Granja porcina y Salud humana: Adoptando la perspectiva de "Una sola salud"

El nuevo análisis descubrió deficiencias fundamentales en el enfoque del estudio original, que tuvo un impacto significativo en los productores de cerdos como resultado de los medios negativos y las demandas. En sus hallazgos publicados, los investigadores que realizaron el nuevo análisis enfatizaron la necesidad de estudios epidemiológicos mejor diseñados y la interpretación responsable de los datos. También pidieron un enfoque de One Health que reúna a representantes relevantes del gobierno, la industria y la comunidad.para resolver los desafíos de maximizar la salud animal, humana y ambiental mientras se apoya la agricultura sostenible que satisface las necesidades de producción de alimentos.

El estudio original analizó datos sobre mortalidad, admisiones hospitalarias y visitas al departamento de emergencias relacionadas con seis afecciones (anemia, enfermedad renal, enfermedades infecciosas, tuberculosis, bajo peso al nacer) para códigos postales categorizados por número de cerdos por kilómetro cuadrado. El nuevo análisis también consideró el VIH y la diabetes , que no se relacionan causalmente con las granjas porcinas, y concluyó que la prominencia de todas estas afecciones probablemente refleje las disparidades de salud sistémicas subyacentes que enfrentan estas comunidades. 

Los investigadores encontraron deficiencias adicionales que sugerían que el enfoque analítico del estudio original era insuficiente para probar la hipótesis de que la proximidad a las granjas porcinas tiene un impacto negativo en la salud humana. En particular, el estudio original no tuvo en cuenta correctamente los factores que podrían interferir con la interpretación de los resultados. En particular, generalizó las características sociodemográficas de los residentes dentro de los códigos postales o condados, sin tener en cuenta adecuadamente el hecho de que los códigos postales con granjas porcinas tienen mayores proporciones de poblaciones racialmente marginadas, ingresos familiares medios más bajos, menos residentes con un nivel educativo determinado y menos atención primaria de la salud. Estos cuatro aspectos de la demografía de la raza, los ingresos, la educación y la atención médica han sido bien establecidos como determinantes sociales de la salud vinculados a profundas disparidades de salud sistémicas subyacentes.

Los investigadores además enfatizan que el factor salud de estas comunidades es compleja y no puede vincularse simplemente a las prácticas agrícolas cercanas. “ En tales estudios estamos tratando de responder la importante pregunta epidemiológica de si estas comunidades tendrían problemas de salud negativos similares si no hubiera granjas porcinas”, dice Kaushi Kanankege del Centro de Salud Animal y Seguridad Alimentaria del Colegio de Medicina Veterinaria, quien dirigió el estudio. “Con datos limitados, estudiar la asociación entre la exposición a las granjas porcinas y los impactos en la salud pública o ambiental es un tema complejo y desafiante, con muchos frentes a considerar y sin soluciones mágicas”.

El proyecto actual de Kanankege se basa en el nuevo análisis para generar un mejor indicador de la exposición a las grandes granjas porcinas y un enfoque de análisis a nivel de población que tenga en cuenta los factores de confusión relevantes. Este enfoque tiene en cuenta la calidad del aire, el suelo y el agua; características de la finca; y características demográficas, sociales, económicas, de salud y de infraestructura de las comunidades vecinas.