantas de maíz (Zea mays L.), var. NB-6. Estado de desarrollo de plantación de maíz: 73 días después de la emergencia (DDE) del lote Tratamiento control (izq.) con menor desarrollo vegetativo y menor altura de plantas comparadas con las plantas tratadas con Quick-Sol® (der.).
Ancho de Hoja
Significativas diferencias estadísticas fueron determinadas entre el tratamiento Quick-Sol® con 10.60 cm y el tratamiento Control con 9.92 cm. El tratamiento Quick Sol® fue superior al Control en un 7%. Las líneas de regresión indican un incremento positivo para el tratamiento Quick-Sol® y negativo para el control. Los valores de los coeficientes de regresión fueron de 0.07 y 0.02 para el tratamiento Quick Sol® y para el Control, respectivamente (Foto 3).
Floración
No se determinaron diferencias significativas entre los tratamientos Quick-Sol® y Control. Sin embargo, en cuanto al tipo de floración: diferencias significativas (p=0.05) fueron determinadas en cuanto al tiempo de emisión de la floración, siendo mayor para la flor femenina con 54.65 DDE y menor para la flor masculina con 52.54 DDE.
Clorofila (SPAD)
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® (48.32) superior al tratamiento control (41.70), en un 16%. Las líneas de regresión indican un incremento positivo de los valores de la variable dependiente (clorofila), para ambos tratamientos, siendo superiores los valores para el tratamiento Quick-Sol®.
Foto 3. Hojas de maíz (Zea mays L.), var. NB-6 colectadas a los 73 días después de la emergencia del lote de maíz. Tratamiento control (izq.) con ancho de hoja menor que la hoja tratada con Quick-Sol® (der.).
Altura de Mazorca
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® con 130.19 cm. superior al tratamiento control (114.71 cm), en un 13.5%. Las líneas de regresión indican un incremento positivo para el valor de la variable dependiente para el tratamiento Quick-Sol, y negativo para la variable dependiente en el tratamiento Control, lo cual queda demostrado al considerar los coeficientes de regresión de 0.004 (Quick-Sol®) y 0.0001 (Control), respectivamente; esto indica que hubo una mayor heterogeneidad en las alturas de mazorcas para el tratamiento control que para el tratamiento Quick-Sol®.
Longitud de mazorca
Diferencias significativas fueron determinadas entre el tratamiento Quick-Sol® y el Control, siendo las mazorcas tratadas con Quick-Sol® las que tuvieron mayor longitud con 16.17 cm que las del Control con 13.74 cm. El tratamiento Quick-Sol® fue superior al control en un 17.7%. Las líneas de regresión indican un incremento positivo de los valores de la variable dependiente (altura de mazorca), mientras que para el control fueron negativos (Fotos 4 y 5).
Diámetro de Mazorca
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, donde el Quick-Sol® fue superior (4.54 mm) con respecto al control (4.18 mm). El tratamiento Quick-Sol® fue superior en un 8.6% al tratamiento control, lo que demuestra que hubo una cantidad de mazorcas significativamente de mayor tamaño cuando recibieron la aplicación de Quick-Sol® comparadas con las mazorcas del tratamiento control, siendo más homogéneas, al comparar los coeficientes de regresión delas mazorcas tratadas con Quick-Sol (r2=0.05) que las no tratadas (control) con un r2=0.22 (Foto 4 y 5).
Peso de Mazorca
Se determinaron diferencias significativas entre los tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® con 138.77 gramos promedio por mazorca, superior en un 29.4% al tratamiento control con 107.25 gramos. Las líneas de regresión lineal indican que existe una tendencia positiva para ambos tratamientos, sin embargo, comparando los valores de los coeficientes de regresión (r2), se puede observar que el valor del tratamiento control fue de 0.28, lo cual indica que existe una mayor variabilidad del control con respecto al tratamiento Quick-Sol® con 0.02. De los resultados se puede inferir que otros factores, tal es el caso del manejo del cultivo y el peso de raquis, pudieron haber influenciado el peso de mazorca (Foto 5).
Foto 4. Mazorcas de maíz (Zea mays L.), var. NB-6 cosechadas a los 113 días después de su emergencia (DDE). Tratamiento control (izq.) con mazorcas de menor tamaño comparadas con el tratamiento Quick-Sol® (der.).
