Este es un reporte de caso que describe la presentación clínica, el tratamiento y los hallazgos de necropsia e histopatología de una rumenitis micótica secundaria a acidosis ruminal en una becerra Holstein Friesian de 21 días de edad en México. El estudio fue elaborado por Carlos Alberto Hernández Sánchez, Mario Adán Bedolla Alva, Arturo Federico Olguín y Bernal, Ulises Jesús Bautista Pérez y Rodrigo González López. El artículo se publicó en Clínica veterinaria: abordaje diagnóstico y terapéutico, Vol. 11 e1122025117 2025 (doi.org/10.22201/fmvz23958766e.2025.11.117).
Análisis para el Profesional y el Productor: La Importancia del Diagnóstico Post-Mórtem y el Manejo de la Dieta
Este caso subraya la necesidad de considerar la rumenitis micótica (también conocida como mucormicosis o zigomicosis) como diagnóstico diferencial en casos de diarrea y muerte súbita en becerros, especialmente en presencia de factores predisponentes. La relevancia clínica reside en que los signos clínicos suelen ser inespecíficos. En la becerra, la presentación inicial fue una distensión abdominal leve y recurrente en el lado izquierdo con heces acuosas amarillentas, síntomas que pueden confundirse con problemas digestivos comunes. El tratamiento inicial, que incluyó la restricción del concentrado, sondeo oro-ruminal para aliviar el timpanismo y la administración de hidróxido de magnesio, resultó en una aparente mejoría inicial, pero no se dio de alta debido a la persistencia de la distensión y la hiporexia (disminución del apetito). La becerra fue hallada muerta diez días después del inicio del tratamiento.
Para el productor, este estudio destaca que la rumenitis micótica es una patología secundaria a trastornos metabólicos y fisicoquímicos, siendo la acidosis ruminal la causa más frecuente. En becerros, esta acidosis se produce por la fermentación de carbohidratos solubles (como leche o sustitutos lácteos) debido a la acumulación no fisiológica en el rumen , o por la administración excesiva de concentrados. El manejo nutricional de la becerra incluyó sustituto de leche en cubeta hasta los 60 días y concentrado comercial suplementado con heno de alfalfa a partir del tercer día. Este tipo de manejo puede predisponer a la acidosis y al consecuente daño de la mucosa, permitiendo la colonización por hongos oportunistas como Mucor, Rhizopus y Absidia.
La lección práctica principal es que la prevención se centra en la corrección de la acidosis y el ambiente ruminal , pues el pronóstico es reservado una vez que hay daño severo a la mucosa ruminal. El diagnóstico definitivo se logra mediante el examen post mortem, que en este caso reveló nódulos y úlceras en la mucosa del rumen, una úlcera extensa en el abomaso y, a nivel histológico, úlceras infiltradas por células inflamatorias con hifas ramificadas , confirmadas con la tinción de plata metenamina de Grocott. Estos hallazgos microscópicos también mostraron trombosis y daño vascular, una lesión característica de este tipo de hongos.
Punto de Debate para el Académico y Referente: Diseminación Hematógena y Diagnóstico Diferencial Fúngico
El estudio refuerza un punto de debate importante: la patogenia de la diseminación. Los hongos causantes, a menudo miembros de la clase Zygomycetes (como Mucor, Rhizopus y Absidia), tienen la capacidad de invadir los vasos sanguíneos. El análisis histopatológico de este caso identificó un trombo que obliteraba la luz de un vaso sanguíneo en la submucosa ruminal, con hifas inmersas en el infiltrado inflamatorio. Esto se correlaciona con la literatura que sugiere la diseminación sistémica por propagación hematógena de las formas hifales a partir de estos focos.
Además, el diagnóstico histopatológico exige la diferenciación entre zigomicetos y otros hongos filamentosos como Aspergillus spp. y Candida spp. Los zigomicetos se distinguen por sus hifas anchas, de grosor desigual, que se ramifican en ángulos rectos y carecen de los tabiques transversales (septos) típicos de Aspergillus spp. La identificación rigurosa de estas características es esencial para un diagnóstico morfológico preciso. La mucormicosis gástrica es una patología poco descrita en bovinos, lo que eleva la relevancia de reportes de caso como este.
Considerando que este caso se presentó en un becerro lactante de 21 días, ¿cuáles son los protocolos de alimentación líquida y de manejo del preiniciador más efectivos para minimizar el riesgo de reflujo de leche al rumen y la consecuente acidosis láctica, principal puerta de entrada para la rumenitis micótica?