Condición corporal al parto

Tal parece que lo estábamos, de acuerdo a un estudio publicado en el el Journal of Dairy Science by P. M. Fricke,  M.C.Wiltbank, and  J.R.Pursley,  titulado “The High Fertility Cycle”.

De acuerdo con esta revisión, tasas de concepción son más elevadas en vacas que paren con BCS’s entre 2.7 y 3. 0.

Estas vacas, en todas las paridades: perdieron menos BC durante el postparto, tuvieron menos problemas de salud, incrementaron fertilidad, quedaron preñadas a los 130 días y mostraron una menor ganancia en BC al terminar  la lactación.

Bajo condiciones corrientes de manejo, la gran mayoría de los rebaños comerciales tienen como meta la de secar a un BCS=3.5, aunque bien sabemos que este número es mayor en una gran cantidad de animales, debido principalmente al tipo de alimentación que los animales reciben, y a la genética de cada vaca.

Esta idea no es nueva, Dr. Jack H Britt público un documento relacionado con el tema en 1992 (ver el cuadro adjunto y subsiguientes). Aunque el número de vacas en el experimento fue insignificante, muestra claramente que aquellos animales secados con BCS< 3, mantuvieron o perdieron muy poco peso después del parto, en contraposición a aquellos animales que fueron secados a BCS> 3, que perdían peso durante el posparto.

Hoy día la gran mayoría de escuelas en ciencias veterinarias ensenan que es normal para las vacas en perder peso durante las primeras 5 semanas del posparto (ver el cuadro) y hasta se le ha designado con un nombre: Balance Negativo de Energía; programas empleados en la calculación de raciones para vacas durante el posparto, estiman estas pérdidas y tratan de ajustarlas.

Interesantemente, estas vacas que mantenían el peso fueron capaces de concebir excepcionalmente mejor que aquellas que perdían peso durante el posparto (ver el cuadro), y es básicamente lo que todos aquellos que trabajamos en alguna forma u otra en reproducción conocemos bien, vacas en un balance negativo de energía, necesitan recuperar el peso perdido durante el posparto para empezar a ciclar normalmente.

El siguiente cuadro nos muestra lo que Dr. Britt argumentaba era la razón por la cual las ondas foliculares no resultaban en un ocito a término, cuando el animal estaba en un balance negativo de energía.

La flecha indica un folículo en desarrollo cuando el balance de energía comienza a ser positivo, este tiempo es equivalente a 3 o 4 ciclos (=> 70DDP); dependiente del consumo diario de energía en la ración y no previos problemas de salud en el animal. La explicación más simple de este fenómeno seria que existe algún tipo de “señal metabólica”, que bloquea el desarrollo y dehiscencia de los primeros folículos y no es hasta que el animal recupera su condición física y el balance de energía es positivo que esta señal desaparece.

Recientemente se publicó un estudio en la U. de Wisconsin donde se trata el tema que Dr. Britt había señalado hace más de 25 años, pero con una mayor cantidad de animales en el experimento y bajo diferentes programas de reproducción (ver el cuadro).

El experimento fue realizado en 2 ranchos comerciales con más de 2000 vacas incluidas, bajo el mismo programa Ovsynch-TAI y con las mismas normas de manejo. BCS’s fueron tabulados antes y después del parto durante 21 días.

Este experimento demuestra que no todas las vacas bajo un mismo sistema de nutrición y bajo el mismo programa de reproducción pierden peso durante las primeras semanas después del parto, en este caso 21 días. La flecha señala que la cantidad de leche corregida por energía o ECM fueron similares; sin embargo, la diferencia fue que aquellas vacas que perdían peso estaban adquiriendo la energía faltante, movilizando sus propias reservas de energía acumuladas en la forma de grasa corporal, y todos sabemos las consecuencias metabólicas que este camino metabólico causa en algunas vacas

El cuadro siguiente muestra cómo se llevó a cabo el programa reproductivo en ambos ranchos, Ovsynch (doble) + TAI:

Mencionamos que todas estas vacas estaban bajo el mismo programa reproductivo y nutricional. El cuadro siguiente muestra el porcentaje (%) de preñeces a los 40 y 70 días después de TAI en aquellos grupos que: perdieron (rojo), mantuvieron (gris) y ganaron (verde) peso durante los 21 días post parto.

La pregunta seria, a que exactamente se deben estas diferencias? No es lógicamente debido al programa Ovsynch-TAI, ya que es el mismo para todos los animales. Es simplemente debido a que aquellas vacas que mantuvieron o ganaron peso, fueron capaces de un balance de energía positivo y por lo tanto mayor fertilidad en los ciclos estruales. 

Lo anterior seria la respuesta más acertada a aquellos lecheros cuando preguntan al médico veterinario como cambiar el protocolo reproductivo para obtener más preñeces. Los protocolos reproductivos trabajan mejor cuando BCS’s están alrededor de 3 o =< 3 antes del parto.

Otro estudio llevado a cabo en Brazil, enfoca aquellos problemas metabólicos más comunes durante el postparto y su relación con BCS’s

El estudio aunque con un número menor de vacas, es suficiente para demostrar que cambios en BCS’s durante 21 días antes del parto y 21 días después del parto modifican el perfil metabólico de NEFA’s y BHBA’s durante el periodo de transición. Todos los animales recibieron el mismo protocolo reproductivo y alimentación.

En el cuadro arriba, podemos observar que aquellos eventos que sucedían en vacas que perdieron peso durante el periodo de transición, fueron más afectadas de problemas metabólicos, que aquellas que mantuvieron y ganaron peso durante ese periodo. 

El siguiente cuadro indica que vacas que perdían BC lograban tasas de Preñez mucho menores que sus contra partes que mantenían y ganaban peso después del parto (18%, 27%, 53%) 30 días después de TAI y (16%, 25%, y 46%),  60 días después de TAI)

Otra vez, la misma pregunta, Cual es la asociación entre vacas que perdieron BC 21 durante la transición con el protocolo reproductivo? Y la respuesta es la misma, ninguna. Veamos el siguiente cuadro:

La respuesta es clara, vacas que paren gordas (> 3 BCS), van a perder peso durante el postparto, van a tener más eventos metabólicos y van a tener más días abiertos.

La necesidad de evitar que las vacas lleguen al parto con BCS’s> 3 o vacas gordas, es aparente y como evitar el sobre acondicionamiento de vacas secas es una prioridad en el manejo de vacas secas. 

Que están haciendo los nutricionistas para evitar este problema? La solución al problema no es sencilla desde el punto de vista nutricional. Selección genética basada principalmente en aquellos rasgos genéticos de producción  y sólidos en leche han dado por resultado que los animales coman más y acumulen peso durante los últimos meses de producción y secado.