Número de Hileras por Mazorca
Se determinaron diferencias significativas entre el número de hileras por mazorca, siendo el tratamiento Quick-Sol® con un promedio de 15.08 hileras, superior en un 6.4% al tratamiento control con 14.17 hileras. Las líneas de regresión indican que los valores de Quick-Sol® tienden a disminuir, mientras que los del control tienden a aumentar, sin embargo, comparando los valores del coeficiente de regresión (r2), se puede observar que el valor del tratamiento control fue de 0.03, lo cual indica que existe una mayor variabilidad del tratamiento control con respecto al tratamiento Quick-Sol® con 0.07.
Número de Granos por Mazorca
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® superior al tratamiento Control con un 23.1%, con promedios de 490.25 y 398.27 granos por mazorca para el Quick-Sol® y Control, respectivamente. Las líneas de regresión indican un incremento positivo de los valores de la variable dependiente para el tratamiento Quick-Sol®, mientras que para el Control tienden a disminuir. Adicionalmente y considerando los coeficientes de regresión de 0.002 (Quick-Sol®) y 0.04 (Control), se demuestra la mayor heterogeneidad en las alturas de plantas para el tratamiento control. Como conclusión, de las líneas de regresión lineal se pudo observar que el efecto del tratamiento Quick-Sol® incrementó el número de granos por mazorca.
Foto 5. Mazorcas de maíz (Zea mays L.), var. NB-6 cosechadas a los 113 días después de su emergencia (DDE). Tratamiento control (izq.) con mazorcas de menor tamaño comparadas con el tratamiento Quick-Sol® (der.).
Peso Total de Granos por Mazorca
Se determinaron diferencias significativas en el peso total de granos por mazorca, siendo el tratamiento Quick-Sol® con un peso promedio de 110.81 gramos, superior en un 33.6% al tratamiento control con 82.94 gramos. Las líneas de regresión indican que los valores de Quick-Sol® y el Control tienden a disminuir, sin embargo comparando los valores del coeficiente de regresión (r2), se puede observar que el valor del tratamiento control fue de 0.02, lo cual indica que existe una mayor variabilidad del tratamiento control con respecto al tratamiento Quick-Sol® con 0.0002.
Humedad de Grano
No significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, sin embargo, el tratamiento Quick-Sol® tuvo el menor porcentaje de humedad con 14.20%, comparado al tratamiento control con 14.76%. Las líneas de regresión indican un incremento positivo de los valores de la variable dependiente para el tratamiento Quick-Sol®, mientras que para el Control tienden a disminuir. Adicionalmente y considerando los coeficientes de regresión de 0.47 (Quick-Sol®) y 0.003 (Control), se demuestra la mayor heterogeneidad en la humedad de granos para el tratamiento control.
Peso de Raquis de Mazorca
Significativas diferencias fueron determinadas entre los tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® con 24.85 gramos superior en un 38.5% al tratamiento control con 17.94 gramos. Las líneas de regresión tienden a disminuir con respecto a los valores de la variable dependiente: peso de raquis de mazorca; sin embargo, el tratamiento Quick-Sol® fue superior al Control, con lo cual se infiere que el Quick-Sol® incrementó peso de raquis de mazorca.
Diámetro de Raquis
Significativas diferencias estadísticas fueron determinadas entre tratamientos, siendo el tratamiento Quick-Sol® con un diámetro promedio de 29.38 mm superior al del tratamiento control (25.67 mm) en un 14.5%. Las líneas de regresión indican un incremento negativo de los valores de la variable dependiente (diámetro de raquis), siendo superior los valores del tratamiento Quick-Sol® comparados a los del Control, lo cual indica que hubo una mayor variabilidad en el Control, lo cual se puede demostrar con los valores de los coeficientes de regresión, el cual se observa que para el Quick-Sol® fue de 0.0002 y para el control fue de 0.002.
Rendimiento
Significativas diferencias fueron determinadas entre los promedios de los tratamientos, donde el Quick-Sol® fue superior (6766.21 kg•ha-1) con respecto al control (5064.16 kg•ha-1). El tratamiento Quick-Sol® fue superior en un 33.6% al tratamiento control, lo que demuestra que una cantidad significativamente mayor de grano fue obtenida de las plantas de maíz tratadas con Quick-Sol® comparado al tratamiento control, y considerando los coeficientes de regresión, se infiere que hubo una mayor homogeneidad de los datos del tratamiento Quick-Sol® (0.0002) comparado con el tratamiento control, el cual tuvo la mayor variabilidad con un r2 = 0.02.
