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El Complejo Respiratorio Porcino: ¿ Es en realidad tan complejo ?

Publicado: 5 de febrero de 2007
Por: Vitelio Utrera T. Universidad Central de Venezuela. Facultad de Ciencias Veterinarias. Maracay. Aragua, Venezuela.
La enfermedad respiratoria de los cerdos constituye uno de los problemas más preocupantes de la industria porcina a nivel mundial. En años recientes se ha descrito a la enfermedad respiratoria de los cerdos observada en animales en las etapas de desarrollo y engorde como el Complejo Respiratorio Porcino (CRP). Los agentes infecciosos mas frecuentemente involucrados en el complejo respiratorio del cerdo son virales y bacterianos. Entre los agentes virales están: el virus causante del Síndrome Respiratorio y Reproductivo del cerdo, el virus de la Influenza porcina, el virus de la Enfermedad de Aujeszky y el Circovirus Porcino tipo II. Mientras que entre los agentes bacterianos causantes de enfermedad respiratoria el Mycoplasma hyopneumoniae constituye el microorganismo mas frecuentemente asociado a neumonía crónica en los porcinos, seguido de Actinobacillus pleuropneumoniae y Pasteurella multocida (Jordan y col, 2006). A pesar de la etiología multifactorial del CRP, Pijoan (2005), ha señalado recientemente que el mismo puede estar presente en granjas libres de las enfermedades virales antes mencionadas, sin embargo, dicha enfermedad respiratoria nunca se reporta en poblaciones libres de M. hyopneumoniae, por lo que este microorganismo podría ser considerado como el factor central para que el CRP se desencadene.

Es el propósito del presente artículo mostrar algunas evidencias que parecen confirmar tal aseveración.


El detonante del Complejo Respiratorio Porcino?

La neumonía que afecta a la mayoría de las poblaciones de cerdos de crecimiento y engorde en diversas partes del mundo, generalmente comienza con la infección a una edad muy temprana por Mycoplasma hyopneumoniae. Se ha reportado que cerca del 50 % de los cerdos sacrificados a nivel mundial presentan lesiones características de infección asociada con Mycoplasma hyopneumoniae (Ross, 1999). M. hyopneumoniae es el agente causal de la neumonía enzoótica del cerdo tambien conocida como neumonía asociada a Mycoplasma, a pesar de ser una enfermedad descrita por vez primera hace más de 40 años, se mantiene a través del tiempo como uno de los más importantes agentes causales de enfermedad respiratoria.

M. hyopneumoniae se localiza primariamente en la superficie de la tráquea, bronquios y bronquíolos, ubicándose en el ápice de los cilios (Blanchard y col, 1992; Jacques y col, 1992; Mebus y Underdahl, 1997). El microorganismo no es capaz de penetrar el epitelio de las vías respiratorias y tampoco tiene la capacidad de invadir tejidos diferentes al tracto respiratorio, (Goodwin, 1972).

Los mecanismos utilizados por M. hyopneumonaie para infectar son muy variables (Ross, 1996; Tryon y Baseman, 1992) e incluyen: Adherencia a los cilios traqueobronquiales, seguida de efectos citotóxicos sobre la célula colonizada y posterior ciliostasis. La adherencia del microorganismo a los cilios parece estar asociada con la expresión de la proteína P97 en la superficie del microorganismo, sin embargo hasta el presente se han descrito al menos 6 diferentes proteínas que pueden jugar un papel importante en la adhesión del mycoplasma (Djordjevic S.P. y col., 2004).

Una vez que M. hyopneumoniae coloniza el epitelio respiratorio, tiene la habilidad de mantenerse y establecer una infección crónica, la cual depende por una parte, de la respuesta inflamatoria y proliferativa del hospedador y por la otra, de la evasión o alteración de la respuesta inmune (Ross, 1996). Los cambios microscópicos observados a nivel respiratorio, especialmente la hiperplasia linforeticular peribronquial y perivascular se asocian con una participación del sistema inmune en el desarrollo de las lesiones.

