Las causas de desecho en un establo lechero son muy variadas durante los 12 meses del año. En esta ocasión tomaremos como base ocho establos localizados en la Comarca Lagunera (Región Centro Norte de México) que se estuvieron evaluando durante 18 meses desde el inicio de 2024 hasta junio de 2025. Todos estos hatos tienen un manejo de primer nivel, produciendo un promedio anual por vaca superior a los 35 litros.
La causa de desecho más importante son los problemas reproductivos; a pesar de haber tenido un total de inseminaciones muy considerable y por lo tanto insostenible, suelen ser animales que nunca se pudieron preñar y esta razón es la causa mayor de desechos en los diferentes hatos. El concepto de baja producción también implica que las vacas deban irse al rastro, ya que su producción en el momento del desecho no paga la alimentación que consumen diariamente.
Otra causa de desecho (que es también un problema reproductivo) es el de los abortos, que en muchas ocasiones ocurren cuando la producción de leche de la vaca ya es muy baja. Existen también los problemas respiratorios, entre los cuales podemos incluir la neumonía; esta condición implica que, aunque la vaca esté gestante, debe irse al rastro, ya que propicia que la vaca deje de comer y, por lo tanto, también deje de producir leche.
Otras causas por las cuales las vacas dejan el hato con frecuencia son los problemas digestivos, que en la mayoría de los casos se observan con diarrea e inapetencia y que, de no tratarse a tiempo, bajarán la producción de leche de manera significativa.
Los problemas podales y las caídas son dos eventos que están muy relacionados, aunque no necesariamente son lo mismo. En el primer caso, las vacas se ven afectadas por lesiones en alguna de sus extremidades, lo que las hace caminar más lento o cojeando, además de permanecer más tiempo echadas, lo cual limita su consumo de alimento.
El concepto de vaca caída se refiere a aquellas vacas que repentinamente aparecen postradas en el corral. La pronta intervención y tratamiento de estos casos harán que el problema se solucione y, de no ser así, el destino de estas vacas será inevitablemente el desecho.
Por último, no podemos dejar de lado los problemas de la ubre, que al final se traducen en mastitis. Desde hace algunos años, esta condición ha dejado de ser un problema grave en los hatos lecheros de la Comarca Lagunera debido a la particular atención que se tiene no solo del Equipo de Ordeña, sino también en la limpieza y atención de los corrales donde descansan las vacas.