Informe Final, Evaluación de BIOQUINA® sobre la productividad de Vacas lecheras en pastoreo

En enero de 2006 iniciamos un experimento con el Objetivo de evaluar, en vacas lecheras en pastoreo, la respuesta a la suplementación con BIOQUINA® (un tanino condensado) sobre la producción y composición de leche. El trabajo se desarrolló en un establecimiento comercial de la zona de Esperanza, Santa Fe, el cual puede considerarse representativo de la cuenca lechera central de Argentina. El producto fue aportado por la firma PORFENC S.R.L.

 

T 1= Control

T 2= BIOQUINA ®

Duración del experimento: 54 días (8 semanas) en total

a) Acostumbramiento: 44 días, a partir del 23 de diciembre del 2006.

b) Período de mediciones : 3 semanas, a partir del 6 de febrero de 2007.

Sitio experimental: Establecimiento del Dr. Oscar Garnero en la localidad de Esperanza, Pcia de Santa Fe (31º 11' S). Este tambo posee las siguientes características: 180 vacas en ordeño, 2 rodeos: punta y cola, producción promedio trimestre julio setiembre: 26.3 l/vaca/día. Pariciones continuas y servicios por IA con semen Holstein de alta genética. Sistema de alimentación pastoril (base alfalfa) con suplementación. Cuenta con control lechero oficial (Alecol), control lechero propio y personal entrenado para manejo diferencial de animales.

Animales: Se utilizaron 62 (sesenta y dos) vacas en total, las características de los animales al inicio del experimento (inicio acostumbramiento) fueron: 622 ± 81 kg de peso vivo; 2.30± 1.69 lactancias; 31.5± 5.5 l/v/d y 96±77 días en lactancia (55% de las vacas en lactancia temprana y 45% en lactancia media).

Tratamientos: Las 62 vacas totales conformaron dos tratamientos con 31 vacas (17 multíparas y 14 primíparas) cada uno. Los tratamientos fueron: 1) CONTROL y 2) BIOQUINA®

 

Durante el experimento las vacas se ordeñaron dos veces por día a las 4 a.m y 4 p.m, aproximadamente y la secuencia de alimentación fue la siguiente: luego del ordeño matutino, entre las 7 y las 9 hs, tuvieron acceso a una franja de pastura de alfalfa, entre las 9:30 am y las 4 pm recibieron silaje de maíz y luego del ordeño vespertino y hasta el ordeño matutino siguiente accedieron a una nueva franja de pastura. El tamaño de cada franja fue ajustado semanalmente para propiciar un consumo sin restricciones de pastura.

Durante ambos ordeño, en bateas individuales, consumieron grano molido de maíz, una mezcla comercial vitamínico-mineral y un concentrado formulado especialmente, en forma de pelets, utilizado como vehículo para la Bioquina®, para un suministro de 70 gramos/vaca/día. Las vacas control también recibieron el mismo concentrado, pero sin el tanino. Los 62 animales conformaron siempre un único grupo de manejo, diferenciando el tratamiento en el ordeño vespertino, cuando se suministró a cada vaca su concentrado especial. Las vacas que debían consumir Bioquina® se identificaron con una caravana especial color roja. A la entrada y salida de cada ordeño y en las franjas de pastoreo los animales tuvieron acceso libre a agua de bebida y durante las horas de intenso calor acceso libre a sombra.

 

La producción individual de leche fue registrada una vez por semana, los días 6; 13 y 20 de febrero de 2007 completando 6 ordeños (3 matutinos y 3 vespertinos). Se utilizaron medidores Waikato® operando con la misma rutina que en los controles lecheros oficiales (ALECOL- Santa Fe). Las muestras de leche para composición fueron tomadas en esos 6 ordeños y se analizaron a través de un Milkoscan (Foss Electric, Hillerød, Denmark) para: grasa butirosa, proteínas totales, lactosa, sólidos no grasos y urea.

La condición corporal (CC) fue determinada al inicio del acostumbramiento y al final de las mediciones utilizando el método de palpación y observación y asignando los puntajes con la escala de 5 puntos (Edmonson et al., 1989).

El peso vivo fue tomado únicamente al inicio del ensayo, a los fines de calcular los requerimientos.

Durante el período de mediciones propiamente dicho el consumo individual de concentrados (mix de grano de maíz, sales minerales y el concentrado especial) fueron registrados semanalmente, pesando la oferta y el remanente de las bateas.

