UE - EHNE pide al Gobierno ayudas directas para el sector ganadero por la sequía

El sindicato agrario EHNE ha solicitado al Gobierno de Navarra la aprobación de ayudas directas destinadas a frenar «la continua pérdida de renta que esta originando la repetición de la sequía por segundo año consecutivo en el sector agrario navarro, especialmente en la mitad norte de la Comunidad». El sindicato propone también a Javier Echarte, consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación, la creación de la Mesa de Seguimiento de la Sequía, además del adelanto de los pagos de las primas de la PAC al ovino, vacuno de carne y leche, y la adopción de medidas de beneficios fiscales para los ganaderos afectados, informó hoy EHNE en un comunicado. En su nota, recuerda que los reglamentos europeos CE 2342/1999 y 2529/2001 permiten el adelanto a octubre del pago de las ayudas directas al vacuno de carne, ovino y vacuno de leche en circunstancias especiales, en lugar del plazo habitual de diciembre a junio, y subraya que «a la escasez de lluvias y las altas temperaturas del pasado verano se suma ahora un nuevo periodo estival seco que está agravando la delicada situación económica que arrastra el sector». Esta organización señala que los profesionales del sector «están afrontando la sequía y sus consecuencias sin ayuda alguna desde el Ejecutivo foral, cuando otros gobiernos vecinos, como el de la CAV y Francia, aprobaban durante 2003 ayudas directas para el Primer Sector y ponían en marcha además campañas para importar forraje a precios más baratos de los manejados en el mercado, pues la fuerte demanda de cereales y la sequía que se extendió en buena parte de Europa del sur y central encarecieron los precios». Así, precisa que a finales del pasado verano el precio del pienso y el forraje se incrementó un 5%, subida que ha continuado durante el resto del año hasta alcanzar el 15% y que se mantiene todavía en valores muy altos. Agrega que «estos elevados costes de producción se suman a los gastos extraordinarios de la subida del precio del gasóleo y de los fitosanitarios (derivados del petróleo) que también está haciendo mella en la economía de los ganaderos navarros». Ante esta situación, prosigue EHNE, «las explotaciones agrarias navarras sólo cuentan con el anuncio que hizo el pasado año el Ejecutivo foral de aplicar reducciones en los módulos de la declaración del IRPF, medida que todavía no se ha confirmado». Por ello, sostiene que «el sector se encuentra ante un panorama del que irónicamente se podría decir que llueve sobre mojado» y advierte que «los ganaderos han comenzado en julio a alimentar a sus rebaños con el pasto reservado para el invierno porque la falta de lluvias ha impedido el crecimiento normal del pasto». Indica que esos fenómenos climáticos «han coincidido precisamente con la época de crecimiento y desarrollo del pasto de los comunales y particulares que los ganaderos utilizan para alimentar a sus rebaños al aire libre y que además siegan y almacenan para el invierno» y agrega que también la producción de patata para siembra del Pirineo y la de maíz forrajero ha experimentado una merma del 30-40 por ciento, como consecuencia de la falta de lluvias. Según concluye, «la falta de este recurso, el pasto natural, supone perder un importante apoyo para las explotaciones ganaderas navarras, cuya economía se ha basado tradicionalmente en el pastoreo en los comunales de primavera e invierno de las sierras y pastos particulares».