¿Cómo mejorar asesoría técnica en bovinos?

Los procesos de asesoría técnica en nuestros países, han fallado desde el mismo momento que existe una desconexión del técnico con el campo. Si ese técnico no ha participado activamente de la praxis y el quehacer diario de una producción pecuaria, no logra ver en su externalidad las cosas que realmente son importante para lograr objetivos de eficiencia y eficacia, y más grave aún si el técnico después de muchos años de empirismo, desconoce las fuentes primarias y secundarias de información, es decir termina en su trabajo diario “reinventando la rueda” que ya existe en otras latitudes. No se puede desconectar la praxis de la teoría, es un error clásico de los profesionales.

Peter Drucker** decía: “los ejecutivos eficientes no toman muchas decisiones, tratan de tomar unas pocas importantes al más alto nivel de comprensión, buscan encontrar la constante en una situación, pensar que es estratégico y genérico más bien que dedicarse a resolver problemas del día a día”

Muchos técnicos trabajan en resolución de problemas del día a día, se enfocan en la punta del Iceberg y no se centran en señalar sus raíces. Drucker sugiere (1) clasifique el problema, es genérico o excepcional, (2) defina que tiene entre manos, (3) Cual puede ser su solución, y cuáles pueden ser sus limitantes, (4) Decida entre que es correcto y que no es aceptable, (5) Incorpore la decisión a la acción, es decir llevarla a cabo y cuál es su compromiso, quien debe conocerlo, en cuanto tiempo, cuál es su costo; pero, hay que asegurarse que se haga, (6) Compruebe la validez y la eficacia de la decisión. De lo contrario aparecerá el aforismo “Si sigues haciendo lo mismo seguirás recibiendo lo mismo”

Asesoría técnica con enfoque en la productividad, rentabilidad y sostenibilidad de los sistemas ganaderos

La asesoría técnica no se basa en pasar una receta de campo, ni entregar un manual procesos, la asistencia técnica debe tener un enfoque interactivo entre el técnico, el ganadero, el mayordomo y los operarios, si cada uno de ellos no comprende su importancia en la acción o su roll dentro de la decisión y su participación, la decisión no será eficaz.

Por ello el primer enfoque técnico debe estar en que se produce para “satisfacer necesidades”, para ello debemos ir a las necesidades básicas, no producimos solo para hacer dinero, producimos para nutrir al mundo y si eso se hace con estándares de calidad y con buenos niveles de efectividad (eficiencia y eficacia) y con ello seremos rentables.

Por ello después de la calidad, debemos enfocarnos en la productividad (factor de eficiencia que relaciona el rendimiento animal con el uso de los recursos naturales), Si somos eficientes y tenemos claros conceptos del buen manejo de los recursos, respeto y conservación del medio ambiente, una buena orientación de los equipos de trabajo, un aporte a la sociedad, además de unas buenas estrategias de mercadeo; entonces, seremos sostenibles.

Para poder pasar al siguiente paso que es el de disminuir el costo, debemos tener claro que el técnico debe conectar su cerebro técnico con los conceptos económico, los aumentos de la productividad tienen un efecto en la dilución del costo. No es producir “barato” como muchos creen quien disminuye o constriñe el costo, baja el beneficio.

El concepto de costo es comprender que los negocios no son de precio, ni de costo, son la relación del volumen con el margen (margen de contribución o utilidad bruta, diferencia entre el precio y el costo). La interacción de ambos, un factor como es el volumen producido, conduce a la disminución del costo unitario de producción y este multiplicado por un buen margen de contribución en sistema de producción, tienen como resultado el mejoramiento de la utilidad y la rentabilidad del sistema, (para ver mejor estos resultados, revisen como se ha desarrollado la industria avícola y porcícola), lógicamente un poco más difícil en un sistema bovino “que no tiene techo” y posee muchos más factores no controlables; pero es posible lograrlo.

El comprender el sentido social y humanístico del ser humano, me permite desempeñarme mejor en situaciones sociales caóticas como lo que pasa en nuestros países. Una buena interrelación de sistema de producción con la sociedad, puede mantener una comunidad más tranquila y alineada con los objetivos de una región. Estar de espaldas a la comunidad es un grave error en los tiempos actuales, donde los stackeholders o partes interesadas (clientes, proveedores, estado, ONGs, comunidad, etc.) están viendo que tú haces y como interactúas con la comunidad.

Un asesor técnico no puede alejarse por ningún motivo de las fuentes de información confiables, tiene que aprovechar los desarrollos de las tecnologías y debe saber utilizar las TICs, el Excel o programas de software especializados, como elementos de diferenciación en el mercado.

Un asesor técnico debe ser un “hombre entrenado” que, con conocimiento, sentido común, simpleza y humildad, sea capaz de llegar con una información seleccionada y una comunicación firme y fluida ante el productor o el trabajador del campo y construir verdaderas soluciones en conjunto.

Para ello no sólo debe tener las técnicas de los procesos; sino, que debe poseer mucha inteligencia emocional (Goleman, 1999), pasión, asertividad y desarrollar un buen clima laboral que genere confianza y compromiso para lograr los objetivos, a través de poner en movimiento la acción y gestión con liderazgo.

¿Cómo mejorar asesoría técnica en bovinos?

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Estrategia de integración de ADM: Milan Hruby

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