El consumo de pastura y de ensilaje no fue medido vaca por vaca, pero se estimó el consumo grupal. Una vez a la semana se determinó el de pastura, mediante muestreos y cortes de la disponibilidad de biomasa forrajera antes y después del pastoreo. La calidad de la pastura se determinó en esos mismos muestreos pero mediante la técnica de hand-plucking (Meijs et al., 1982). El consumo de silaje se estimó pesando la oferta y los remanentes en los sitios de suministro. Los muestreos también se realizaron una vez por semana durante el período de mediciones. En cambio, la composición química de estos ingredientes (pastura, ensilaje, concentrados) que fue analizada en el laboratorio de INTA-Rafaela, se realizó dos veces, al inicio y al final de las mediciones, para determinar: materia seca (MS), proteína bruta (PB), fibra detergente neutra (FDN), fibra detergente ácido (FDA), lignina, extracto etéreo y cenizas, de cuerdo a las normas de AOAC, 1990.

Los datos de temperatura del aire, la humedad relativa y las precipitaciones fueron obtenidos de una estación meteorológica ubicada en la Facultad de Ciencias Veterinarias –UNL-Esperanza, distante a 6 km del establecimiento.

El diseño experimental fue de tipo continuo, con observaciones repetidas en el tiempo y análisis de covarianza. La covariable utilizada fue la producción de leche tomada del control lechero de diciembre de 2006. Se utilizó el programa Proc. MIXED de SAS (1996). El modelo aplicado fue:

Y_ijk = μ + T_i + V_(ij) + S_k + (T+S)_ik+ e_ijk

donde,

Y_ij = cada una de las variable dependientes,

μ = media de la población,

T_i = media del efecto tratamiento i,

V_(ij)= efecto animal

S_k= efecto de la semana de control

(T+S)_ik= efecto de la interacción entre semana de muestreo y tratamiento

e_ijk= error residual (N ~0, s²).

La covariable, coeficiente de regresión para la variable independiente, fue la producción de leche en el control anterior a la fecha de inicio del ensayo (control del 05/12/2006).

 

En la Tabla 1 se muestra la composición y calidad promedio la dieta recibida por los animales a lo largo del ensayo.

 

Tabla 1. Ingredientes, composición química de las dietas y consumo estimado de materia seca de vacas lecheras en pastoreo de alfalfa con inclusión de Bioquina®.

 

 

Como se aprecia, la dieta tiene un fuerte componente de pastura de alfalfa (56% de la MS total), con una relación forraje a concentrados relativamente alta (70:30). Los consumos estimados arrojaron valores cercanos a los 18 kg de MS/v/día, lo cual es muy bajo para vacas con 31 litros/días de producción individual al inicio del ensayo. Sin embargo, como se demostrará más adelante, las condiciones ambientales del verano afectaron notablemente el desempeño animal.

Las características de las pasturas utilizadas para el pastoreo y la composición química de los principales ingredientes se muestran en las Tablas 2 y 3.

 

Tabla 2: Disponibilidad de biomasa de alfalfa, área de pastoreo diaria y materia seca asignada durante el período experimental (promedio ± DS).

 

 

Si bien la pastura siempre fue asignada para propiciar consumos a voluntad, los animales en todo momento ejercieron selectividad, tal vez acompañada con consumos restringidos en los días de intenso calor, dejando de esta manera remanentes de forraje muy altos en las franjas, cercanos al 45 % de la oferta pre-pastoreo. El ensilaje tuvo remanentes promedio de aproximadamente el 8 a 10% de la oferta y los concentrados, en cambio, fueron siempre consumidos totalmente.

 

Tabla 3. Composición química de los principales ingredientes utilizados en las dietas (% sobre base seca).

 

 

La calidad de los componentes de las dietas fueron muy aceptables, incluso con valores superiores a la media de la región, se destaca la elevada concentración de proteínas de la pastura de alfalfa. El concentrado especial con Bioquina® mostró un valor más elevado de NIDA/%NT, lo cual es esperable por el agregado de taninos.

Con respecto al desempeño animal, en la Tabla 4 se presentan los datos de productividad y condición corporal.

 

Tabla 4: Producción, composición de leche, cambio de condición corporal de vacas en pastoreo control y suplementadas con Bioquina®.

