Impacto del manejo de la alimentación durante los primeros 21 días postparto sobre producción de leche

La alimentación durante el periodo de transición (21 días pre y posparto) es uno de los manejos determinantes en la performance productiva de la vaca lechera (Grummer, 1995). La intervención en lactancia temprana con una alimentación basada en una dieta total mezclada (DTM) genera altas respuestas directas de mayor producción de leche, solidos, consumo de materia seca, mayor peso vivo y estado corporal (Fajardo, 2015) en comparación con dietas que incluyen pastoreo directo. Sin embargo, son muy escasos los trabajo que han reportado los efectos residuales que puede llegar a tener un periodo de alimentación diferencial (Chilibroste et al., 2012) durante el periodo de transición en lactancia temprana.

El trabajo se llevó a cabo en Facultad de Agronomía EEMAC - Paysandú, Uruguay, en vacas de parición de primavera. El protocolo experimental fue evaluado y aprobado por la Comisión Honoraria de Experimentación Animal de Uruguay (CHEA – UdelaR). Se evaluaron 2 tratamientos a) T21 (N = 18; 5 primíparas y 13 multíparas): 21 días estabulación en compost barn con suministro de 100% DTM. b) T0 (N = 15; 6 primíparas y 9 multíparas): 0 días de encierre con un acceso a un turno pastoreo luego del ordeño am y acceso a DTM en comederos a cielo abierto luego del ordeño pm. Al día 22 el tratamiento T21 pasó al mismo manejo que T0 (1 turno de pastoreo am + suplementación con DTM pm). El diseño experimental utilizado fue en bloques completos al azar, se bloquearon por número de lactancia, peso vivo y estado corporal. El peso vivo y estado corporal (escala 1-5) al parto fue de 566±48 y 660±84 kg, 3.2±-0.2 y 3.3±-0.3 en primíparas y multíparas, respectivamente. Se registró la producción de leche diaria durante las primeras 9 semanas postparto. La DTM durante los 21 días posparto en el tratamiento T21 estuvo compuesta por 44,3% de ensilaje de maíz, 4.7% heno de moha y 51% concentrado en base seca. La alimentación del tratamiento T0 y T21 luego del periodo de encierro, consistió en pastoreo directo (48% MS total) y suplementación con DTM (7.5% por ensilaje de maíz, 13.5% ensilaje de sorgo y 31% concentrado, base seca). El pastoreo se realizó en franjas de ocupación semanal de Festuca arundinacea, Avena sativa, Lolium multiflorum con Chichorium intybus y Trifolium pratense y Medicago sativa con Dactylis glomerata, con una asignación de 27 kg MS/VO/d (ras del piso).

El impacto de la alimentación durante los primeros 21 dpp divergió según la paridad (P< 0.001), la semana de lactación (P< 0.0001), y la la interacción paridad x semana x tratamiento (P< 0.0001). Durante las primeras 3 semanas, multíparas de T21 produjeron un 12% (4.4 l/v/d) más que multíparas T0 (40.3 vs 35.9 l/v/d; P< 0.0001) con un efecto residual de un 3% luego del cambio de la alimentación (semana 4-9) y un efecto global de 7% considerando los 60 dpp (40.3 vs. 37.7; P< 0.0001). Para primíparas, el manejo de la alimentación en las primeras 3 semanas no tuvo un impacto directo (26.6 vs. 25.9; P=0.96, T0 y T21 respectivamente). El cambio de alimentación hacia el pastoreo en T21 perjudicó la producción de leche derivando en una caída y en un efecto residual negativo de -13% (semanas 4-9) y de -6% considerando los 60 dpp (28.1 vs. 29.9; P=0.03). En primíparas la ausencia del impacto directo de la alimentación puede estar explicado por los mayores requerimientos que presentan debido a que se encuentran en crecimiento. Mientras que el impacto residual negativo puede ser explicado por los cambios en la condición social que genera el ingreso a un nuevo grupo (Ungerfeld y col., 2014), a la dificultad de adaptación al pastoreo y restricciones para cubrir los requerimientos que presentan en lactancia temprana (Chilibroste y col. 2012). Es necesario evaluar los resultados a nivel de adaptación comportamental para deducir las bases que explicaron este efecto.

Fig. 1. Producción de leche (litros/VO/d) de multíparas según tratamiento a lo largo de las semanas de lactación (*; p< 0.05; **p< 0.01; ***p< 0.001; ns sin diferencias). Barras verticales indican desvío estándar.

Fig. 2. Producción de leche de primíparas según tratamiento a lo largo de las semanas de lactación. Barras verticales indican desvío estándar.

Los resultados indican que el manejo de la alimentación tiene un impacto positivo en multíparas, tanto a nivel directo como residual. Es necesario profundizar en las bases de comportamiento, fisiológicas y metabólicas que median en la transición de una dieta total mezclada a un sistema mixto (pastoreo + DTM), para definir estrategias de alimentación exitosas en los efectos directos y en lograr niveles importantes de residualidad.