CONCLUSION FINAL
En general, el efecto de la aplicación de Quick-Sol® con un contenido de 36% Si hidrosoluble asimilable, en plantas de maíz de la variedad NB-6, incrementó significativamente las variables de crecimiento y los componentes de rendimiento. La aplicación foliar de 1 lt•ha-1 de Quick-Sol® incrementó significativamente los valores de las variables: altura de planta y de mazorca, longitud y ancho de hojas, clorofila (SPAD), longitud, diámetro y peso de mazorca, diámetro y peso de raquis, el número de hileras y de granos por mazorca, así como el rendimiento en kilogramos por hectárea (Cuadro 1). %. Los resultados de este estudio confirma los efectos benéficos de la aplicación de Quick-Sol sobre el cultivo de maíz reportados por diferentes investigadores (Xing and Zhang, 1998; Ren et al., 2002; Gao et al., 2004, Owino-Gerroh and Gascho, 2004; Zou et al.,2007; Kaya et al., 2009). Esto confirma que la aplicación de Quick-Sol® tiene efectos benéficos sobre el cultivo de maíz al promover las variables de crecimiento y los componentes de rendimiento de grano de maíz.
Foto 5. Lote de maíz (Zea mays L.), var. NB-6. Desarrollo de parcelas a 73 días después de su emergencia (DDE). Tratamiento control (der.) y tratamiento con Quick-Sol® (izq.).
Cuadro 1. Análisis de varianza (n = 12) y separación de medias como efecto de la aplicación foliar de Quick-Sol®y en un
cultivo de maíz (Zea mays L.) var. NB-6. Finca: San Gilberto, Quesalguaque, León, Nicaragua. Junio - Octubre, 2015.
Factor
Tratamiento
p-value
Regresión lineal
r2
Medias
Separación de mediasz
Altura de planta, cm Quick Sol <0.0001 Y = 221.09 – 0.21x 0.001 220.29 A
Control Y = 198.98 – 0.51x 0.005 197.06 B
Longitud de hojas, cm Quick Sol <0.0001 Y = 99.18 + 0.98x 0.24 102.85 A
Control Y = 98.88 – 0.10x 0.003 98.50 B
Ancho de hoja, cm Quick Sol 0.0002 Y = 10.25 + 0.09x 0.07 10.60 A
Control Y = 10.06 – 0.04x 0.02 9.92 B
Floración, días Quick Sol 0.6273 Y = 50.50 + 2.00x 0.29 53.50 A
Control Y = 50.38 + 2.20x 0.34 53.69 A
Clorofila, SPAD Quick Sol <0.0001 Y = 40.39 + 3.40x 0.33 48.32 A
Control Y = 35.79 + 2.53x 0.28 41.70 B
Altura de mazorca, cm
Quick Sol <0.0001
Y = 129.12 + 0.28x 0.004 130.19 A
Control Y = 114.79 – 0.02x 0.0001 114.71 B
Longitud de mazorca, cm Quick Sol <0.0001 Y = 12.74 + 0.27x 0.20 16.17 A
Control Y = 16.66 – 0.13x 0.04 13.74 B
Diámetro de mazorca, cm Quick Sol <0.0001 Y = 4.64 – 0.03x 0.05 4.54 A
Control Y = 3.98 + 0.06x 0.22 4.18 B
Peso de mazorca, g. Quick Sol <0.0001 Y = 134.31 + 1.19x 0.02 138.77 A
Control Y = 86.64 + 5.50x 0.28 107.25 B
Cuadro 1---continuado.
