Chile - Ensayo y Aprendizaje sobre palatabilidad en cerdos

Un equipo de investigadores, en su mayoria de Chile, presentó un trabajo sobre los efectos del ensayo y error y el aprendizaje social sobre la palatabilidad del sabor en cerdos. Lo más destacado de la investigacíon es que los lechones de cría fueron sometidos a un aprendizaje de sabor individual y social;  Ambos tipos de aprendizaje aumentaron las preferencias y la aceptabilidad de los sabores;  el breve contacto social con cerdos experimentados cambió la palatabilidad de los sabores; y las interacciones de hocico a hocico son importantes para aumentar la palatabilidad del sabor.

El trabajo publicado recientemente en Applied Animal Behaviour Science (Volume 236, March 2021) señala que la adquisición de comportamientos que mejoren la aceptabilidad de nuevos alimentos podría mejorar el rendimiento y el bienestar animal en la industria porcina. Los cerdos pueden aprender individualmente por ensayo y error y / o por aprendizaje social a consumir y preferir nuevos alimentos con sabor. Sin embargo, hay poca información sobre los efectos del aprendizaje sobre la palatabilidad de esos sabores.

Este estudio tuvo como objetivo investigar posibles cambios en las respuestas hedónicas de los cerdos, estimados por el tiempo medio de consumo por enfoque (CT / A), para sabores previamente aprendidos a través de experiencias individuales (Experimento 1) y socialmente mediante una breve interacción con un conespecífico experimentado (Experimento 2). Se utilizaron un total de 96 lechones para estudiar preferencias, aceptabilidad y palatabilidad por los sabores previamente aprendidos. Los sabores se asociaron con sacarosa al 4% (Experimento 1) o con un animal (Demostrador) que consumió recientemente el sabor (Experimento 2). Estos sabores o estímulos condicionados positivos (CS +) se compararon con los sabores de control que no estaban condicionados positivamente (CS-).

En el experimento 1, los cerdos prefirieron (P = 0.010) y tendieron a aceptar más (P = 0.069) de CS + que CS- en soluciones acuosas. Sin embargo, no se encontraron diferencias de palatabilidad (P = 0,875). En el experimento 2, los animales observadores tuvieron una mayor ingesta de CS + después de la interacción con los demostradores que consumieron el mismo alimento con sabor (P = 0.041). El tiempo de interacción hocico a hocico entre los manifestantes y los observadores tendió a presentar una correlación positiva con CT / A (r = 0,497, P = 0,1). Por lo tanto, tanto el aprendizaje individual por ensayo y error como el aprendizaje social, aumentaron la aceptación de los cerdos por los sabores de los alimentos. Sin embargo, solo el aprendizaje social modificó el patrón de consumo con la observación de una correlación entre los cambios en la relación CT / A y el grado de tiempo de contacto entre el hocico y el hocico entre manifestantes y observadores. Por tanto, los mecanismos y efectos del aprendizaje social e individual parecen diferir al menos parcialmente.

Independientemente del mecanismo, el hecho de que el aprendizaje asociativo pueda aumentar el consumo de los alimentos sugiere que las intervenciones basadas en el aprendizaje asociativo pueden ser beneficiosas para abordar los problemas de bienestar en la producción porcina vinculados al bajo consumo, en particular con respecto al destete, donde el bajo consumo puede estar relacionado con la inexperiencia de los animales.

Los investigadores que participaron fueron Jaime Figueroa, Daniela Luna, Laura C. Salazar (Departamento de Ciencias Animales, Facultad de Agronomía e Ingeniería Forestal, Pontificia Universidad Católica de Chile), Pia Morales (Floramatic S.A,), Catalina Valdivia, Maximiliano Müller (Departamento de Fomento de la Producción Animal, Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias, Universidad de Chile) y Dominic Dwyerd (School of Psychology, Cardiff University)