Citotoxicidad y ciliostasis: A medida que la infección del epitelio traqueobronquial progresa, se produce una reducción de la actividad ciliar, una pérdida gradual de los cilios, la formación de microcolonias y la acumulación de microorganismos en las células epiteliales remanentes (Debey y Ross, 1994). La colonización genera una gran movilización de células linfoides que ejerce presión sobre los tejidos circunvecinos y puede obstruir la luz de los bronquíolos, causando un colapso de los alveolos. Al final del proceso, los cilios desaparecen, las células epiteliales son destruídas y exfoliadas y un exudado viscoso se presenta en las vías aéreas como consecuencia de una hipersecreción de glicoproteína por parte de las células secretoras, conjuntamente con la alteración del mecanismo de eliminación del moco traqueo bronquial (DeBey y col., 1992; Jacques y col., 1992).

La distribución craneoventral de las lesiones neumónícas asociadas a la infección por M. hyopneumoniae es consecuencia del efecto de la gravedad que determina la acumulación del material producido como consecuencia de la infección, en las áreas de mayor declive del pulmón.

M. hyopneumoniae tambien juega un papel en la modulación de la respuesta inmune del hospedador, al producir una depresión de la inmunidad mediada por células, disminuyendo la transformación de los linfocitos y potenciando la actividad de células T supresoras (Adegboye, 1978; Kishima y Ross, 1985; Weng y Lin, 1988). Por otra parte Messier y Ross (1991) han demostrado que el microorganismo es capaz de producir una estimulación inespecífica de los linfocitos porcinos. Ese efecto inmuno modulador se cree que sea responsable de la inducción de lesiones mucho mas severas de Circovirus porcino tipo II en cerdos previamente infectados con M. hyopneumoniae (Halbur y col, 2006).

Recientemente se ha demostrado que M. hyopneumoniae es capaz de inducir la liberación de citoquinas entre las cuales se ha demostrado que la Interleukina 10 posee efecto inmuno supresor, pudiendo esto explicar la mayor severidad de las lesiones cuando existen infecciones simultáneas con el virus del PRRS. De igual manera existe evidencia de que pueda ejercer una supresión de la función de los polimorfonucleares en las vías respiratorias del cerdo, lo cual a su vez debe ser responsable de la potenciación que se observa de las infecciones bacterianas secundarias a nivel pulmonar en cerdos infectados con M. hyopneumoniae (Asai y col, 1996). Una respuesta fagocítica reducida también ha sido demostrada en macrófagos alveolares, lo cual tambien garantiza el establecimiento de infecciones secundarias (Caruso y Ross, 1990). La actividad reducida de los macrófagos alveolares permite que se instauren infecciones virales como el síndrome respiratorio y reproductivo del cerdo (PRRS), la influenza porcina, la enfermedad de Aujeszky y enfermedades bacterianas tales como la pleuroneumonía porcina. Todas las infecciones producidas por Mycoplasmas predisponen al hospedador a la aparición de enfermedades bacterianas secundarias (Ross, 1996). Dichas infecciones secundarias agravan el cuadro clínico y la severidad de las lesiones pulmonares iniciales. Las infecciones experimentales combinadas de M. hyopneumoniae y Pasteurella multocida, se traducen en lesiones de mayor severidad en comparación con las producidas por las infecciones producidas por cualquiera de dichos agentes por separado (Ciprian y col, 1988; Amass y col, 1994; Sorensen y col, 1997).

La infección por M. hyopneumoniae tambien potencia la severidad de la infección por el virus del Síndrome Respiratorio y Reproductivo Porcino (SRRP) (Thacker y col, 1999; Thanawongnuwech R., Thacker E., 2003). Este efecto inmuno supresor local producido por M. hyopneumoniae debe tambien influir negativamente en la severidad del Complejo respiratorio porcino cuando otros agentes infecciosos aparecen involucrados simultáneamente tales como Actinobacillus pleuropneumoniae, Bordetella bronchiseptica, Haemophilus parasuis, Arcanobacterium piogenes, Streptococcus suis, etc, (Andreasen y col, 2000; Morrison y col, 1985; Regula y col, 2000; Wallgren y col, 1993).

Es por todo lo anteriormente señalado que algunos consideran a M. hyopneumoniae el factor detonante clave para que se desencadenen los cambios que ha de conformar el complejo respiratorio del cerdo (Jordan y col, 2006).