Factor
Tratamiento
p-value
Regresión lineal
r2
Medias
Separación de mediasz
No. de hileras por mazorca
Quick Sol 0.0193
Y = 15.83 – 0.20x 0.07 15.08 A
Control Y = 13.75 + 0.11x 0.03 14.17 B
No. de granos por mazorca
Quick Sol <0.0001
Y = 484.95 + 1.42x 0.002 490.25 A
Control Y = 420.21 – 5.85x 0.04 398.27 B
Peso total de granos por mazorca, g. Quick Sol <0.0001 Y = 111.22 – 0.11x 0.0002 110.81 A
Control Y = 87.37 – 1.18x 0.02 82.94 B
Humedad de grano, % Quick Sol 0.1798 Y = 13.51 + 0.18x 0.47 14.20 A
Control Y = 14.83 – 0.02x 0.003 14.76 A
Peso de raquis de
mazorca, g. Quick Sol <0.0001 Y = 26.02 – 0.31x 0.02 24.85 A
Control Y = 18.04 – 0.03x 0.0002 17.94 B
Diámetro de raquis, mm Quick Sol <0.0001 Y = 29.30 – 1.57x 0.001 29.38 A
Control Y = 25.70 – 0.01x 0.0001 25.67 B
Rendimiento, kg•ha-1 Quick Sol <0.0001 Y = 6790.9 – 6.59x 0.0002 6766.21 A
Control Y = 5334.8 – 72.2x 0.02 5064.16 B
z Datos analizados usando SAS PROC GLM, SAS REG para las líneas de regresión, Separación de medias realizada
usando el test estudentizado de Tukey, p?0.05. Medias con letras iguales dentro del mismo factor son estadísticamente
no significativas.
y Tratamiento: Quick Sol® - 1 lt•ha-1 (aplicación foliar) + una aplicación complementaria foliar de Crop Plus (500 ml•ha-1),
Cyto Nutri Boro (350 ml•ha-1) Cyto Nutri Zinc (350 ml•ha-1) y Cyto Elicitor Cobre (350 ml•ha-1).
Literatura citada
Aziz, T., M.A. Gill, and T. Rahmatullah. 2002. Silicon nutrition and crop production: A review. Pakistan Journal of Agricultural Sciences 39(3):181-187.
Covshoff, S. and J.M. Hibberd. 2012. Integrating C4 photosynthesis into C3 crops to increase yield potential. Current Opinion in Biotechnology 23(2):209-214.
Currie, H.A. and C.C. Perry. 2007. Silica in plants: Biological, biochemical and chemical studies. Annals of Botany 100:1383-1389.
Datnoff, L.E., K.W. Seebold, and F.V.Correa-V. 2001. The use of silicon for integrated disease management: reducing fungicide applications and enhancing host plant resistance. pp:171-184. In: L.E. Datnoff, G.H. Snyder, and G.H. Korndörfer (eds.). Silicon in agriculture. Elsevier Science B.V. Amsterdam, The Netherlands. 403 p.
Epstein, E. 1994. The anomaly of silicon in plant biology. Proceeding of the National Academy of Sciences of the United States of America 91:11-17.
Epstein, E. 1999. Silicon. Annual Review of Plant Physiology and Plant Molecular Biology 50:641-664.
Epstein, E. 2000. The discovery of the essential elements. pp:1-16. In: S.-D. Kung and S.-F. Yang (eds.). Discoveries in Plant Biology. III. World Scientific Publishing Co. Inc. Singapore. 473 p.
Epstein, E. 2001. Silicon in plants: Facts vs. concepts. pp:1-15. In: L.E. Datnoff, G.H. Snyder, and G.H. Korndörfer (eds.). Silicon in agriculture. Elsevier Science B.V. Amsterdam, The Netherlands. 403 p.
Epstein, E. 2005. Silicon in agriculture: A historical review. pp:12-15. In: G.H. Korndörfer (ed.). III Silicon in Agriculture Conference. Universidad Federal de Uberlândia (UFU). Uberlândia, Mina Gerais, Brazil. 155 p.
Epstein, E. 2009. Silicon: Its manifold roles in plants. Annals of Applied Biology 155:155-160.
Epstein E. and A.J. Bloom. 2005. Mineral nutrition of plants: Principles and perspectives. Second edition. Sinauer Associates. Sunderland, MA. 400 p.
Exley, C. 1998. Silicon in life: A bioinorganic solution to bioorganic essentiality. Journal of Inorganic Biochemistry 69:139-144.
Gao, X.P., C.Q. Zou, and L.J. Wang. 2004. Silicon improves water use efficiency in maize plants. Journal of Plant Nutrition 27(8):1457-1470.
Gharineh, M.H. and A. Karmollachaab. 2013. Effect of silicon on physiological characteristics wheat growth under water-deficit stress induced by PEG,” International Journal of Agronomy and Plant Production 4(7): 1543-1548.
