Estrés térmico e inmunosupresión, ¡aceites esenciales al rescate!

Las altas temperaturas pueden afectar profundamente la productividad de aves, conejos, porcino y rumiantes. El estrés por calor deteriora el estado oxidativo de los animales, la calidad del huevo, el rendimiento reproductivo, la salud digestiva y la respuesta inmune.

La inmunosupresión causada por el estrés térmico provoca un aumento de la mortalidad y una mayor susceptibilidad a diferentes enfermedades.

MODULACIÓN DE LA RESPUESTA INMUNE DURANTE EL ESTRÉS POR CALOR

El sistema nervioso central regula la respuesta inmune principalmente a través de dos vías:

El eje hipotálamo-pituitaria-suprarrenal (hypothalamic–pituitary–adrenal axis, HPA): es un sistema de interacción entre el hipotálamo, la glándula pituitaria (ambos ubicados en el cerebro) y las glándulas suprarrenales (situadas en los riñones). Su función principal es la respuesta al estrés. Cuando el eje HPA es estimulado por un factor estresante, como el calor, inicia una reacción metabólica que conduce a la producción de cortisol. El cortisol ayuda al cuerpo a lidiar con el estrés, aumentando la presión arterial, incrementando los niveles circulantes de glucosa e inhibiendo los procesos que se consideran de menor importancia durante el estrés, como la función reproductiva.
El eje simpatoadrenal (sympathoadrenal axis, SAM): es un sistema de interacción entre el sistema nervioso simpático y las glándulas suprarrenales (ubicadas en los riñones). Su función es regular las respuestas del cuerpo a los estímulos provenientes del ambiente. Durante el estrés por calor, el eje SAM produce glucocorticosteroides, que inhiben el sistema inmunológico, y catecolaminas, que aumentan la frecuencia de los latidos del corazón, disminuyen la velocidad de los movimientos intestinales y preparan al cuerpo para la actividad física necesaria para responder al estrés.

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El cortisol, los glucocorticosteroides y las catecolaminas inhiben el sistema inmunológico. En animales que han estado expuestos al estrés térmico se ha encontrado que estas sustancias producen:

Pesos relativos más bajos de los órganos relacionados con la inmunidad (hígado, timo, bazo, bolsa de Fabricio).
Menos linfocitos B y T y, por lo tanto, una menor cantidad de anticuerpos circulando en sangre.
Los macrófagos tienen una menor capacidad de destruir microorganismos invasores y otras sustancias extrañas (fagocitosis).
Menos células inmunitarias presentes en el tracto digestivo.

ENFERMEDADES ASOCIADAS CON LA INMUNODEFICIENCIA CAUSADA POR ESTRÉS TÉRMICO

En aves:

Mayor mortalidad y más efectos secundarios tras las vacunas.
Peor respuesta inmune a las vacunas.
Infecciones digestivas
Infecciones por Escherichia coli (infección del saco vitelino, onfalitis, infección del tracto respiratorio, síndrome de la cabeza hinchada, septicemia, poliserositis, enteritis, celulitis y salpingitis).

En cerdos:

Infecciones digestivas.
Incremento de la mortalidad en cerdas, verracos y animales en fase de acabado.
Peor respuesta inmune a las vacunas.
Lechones débiles, propensos a contraer enfermedades.
Pobre producción de calostro y leche.
Mayor incidencia de mastitis.

En rumiantes:

Mayor incidencia de mastitis y problemas respiratorios.
Peso bajo al nacer.
Rumiantes jóvenes débiles, propensos a contraer enfermedades.
Mayor mortalidad de hembras gestantes y lactantes, así como de rumiantes jóvenes.

¡ACEITES ESENCIALES AL RESCATE!

Los aceites esenciales que se usan para aliviar el estrés por calor, como el eucalipto y la menta, también son poderosos estimulantes inmunes:

Estimulan la actividad fagocítica de los macrófagos.
Aumentan el número y la actividad de los linfocitos, potenciando la producción de anticuerpos.
Multiplican el título de anticuerpos producidos como respuesta a las vacunas.
Aumentan el peso de los órganos relacionados con el sistema inmune.

Además, gracias a su efecto antioxidante, estos aceites esenciales protegen la integridad estructural de las células inmunes de los radicales libres, lo que resulta en una mejor respuesta inmune.

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PRODUCTOS DE ELECCIÓN

PlusBreathe© es un producto para el agua de bebida que contiene aceites esenciales con actividad antiséptica, antioxidante, expectorante y mucolítica natural. Tiene un sabor refrescante.

Está indicado para mejorar el funcionamiento del aparato respiratorio y para mitigar el estrés por calor en aves, rumiantes, cerdos y conejos de todas las edades. También se puede nebulizar en el ambiente de la granja. Póngase en contacto con nosotros para más información sobre el uso del producto.

Aceites esenciales antioxidantes, inmunoestimulantes y microbiocidas, que tienen una acción positiva sobre el aparato digestivo.
Extractos de plantas con efecto prebiótico
Electrolitos para mantener la hidratación
Azúcares de absorción rápida cono fuente de energía

Vitamina E está destinado a:

Aves de todas las edades, especialmente durante la primera semana de vida, para mantener y mejorar la salud digestiva y como rehidratante oral.
Rumiantes jóvenes y lechones durante el período posterior al destete, para promover el crecimiento, el consumo de alimento y mantener la salud digestiva y los niveles de hidratación.
Porcino, como rehidratante oral durante el estrés térmico.

GrowthPlus©, PigletPlus©, ReproPlus© (para añadir al alimento) y PlusProtect Digestive© (para añadir al agua de bebida) son nuestros productos naturales destinados a mantener la salud digestiva durante el estrés por calor.

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