Consociación de verdeos de invierno con Vicia villosa, una alternativa en la producción inverna

En los sistemas de producción bajo riego de los valles del río Negro, los verdeos de invierno cumplen un importante rol durante el período otoño-invierno debido a que permiten compensar las bajas producciones de otros recursos forrajeros durante esta época con una óptima calidad nutricional. Estos cultivos consociados con Vicia villosa incrementan los niveles de proteína, con lo cual podrían representar una de las alternativas estratégicas para alimentar utilizándolos como reservas de forrajes.

Para la elección de la especie y/o cultivar de cereal invernal debe tenerse en cuenta no solo su producción total de forraje sino también las necesidades de cada establecimiento, los restantes componentes de la cadena forrajera, y las condiciones edafoclimáticas de la zona.

El objetivo de este trabajo fue determinar si la inclusión de Vicia villosa tiene efecto en el comportamiento productivo de los verdeos de invierno puros y consociados.

El ensayo se sembró el 13/07/2016 en la EEA Valle Inferior del Río Negro (40º 48´S; 65º 05´W), sobre un suelo serie “Chacra” (pH: 7,8; P disponible: 5,5 ppm; MO: 2,08 %, N Total 0,16 gr/100gr y K: 545 ppm). Se evaluaron 7 tratamientos que consistieron en 3 parcelas puras de verdeos de invierno (VI): avena Calen INTA (ACI-230 kg/ha), cebada forrajera Alicia INTA (CFAI-260 kg/ha), triticale Yagan INTA (TYI-215 kg/ha), una parcela pura de Vicia villosa (VV90 kg/ha) y 3 parcelas de los mencionados VI consociados con VV.

Las consociaciones se representan como ACI-VV (avena-vicia); CFAI-VV (cebada- vicia), TYi-VV (triticale-vicia) con densidades representadas por 75% VI y 25% VV. Se utilizó un diseño en bloques completamente aleatorizados con 3 repeticiones. Las parcelas fueron de 6,15 m²; en líneas a 17,5 cm. Se fertilizó a la siembra con 100 kg/ha de fosfato diamónico y en estado de macollaje se aplicó una dosis de 100 kg N/ha. Se realizaron 3 riegos (de aproximadamente 100 mm cada uno). Las precipitaciones acumuladas en el periodo evaluado fueron de 216 mm.

La cosecha se efectuó el 1/12/16 con una cosechadora Cibus F con sistema electrónico de registro de cosecha cuando los VI se encontraron en estado de grano pastoso, y la VV en formación media de vainas. En el corte de cada material estudiado se registró la producción de biomasa de cada parcela y se tomó una muestra para determinar el contenido de materia seca (estufa a 65ºC hasta peso constante).

A los datos de producción obtenidos se les aplicó un análisis de varianza y una prueba de diferencias mínimas significativas (LSD, P< 0,05).

A partir de los rendimientos obtenidos se hallaron diferencias significativas (P< 0,0001) entre TYI, TYI+VV, y ACI respecto de los restantes tratamientos (Figura 1). Éstos alcanzaron mayores valores de producción sin diferencias productivas entre sí. La VV fue el material con menor producción, posiblemente asociado a que el momento de corte fue anterior al de máxima producción del cultivo.

Figura 1. Producción forrajera de VI puros y consociados con VV Letras distintas indican diferencias significativas (P< 0,05).TYI: triticale Yagan INTA, TYi-VV (triticale-vicia), ACI:avena Calen INTA, ACI-VV (avena-vicia); CFAI: cebada forrajera Alicia INTA, CFAI-VV (cebada- vicia), VV Vicia villosa

Para TYI y CFAI la consociación con VV no incrementó la producción con promedios de 20,93 y 12,55 T MS ha-1 respectivamente. En el caso de la ACI se evidencia una merma en su producción del 29% al consociarse con VV, probablemente debido a que los cortes de los tratamientos estuvieron determinados por el estado fenológico de los VI (grano pastoso) mientras que en este momento VV se encontraba en el estadio de formación de vainas

En los ensayos de cultivos consociados de VI con VV, se observó que si el VI se corta a una calidad óptima, la VV todavía se encontraba en proceso de desarrollo por ende su rendimiento pudo verse reducido. Por ello para la elección de variedades para intentar la sincronización de su proceso de crecimiento y maduración se debe tener en cuenta que la competencia es uno de los factores que pueden tener un efecto significativo sobre el rendimiento de las consociaciones en comparación con el VI puro.

La incorporación de la leguminosa no mostró mejoras en la producción de forraje con respecto a los verdeos puros. La fecha de siembra es un factor que determina el potencial productivo de las especies forrajeras, por ello sería conveniente una siembra más temprana de VV que permita potenciar su productividad tanto pura como consociada.