Hayat, Q., S. Hayat, M. Irfan, and A. Ahmad. 2010. Effect of exogenous salicylic acid under changing environment: A review. Environmental and Experimental Botany 68:14-25.
Kage, U., D. Madalageri, L. Malakannavar, and P. Ganagashetty. 2013. Genetic diversity studies in newly derived inbred lines of maize (Zea mays L.). Molecular Plant Breeding. Vol. 4 (9):77-83.
Kaya, C., A. Levent-Tuna, O. Sonmez, F. Ince, and D. Higgs. 2009. Mitigation effects of silicon on maize plants grown at high zinc. Journal of Plant Nutrition 32:1788-1798.
Korndörfer, G.H. and I. Lepsch. 2001. Effect of silicon on plant growth and crop yield. pp:133-147. In: L.E. Datnoff, G.H. Snyder, and G.H. Korndörfer (eds.). Silicon in agriculture. Elsevier Science B.V. Amsterdam, The Netherlands. 403 p.
Korndörfer, G.H., M. Benedini, F.B. Paula, R.C.S. Chagas. 2000 Cimento como fonte de silício para a cana-de-açúcar. Stab 19:30-33.
Lewin, J. and B.E.F. Reimann. 1969. Silicon and plant growth. Annual Review of Plant Physiology 20:289-304.
Ma, J.F. 2004. Role of silicon in enhancing the resistance of plants to biotic and abiotic stresses. Soil Science and Plant Nutrition 50(1):11-18.
Ma, J.F., Y. Miyake, and E. Takahashi. 2001. Silicon as a beneficial element for crop plants. pp:17-39. In: L.E. Datnoff, G.H. Snyder, and G.H. Korndörfer (eds.). Silicon in agriculture. Elsevier Science B.V. Amsterdam, The Netherlands. 403 p.
Maiti, R.K., L.E.D. Amaya, S.I. Cardona, A.M.O. Dimas, and H.D.L. Castillo. 1996. Genotypic variability in maize cultivars for resistance to drought and salinity at the seedling stage. Journal of Plant Physiology 148:741-744.
Owino-Gerroh, C. and G.J. Gascho. 2004. Effect of silicon on low soil phosphorus sorption and on uptake and growth of maize. Communications in Soil Science and Plant Analysis 35(15-16):2369-2378.
Quero Gutiérrez, E. 2009. Nutrición con silicio y sus aplicaciones a cultivos a cielo abierto y en agricultura protegida: un pequeño recorrido por la naturaleza. Quero Consulting, S.C. – Simposio Internacional de Nutrición Vegetal. Guadalajara, México. 38 p.
Ren, J., J.R. Guo, and X.Q.Xing. 2002. Preliminary exploration into yield increase effects and yield increase mechanism of silicate fertilizer on maize. Journal of Maize Sciences. Vol. 10(2):84-86.
SAS Institute, Inc. 1982. SAS User’s guide: Statistics. SAS Institute, Inc. Cary, NC. USA.
Savant, N.K., G.H. Snyder and L.E. Datnoff. 1997. Silicon management and sustainable rice production. Adv. Agron., 58:151-199.
Savant, N.K., G.H. Korndörfer, L.E. Datnoff, and G.H. Snyder. 1999. Silicon nutrition and sugarcane production: A Review. Journal of Plant Nutrition, 22:1853-1903.
Silva, J.A. 1971. Possible mechanisms for crop response to silicate applications. Proceedings of the International Symposium on Soil Fertility Evaluation, New Delhi, India. Vol. 1:807-814.
Takahashi, E. 1996. Uptake mode and physiological functions of silica. pp:99-122. In: T. Matsuo, K. Kumazawa, R. Ishii, K. Ishihara, and H. Hirata (eds.). Science of the rice plant: Physiology. Volume 2. Food and Agriculture Policy Research Center Publisher. Tokyo, Japan. 1240 p.
Takahashi, E., J.F. Ma and Y. Miyake. 1990. The possibility of silicon as an essential element for higher plants. Comm. Agric. Food Chem., 2: 99-122.
Xing, X.R. and L. Zhang. 1998. Review of the studies on silicon nutrition of plants. Chinese Bulletin of Botany 15(2):33-40.
Zou, C.Q., X.P. Gao, and F.S. Zhang. 2007. Effects of silicon application on growth and transpiration rate of maize. Chinese Journal of Eco-Agriculture 15(3):55–57.
****