Desde el punto de vista epidemiológico, Fano y col (2006) demostraron que la tasa de infección por M. hyopneumoniae al destete puede ser utilizado como factor predictor de la severidad de enfermedad respiratoria en los cerdos en finalización.


Control

El control de la neumonía asociada a M. hyopneumoniae requiere de la aplicación conjunta de una serie de medidas destinadas a la prevención del complejo respiratorio porcino cuya etiología es multifactorial. Dichas medidas incluyen prácticas de manejo, diseño de instalaciones, aplicación de medidas de bioseguridad y manipulación de la inmunidad del rebaño mediante el uso de vacunas (Maes y col, 1996).

Entre las prácticas de manejo que han demostrado ser de utilidad para el control de esta enfermedad estan:
  • Una inmunidad de rebaño estable, a traves de una población balanceada de cerdas madres (Done, 1997; Maes y col, 2000);

  • Inmunización del rebaño.

  • Reducción de la frecuencia de introducción de los reemplazos así como también la diversidad de orígen de los mismos.

  • El nivel de salud de la granja genética, proveedora de los reemplazos, debe ser similar o superior al de la población receptora de los mismos (Maes y col, 2000; Jorsal y Thomsen, 1988; Thomsen y col, 1992).

  • Sistema de producción Todos dentro todos fuera. Evitando la convivencia en el mismo espacio físico, de cerdos de diferentes edades y usando preferiblemente destete segregado (Harris, 1990; Clark y col, 1991; Straw, 1991; Dritz col, 1992).

  • Reducción de las condiciones generadoras de stress. En un estudio reciente se demostró que ciertas condiciones ambientales y de alojamiento no estaban asociadas con la severidad de la enfermedad respiratoria asociada a M. hyopneumoniae. Entre dichas condiciones se encuentran: 1) Al diseñar las instalaciones se debe considerar el número de cerdos por local (Pointon y col, 1985a). 2) Sistema de ventilación adecuado (Clark y col, 1993). 3) Sistema de remoción de aguas residuales.

Conclusión

El CRP constituye una de las principales causas de pérdidas económicas en las explotaciones porcinas. Al evaluar los componentes infecciosos mas frecuentemente involucrados en dicho complejo se observa que M. hyopneumoniae debe jugar un papel central en el desencadenamiento de los cambios que caracterizan al Complejo Respiratorio.


REFERENCIAS
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Claudio A. Guzzo
17 de agosto de 2009
En realidad lo que si considero COMPLEJO es convivir en una granja en la actualidad con este compendio de enfermedades y con margenes de ganancia tan pequeños y con el gran reto de optimizar la produccion... Hoy en dia y en tiempos venideros veremos como se tornara mas dificil la produccion porcina a nivel global, vemos como la demanda de alimentos aumenta a nivel mundial, aumentan las espectativas acerca del virus AHN1 y los capitales toman ortro rumbo no alimentcio entre otras variables y cada dia hay carencias - competencias de materias primas para la elaboracion de alimentos concentrados y balanceados. Solo y unicamente aquellos que adopten aptitudes de granjas responsables y con prevalencia de enfermedades bajas y controlables podran enfrentar este nuevo reto... interezante por demas...
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Ing. Gerardo Grezzi
Sterilex
13 de agosto de 2008

Antes que nada felicitaciones por el artículo y su contribución.

En mis visitas como consultor de bioseguridad a muchísimas granjas de Latinoamérica (de todo tipo y con todo tipo de manejo, desde las más primitivas a las más tecnificadas) donde se ha presentado el PRDC siempre he recomendado la práctica diaria de desinfección del ambiente con microgotas (ultra low volume ) y los resultados han sido de buenos a excelentes.

No es la panacea que resuelve todo pero con toda seguridad puedo decir que hace una gran diferencia, mejora mucho la sanidad del plantel y reduce el costo en antibióticos.

La clave está en usar el producto correcto (amplio espectro, no corrosivo, y de baja toxicidad) a la dosis correcta (sin tratar de abaratar , con una frecuencia diaria y usando el equipo adecuado de aplicación.

