Endometritis en yeguas. Experiencia A Campo (Uso del Endometral plus)

Fueron tratadas 37 yeguas, entre 1 y 4 años (10 S.P.C. y 27 Cuarto de milla) TODAS en franco entrenamiento, que evidenciaban signos y síntomas de "endometritis" en sus distintos estadios, desde subclínicas hasta piómetras.

El específico elegido fue el ENDOMETRAL PLUS para todos los casos, y la modalidad de la aplicación: "infusiones" intrauterinas.

Sólo 4 de estos animales se tomaron como testigos, debido a que no presentaban signología aparente.

Los resultados se describen en el presente trabajo.

MATERIALES Y METODOS

_ Pipetas para inseminación artificial

_ Perfus N* 3

_ Jeringas de 60 cc

_ Solución fisiológica (sachet por 500 cc)

_ Soluciones antisépticas y para curetaje biológico

_ ENDOMETRAL PLUS x 120 cc

DESCRIPCION

Cuando nos referimos "a campo" significa que en NINGUN CASO se pudieron tomar muestras para remitir al laboratorio (tal como se debería proceder) para solicitar cultivo, antibiograma, junto al aislamiento e identificación.

Los motivos fueron varios:

1) lejanía del lugar del ensayo al centro de estudio

2) distancia entre los animales a tratar, (en muchos casos más de 350 Km. entre uno y otro)

3) urgencia de los propietarios de los animales para solucionar el problema

4) disminución de los gastos y del tiempo necesario para realizar una buena práctica, y por el lado profesional (a lo mejor la más importante), la POCA CONFIABILIDAD de los resultados que podrían obtenerse.

Por tal motivo, era de suponer que los gérmenes a los cuales nos enfrentábamos eran los más comunes para estos casos (ENTEROBACTERIAS) de tal manera que la asociación antibiótica del específico utilizado abarca una innumerable gama de GRAM+ y GRAM- y dado que el objetivo de este trabajo NO era investigar las causas, como tampoco cuales eran las bacterias causales; abordamos directamente el tratamiento (**)

TRATAMIENTO

Fueron utilizados en las primeras infusiones entre 60 cc a 120 cc de ENDOMETRAL PLUS, descargándolo en la cavidad uterina con pipeta de inseminación, o también con la guía de suero (perfus N*3) en ambos casos adaptando la jeringa de 60 cc al otro extremo, lógicamente por tacto vaginal (en algunos casos como lubricante se usó gel y en otros, agua y jabón). La forma más práctica en nuestros casos fue el uso del perfus.

El intervalo entre una y otra aplicación varió entre las 24 a 72 hs. Ahora bien, en un 40% de los casos esos intervalos se vieron superados debido a la distancia entre las yeguas y la imposibilidad horaria fue determinante.

RESULTADOS

Las yeguas tratadas con intervalos promedio entre 24 a 48 horas, necesitaron MENOS infusiones que aquellas que entre una y otra superaban las 72 horas ó más, por las dificultades arriba señaladas.

¿Cómo se determinó clínicamente la mejoría?

Podría ser muy subjetivo el criterio que se tomó en cuenta para suspender el tratamiento, pero, (como se suele decir y en realidad así es) LA CLINICA ES SOBERANA, y si además tomamos en cuenta nuestro difícil entorno de trabajo, como se ha hecho notar en la descripción de esta experiencia, hemos comprobado:

A) Aumento del apetito, o mejor asimilación de las raciones.

B) Notoria mejoría del manto (pelaje)

C) Cierre gradual y progresivo del cérvix (haciéndose visible al intentar "enhebrar" el mismo con la sonda)

D) Cierta dificultad al querer infundir la misma cantidad de medicación en el útero

E) Cambio en la coloración de la mucosa vaginal (más clara)

Todos estos ítems fueron REPETITIVOS casi sin excepción.

Recordemos que comenzamos con 60 a 120 cc por infusión, y ya a la 3ra ó 4ta dosis, con un volumen cercano a 60 cc se podía completar la cavidad uterina, ya que se podía "sentir" que parte de lo aplicado quedaba en el piso de la vagina. De tal forma que en ese instante se procedía a la vulvorrafia convencional.

Hay que hacer notar que las cuatro yeguas tomadas como testigo también fueron suturadas, pero no se notaron los cambios descriptos, posiblemente la coloración de la mucosa fue para estos animales, lo más significativo.

OBSERVACIONES

En los pocos casos en que las endometritis eran francamente purulentas, primero se procedió a practicar LAVAJES con soluciones antisépticas junto a una medicación que actúa como "curetaje biológico", y para esto se utilizó como vehículo, solución fisiológica en sachet de 500 cc, de forma tal que el exceso de material purulento y necrosado no interfiera con los principios activos (AMOXICILINA-ENROFLOXACINA).

Recordamos que también se podrían obtener buenos resultados con el uso de PF2alfa, estradiol, etc., pero acá tropezamos con otro posible inconveniente:

1) Dificultad en conseguir dichos insumos

2) No querer provocar "posibles" desbalances hormonales y traer aparejados los trastornos por todos conocidos; teniendo presente que todas las yeguas estaban en pleno entrenamiento.

El presente trabajo esta dedicado a mis maestros:

Profesor Dr. Ernesto G. Capaul
Dr. Roberto H. Condigiani
Dr. Jorge A. Alvarez.

Agradecimiento en particular:

Al laboratorio Burnet por haber facilitado las unidades de ENDOMETRAL PLUS, sin los cuales esta escueta experiencia no podría haber sido realizada.

**Nota del autor:

Existen innumerables trabajos de excelente valor científico donde pueden encontrarse las clasificaciones de las endometritis, etiopatogenia, noxas más comunes, mecanismo íntimo de acción de los antibióticos, desbalances hormonales que se producen, etc., de las que recomiendo su lectura, para que este aporte "a campo" sea mucho más provechoso.