 

 

La producción de leche fue significativamente superior en el tratamiento con Bioquina®, las diferencias fueron del 6.7%, equivalente a 1.5 litros/vaca/días. La producción de grasa (kg/vaca/día) también fue significativamente más alta con 60 gr más por vaca. Sin embargo, ni en proteína ni en las otras variables se verificaron diferencias estadísticamente significativas. Tampoco la interacción entre la semana de medición y el tratamiento (TxS) fueron significativas. Hubo una tendencia (P<0.08) a disminuir la concentración de urea en leche en el tratamiento con Bioquina®, lo cual es esperable de este tipo de aditivo.

A continuación se detallan, para ambos tratamientos, los valores de producción, de concentración de grasa y de proteína en leche que se obtuvieron en los tres controles lecheros.

 

Tabla 5: Evolución de la producción de leche, concentración de grasa y de proteína láctea para ambos tratamientos a lo largo de los controles lecheros semanales (06/02; 13/02 y 20/02/2007).

 

 

Las principales diferencias en producción a favor del tratamiento con Bioquina® se observaron tanto en el control del 2 de febrero como en el del 20 de febrero (1º y 3º, respectivamente). En el 2º control (13 de febrero) las vacas con Bioquina, que venían con mayor producción, disminuyeron respecto al control anterior en 3 litros promedio. Las del tratamiento control en cambio, disminuyeron solamente 0.6 litros en promedio. En este control las vacas en lactancia temprana fueron las responsables de la disminución ya que deprimieron su producción, en más de 3 l/v/día.

Esta disminución de la producción de las vacas en lactancia temprana se debió al intenso estrés calórico que sufrieron los animales desde el día anterior al control lechero que afectó principalmente a esta categoría, que es la más sensible. Las temperaturas máximas alrededor de ese control fueron de 33 a 34 ºC con mínimas de 19 a 20ºC y humedad relativa de más de 75%. Estos datos corresponden a un ITH (índice de temperatura-humedad ó índice de estrés) de más de 77, el cual está al límite de la tolerancia de vacas lecheras.

La amplia diferencia entre los valores de producción del período de covarianza (31 litros/vaca/día) y los controles sucesivos se deben por un lado a las condiciones ambientales del verano y por el otro al incremento en días de lactancia de algunas vacas, recordar que casi el 50% de las vacas de cada tratamiento se encontraban al inicio del experimento en lactancia media.

En la Tabla 6 se muestras la información meteorológica del período de desarrollo del ensayo.

 

Tabla 6. Datos meteorológicos del período experimental propiamente dicho.

 

 

Estas condiciones climáticas también fueron causantes de que las vacas mantuvieran constantemente una baja condición corporal, 2.57 puntos en promedio. Como se mostró en la Tabla 4, no hubo diferencias entre tratamientos en el cambio de CC entre el inicio y el final del experimento aunque hubo una tendencia a perder algo de estado las vacas con Bioquina® (0.12 puntos)

Para analizar el efecto días en lactancia (DEL) y la categoría de vacas (primíparas vs. Multíparas) en la Tabla 7 se muestran los respectivos registros promedio de producción de leche, la concentración de grasa y la de proteína láctea en ambos tratamientos.

 

Tabla 7: Producción de leche, concentración de grasa y de proteína láctea para vacas en control y con Bioquina®. Valores promedio del período experimental.

 

 

La escasa diferencia hallada en producción entre Bioquina® y control para las vacas en lactancia temprana se debió principalmente a los efectos del estrés calórico del control del 13 de febrero, como se explicara anteriormente. Para las otras variables de la leche las tendencias no son claras y muestran leves incrementos en grasa y proteínas tanto en multíparas como para lactancia temprana, en el tratamiento con Bioquina®, pero estas diferencias pueden considerarse de poca significancia estadística.

 

Para las condiciones en que se desarrolló el presente ensayo, la suplementación con Bioquina® demostró mejorar la producción de leche (l/v/d) y el rendimiento de sólidos de grasa (kg de grasa/vaca/día). Esta respuesta pudo deberse a un mejor balance energético de las dietas en este tratamiento, al disminuir la degradabilidad de las proteínas de la pastura de alfalfa, la cual es generadora de altas concentraciones de amoníaco ruminal y por ende, más exigente en energía para detoxificar la urea metabólica.