Otro punto clave es asegurarse que el sistema de agua esté debidamente desinfectado, sin biofilms y evitar el estrés en todo lo que sea posible.
Saludos a todos

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Emilio Campos Morales
Universidad de Guadalajara
17 de febrero de 2007
Hola. Mi estimado sr. Utrera, reciba un saludo y una felicitación por su artículo sobre complejo Respiratorio del cerdo. Es normal que nos preocupemos por un problema que nos afecta a todos en nuestros hatos porcinos hoy en día, ya que sólo queremos ver desde un punto de vista el problema infeccioso, esto no es válido, otros mencionan condiciones de confort y control de medio ambiente, otros el uso undiscriminado de antibióticos, y pocos mencionan algo de micotoxinas y hongos en los alimentos, pero realmente todos estos puntos son parte de un todo al cual le han faltado los análisis de tipo económico en cuanto se les invierte a los cerdos lo necesario en la nutrición, realmente les damos la calidad de materiales necesario para la elaboración de las raciones con los valores de nutrición adecuados y la calidad de biodisponibilidad de nutrientes a los cerdos con las nuevas GENETICAS, que se usan, nos hemos olvidado que les hemos eliminado aquella capa de grasa (manteca), que en los años 60/70 se usó para el consumo humano y que ahora la hemos sustituido por tejido magro, al cerdo le servía como una defensa para el frío y resistía muy bien los inviernos, ahora cualquier variación de clima en cualquier época del año se tienen brotes de neumonía y muy graves, y cuando no es micoplasma es pasteurella o es enfermedad de glasser o actinobacilos, etc. y complicados con otros agentes virales, ahora los nuevos cerdos se han vuelto muy vulnerables ya que requieren mayores cantidades de proteínas (aminoácidos), energía, micronutrientes (minerales), porque se han hecho animales más demandantes, y si a esto le agregamos que antes era normal producir cerdos de 100 a 182 días, ahora hay que producir cerdos de 100 kgs, en 147 a 154 días, y queremos seguir alimentándolos como si fueran los cerdos con genéticas de hace 40 años. Creo que parte del problema también es nuestra responsabilidad el que tenemos que darles una alimentación acorde a a cada genética y a sus etapas, tal y como lo recomiendan las casas proveedoras de las genéticas actuales, y no todo cargárselo a las causas infecciosas, porque éstas al fin, con una buena y adecuada nutrición y alimentación, así como la disponibilidad adecuada de agua limpia, el cerdo desarrolla una inmunidad adecuada y limita los problemas infecciosos; pero una mala alimentación y una mala aplicación de manejo en cualquiera de sus aspectos, nunca podrá ser tratada con antibióticos y muchos menos desarrollan anticuerpos para el mal manejo, La respuesta de los cerdos a esto es: Enfermedades, retrasos, falta de productividad y grandes pérdidas. Esto se lo comento ya que las esplotaciones porcinas en las cuales estoy como asesor de la producción y del control sanitario, nos hemos preocupado por tener formulaciones eficientes y rentables, y no como en la mayoría de las granjas se hace, tener formulaciones baratas. Recuérdese un viejo adagio: que la salud, lo bonito y lo eficiente por la boca entra. Me despido esperando sea de utilidad mi comentario. Dr. Emilio Campos Morales de Disiopatología y Producción Animal
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Fernando  Chacon
Ceva Animal Health
13 de febrero de 2007
Don Virgilio, efectivamente, el problema en las granjas se acentúa cada vez más. Es así como efectivamente antes si utilizabas una medicación funcionaba, y ahora no lo estás logrando. Creo que existen varios aspectos de interés al respecto, considero que los problemas de este tipo debemos tratar de enfrentarlos de la manera más estratégica posible. A mi parecer, la manera más efectiva y menos costosa es realizar un adecuado manejo de la granja, el control de las condiciones ambientales, realizar una rotación adecuada de los corrales asegurando un manejo todo adentro todo afuera, evitando así la recirculación de los problemas en la granja, asegurar protocolos de limpieza y desinfección, evitar al MAXIMO el estrés de los lechones, y principalmante en las etapas más críticas de vida