La explotación lechera es una empresa, que sin duda,en la actualidad enfrenta retos de gran magnitud. Las tendencias económicas mundiales emprenden rumbo hacia la apertura y desgravación de productos que durante mucho tiempo han sido protegidos arancelariamente.
Costa Rica desarrolló un sector lechero de alta tecnología y desarrollo mediante la innovación de los productores y su sentido del progreso, esto aunado a políticas gubernamentales que protegieron al sector del distorsionado mercado mundial de la leche.
Sin embargo, como antes mencioné, las tendencias rompen ese esquema de protección, lo cual obliga a los productores a buscar nuevas alternativas para seguir subsistiendo. Recordar que la lechería es un negocio no basta con solo observar parámetros productivos y reproductivos, se trata de buscar el progreso y la permanencia del sector productivo dentro del mercado.
En primera instancia, hay que comprender que ya pasó el tiempo de la valoración por PRODUCTIVIDAD, hacer entender al productor que la mejor vaca no es la que produce más leche. Los mejores animales son aquellos que producen mayor RENTABILIDAD, o mejor dicho, los que producen más dinero y no más leche.
Pero aún así, el concepto RENTABILIDAD no es adecuado al tiempo actual, debido a que la lechería más rentable no es necesariamente la que se mantendrá en el mercado. Hoy debemos promover la SOSTENIBILIDAD del sector lechero, o lo que quiere decir, la estabilidad de la empresa.
El manejo técnico (busca productividad) y el manejo financiero (busca rentabilidad) deben ir armonizados con prácticas sociales, de mercadeo y de manejo ambiental que busquen mantener a la empresa dentro del mercado. De poco le sirve a una empresa producir grandes cantidades de leche y obtener los mejores rendimientos económicos cuando son cerradas por factores de contaminación ambiental. Así mismo, la industrialización de América Latina ha despojado a las empresas agropecuarias de la mano de obra, que durante mucho tiempo sobró y hoy escasea.
Factores como la urbanización y el turismo ejercen enormes presiones al sector por la tenencia de la tierra y utilización. A pesar de todas las dificultades, la empresa lechera puede mediante la aplicación de la filosofía de la sostenibilidad mantenerse en la producción y seguir siendo atractiva como negocio rentable.
Nuevas técnicas de administración, la especialización de la mano de obra y el uso de nuevas opciones en alimentación (árboles forrajeros), el agroecoturismo (turismo rural) son algunas de las opciones que pueden ser adoptadas por los productores. Ademas de lo anterior, la diversificación de la producción debe ser el norte de todas las explotaciones lecheras, actividades como la lombricultura, cunicultura, apicultura, ganadería cárnica, cría de ovinos, entre otras actividades son altamente adaptables a los sistemas lecheros actuales.
En resumen, las lecherías de hoy que quieran estar presentes en el mañana deberán basar su sistema productivo en el ingenio y el trabajo dirigido a adaptar a la lechería a la situación actual.
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