Reclasificación del género Lactobacillus: Esto traerá modificaciones en los inoculantes y probióticos

Desde 2019 han sucedido muchas cosas en la microbiología. Y no estoy hablando del virus Sars-CoV-2, causante del Covid-19.

Hubo un gran cambio en la microbiología bacteriana. Microbiólogos de diversos países revisaron taxonómicamente uno de los principales géneros de microorganismos (Lactobacillus) y dividiéndolo en 23 nuevos géneros recién creados. Este trabajo fué publicado en el International Journal of Systematic and Evolutionary Microbiology por Zheng et al., 2020. Esta reclasificación ocurrió en dos familias: Lactobacillaceae y Leuconostocaceae, entretanto el género de mayor interés de uso como inoculantes de ensilaje y/o probióticos es el género Lactobacillus, y es en éste que iremos a destacar mejor esta reclasificación.

Los Lactobacillus originalmente fueron propuestos por Beijerinck en 1901 e incluían microorganismos gram-positivos, anaerobios facultativos y no esporulados. El inicio de la clasificación taxonómica abarcaba características fenotípicas, temperatura óptima de crecimiento, utilización de azúcar y espectro de metabolitos producidos (Orla-Jensen, 1919, citado por Zheng et al., 2020). En los últimos 15 años, la secuenciación genómica se tornó ampliamente disponible y se inició la introducción de la identidad nucleotídica, o en inglés Average Nucleotide Identity (ANI), como padrón de oro para diferenciar dos microorganismos procariotas (Chun et al., 2018, citado por Zheng et al., 2020). Hubo un importante avance debido a las nuevas técnicas moleculares y el desarrollo de la bioinformática. Mientras a inicios del siglo pasado había una decena de especies de Lactobacillus, previamente a la reclasificación este número llegó a 261 especies distintas.

Está claro que no se trata sólo de rebautizar y cambiar el nombre del género al cual pertenecen, pero este estudio fue extremamente profundo y evaluó las características de estos microorganismos con el fin de agruparlos de manera más correcta en vista de los recursos genéticos y de la bioinformática ahora disponibles.

El propósito de este artículo no es explicar completamente qué cambios se han producido. El objetivo es, más bien, solo destacar cuáles serán los nuevos nombres que se adoptarán para las especies más comunes de Lactobacillus presentes en inoculantes para ensilaje y probióticos. Aquellos interesados en el tema pueden profundizar en el artículo completo publicado por Zheng et al., 2020. 

2.      Especies de Lactobacillus más comúnmente usadas en nutrición animal y sus reclasificaciones 

Una consideración importante e incluso un cuidado por parte de este grupo de científicos en microbiología responsables de esta evaluación y propuesta fue intentar, en la mayoría de los casos, establecer nombres para los nuevos géneros, manteniendo la inicial “L”. Esto evitaría una gran confusión que podría ocurrir al revisarse publicaciones anteriores al cambio y compararla con los artículos publicados posteriormente. Por ejemplo, el conocido Lactobacillus plantarum que muchas veces aparece como L. plantarum, pasó a ser clasificado como Lactiplantibacillus plantarum, manteniéndose la forma abreviada como L. plantarum. Pero no todos los casos fueron atendidos, un ejemplo de esto es el Lactobacillus oligofermentans que fue rebautizado como Paucilactobacillus oligofermentans.

Otro punto que debe quedar claro es que muchos de los “antiguos” Lactobacillus permanecen así, mantuvieron su género y especie sin ningún cambio. Un ejemplo es el Lactobacillus delbrueckii. Las subespecies y demás variantes se mantienen como se han descripto anteriormente.

Tabla 1 – Alteraciones del género Lactobacillus y reclasificación taxonómica.

Existen otros, los destacados en la Tabla de arriba fueron solamente los que más se utilizan como inoculantes para ensilaje y probióticos.

A partir de la publicación del artículo de Zheng et al., 2020 esta nueva nomenclatura pasa a ser implementada en las publicaciones científicas, como también esto aparecerá en los productos destinados a la nutrición animal, bajo responsabilidad de los órganos responsables por los registros de aditivos de los países. No se trata de nuevos microorganismos, solamente una nueva forma de nombrarlos. Los nuevos microorganismos que fueron descubiertos a partir de ahora, serán incluidos en algunos de estos nuevos géneros, si es que tienen características semejantes a éstos.