del cerdo (destete, castración, traslados, cambios de alimentación, entre otros). El protocolo de vacunación es para mí en el caso de Micoplasma, indispensable para poder controlar el CRP, ya que es de las vacunas que ha demostrado obtener resultados interesantes, más si sabemos que Micoplasma es un problema netamente económico, se ha demostrado la efectividad de los protocolos de vacunación, SIEMPRE Y CUANDO UTILIZES UNA BUENA VACUNA, de un laboratorio serio y que te brinde el seguimiento adecuado de la misma, asegurando el mejor momento para su aplicación y el mejor protocolo de aplicación. Las medicaciones son importantes, pero considero que deben ser muy estratégicas, y utilizarlas de la mejor manera posible, en los momentos donde se están detectando los principales problemas y con antibióticos de calidad y respaldo, para así evitar posibles problemas de resistencia a los mismos, recomiendo antibióticos originales en las dosificaciones indicadas y en el momento adecuado. Creo que la labor es más de trabajo en grupo y no de la aplicación de una medida aislada; considero que se debe ser muy constante en las medidas que instauremos y cómo las instauremos. Te recomendaría un buen soporte técnico de algún profesional en el campo. Con gusto podría ayudarte en algunas consultas al respecto. Fernando Chacon Urea Médico veterinario, Costa Rica
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Wilder Rengifo Luquiaano
3 de septiembre de 2011
vendo draxxin para neumonias de cerdos a precios sin competencia; comuniquese a willeon23@hotmail.com en trujillo peru.
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José Ibrahim Sánchez
Distribuidora ANIKRON
18 de junio de 2009
saludo cordialmente a toda la comunidad, la siguiente es para expresar mi preocupación sobre problemas respiratorios en granja, a pesar de implementar la siguientes medidas: -Vacunación Hembra Gestante de 80 días Cólera de Lab. Ford Dogde APP - Vacunación Hembra Gestante de 90 días: Micoplasma+ HPS -Lechones de 6 semanas Micoplasma + HPS , APP Lechones 9 semanas 2 dosis Micoplasma + HPS , APP Semana 12 Colera. Se desinfecta los corrales ante de entrada de lechones con Glutaldehido. Al realizar el corte de colmillos se inyecta Florfenicol a razon de 0.5 ml por animal. Al destetar 1 ml por animal. Cuando el lechon alcanza los 70 kg se inyecta Draxxin. Cada 6 meses acostumbro a llevar a laboratorio suero, sin embargo me preocupa todavia mantener estas enfermedades en Granja. Agradezco lo último en CRP
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Wilson Segovia
Wilson Segovia
14 de agosto de 2008
Queridos amigos considero que la forma mas efectiva a mi criterio es la bioseguridad que se de en la granja, ya que los descuidos en este aspecto son los que han llevado a la quiebra a muchos productores de cerdos, encareciendo tanto la produccion que prefieren retirarse de esta actividad, es por eso que mi criterio muy personal es tomar muy en cuenta este aspecto, gracias por la atención y espero que les sea de utilidad
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Diego Anderson
12 de abril de 2007
El artículo es muy completo y veraz, el microplasma es la entrada de todos los males respiratorios. Me gustaría que se explique con más profundidad cómo prevenir, proyectar y trabajar por una granja libre de esta enfermedad, sabiendo que el 90 de las empresas genéticas la poseen. Respondiendo a la inquietud de Ramiro Luque, tendría que hacer un sangrado cronológico y un antibiograma de la enfermedad, así sabrá cómo y cuándo atacar dicha enfermedad. Saludos.
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Alexander Gomez
Alexander Gomez
16 de marzo de 2007
Yo pienso que el medio es muy importante, tanto para el desarrollo de los humanos, como de los animales. Si éste está contaminado, los niveles de enfermedades respiratorias serían enormes. Es por ello que no sólo hay que tener la cochinera libre de cualquier acto de contaminación (bacterias).
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CARLOS MARIN
CARLOS MARIN
2 de marzo de 2007
Por qué el anticuerpo calostral de madres reproductoras de cerdo con altos títulos supera al anticuerpo vacunal contra mycoplasma?
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