Aplicación de modelos predictivos en la recuperación de suelos degradados y erosionados

Mediante la aplicación de las ecuaciones de predicción elaboradas en el Proyecto ”Impacto de la degradación en los rendimientos de los cultivos”, se ha establecido que los rendimientos de trigo y soja podrían aumentar entre el 40 y el 143 % y en maíz triplicarse, si se logra restablecer en el suelo niveles altos de materia orgánica, fósforo asimilable y se controla la tasa de erosión (3 %, 30 ppm y 10 t/ha/año, respectivamente). Este modelo señala que la profundización del perfil explorado por las raíces a 35 cm o más, es un requerimiento básico para el incremento de los rendimientos cuando el horizonte “A” ha sido erosionado. La recuperación de los suelos degradados puede producir un impacto productivo importante en la región pampeana, donde el 35 % de los suelos presenta algún grado de erosión., y en muchas áreas la erosión aún no ha sido controlada. Durante 2000, se instaló en Salto Argentino, un ensayo de recuperación de suelos erosionados, donde se aplicaron las prácticas adecuadas para generar las modificaciones edáficas sugeridas por el modelo para obtener un sustancial aumento en los rendimientos de soja de primera. Se localizó en Salto (provincia de Buenos Aires) un lote de campo erosionado y degradado con la idea de aplicarle un paquete tecnológico que permitiera incrementar drásticamente su producción. El objetivo del trabajo de recuperación de suelos degradados y erosionados es mejorar su infiltración, la captación del agua de lluvia, elevar su nivel nutricional, mejorar la exploración radicular de los cultivos y controlar la erosión. Se espera de esta manera lograr una respuesta productiva importante. En un lote del Establecimiento El Alba, sobre un suelo severamente erosionado de la serie Arroyo Dulce, se realizó un ensayo de recuperación de suelos erosionados. El ensayo está ubicado en un espacio entre terrazas, trabajado en siembra directa y sembrado con soja en octubre. Los tratamientos son I) subsolado a 35 cm aplicación profunda de yeso; II) subsolado sin enmiendas y III) testigo sin subsolar. El cultivo en terrazas combinado con la siembra directa reduce la tasa de erosión a 3 ton/ha/año y aumenta la captación de agua pluvial. La fertilización con nitrógeno y fósforo eleva el nivel de fertilidad a los niveles deseados. La descompactación subsuperficial mediante el subsolado tiene por objeto aumentar la tasa de infiltración y profundizar el horizonte explorado por las raíces a 35 cm de profundidad. El agregado de yeso tiene como finalidad prolongar el efecto del subsolado por más tiempo. Este ensayo se hizo dentro de un Acuerdo de Asistencia Técnica con Agrotécnica Las Rosas SRL. El tratamiento de subsolado con enmienda profunda se realizó con un Cultivie con distribuidor con conducto de aplicación profunda adaptación diseñada por el Instituto de Suelos. Se hizo en parcelas de 12m por 130 m por triplicado, separadas por parcelas subsoladas sin enmienda. Los alrededores del ensayo se tomaron como testigo. La aplicación de yeso en escamas de Yesomat, se realizó a 35 cm de profundidad a razón de 500 Kg /ha, dosis que equivale a 7 ton/ha en las bandas de 5 cm de ancho separadas por una distancia de 70 cm entre sí. Los primeros resultados muestran un incremento muy importante en la tasa de infiltración, medida con microsimulador de lluvias, después de 6 meses del subsolado. Luego de aplicarles una lluvia de 120 mm en una hora, se obtuvo una tasa de infiltración final en los tratamientos subsolados entre 54 y 66 mm/hora mientras que en testigo fué de 18 mm/hora. La altura de plantas fue de 71 cm en las parcelas subsoladas y de 56 cm en el testigo. El ensayo continúa en su etapa de evaluación.