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Determinación de parámetros fisiológicos, hematológicos y bioquímicos sanguíneos en equinos de polo

Publicado: 10 de julio de 2009
Por: Pfeiffer B.P., Carrillo D.R., Retamal M.R. Universidad Mayor. Facultad de Ciencias Silvoagropecuarias. Escuela de Medicina Veterinaria. Chile. 2008.
En Diciembre de 2005 en la R. Metropolitana de Chile, se realizó un estudio en 5 equinos de Polo clínicamente sanos y en competencia en serie alta, a los cuales se les determinaron parámetros fisiológicos, hematológicos y bioquímicos sanguíneos en dos días consecutivos de competencia, con los objetivos de establecer el comportamiento de éstos y determinar si presentaban diferencias entre los dos días.

A cada individuo se le realizaron mediciones basales en reposo y otras seriadas posteriores al ejercicio, de los parámetros antes mencionados  en los días de competencia.  Los resultados del estudio demostraron que el comportamiento de la mayoría de los parámetros analizados no presentó diferencias significativas entre ambos días. Sin embargo, los porcentajes de aumento máximo observados en el segundo día, fueron inferiores a los obtenidos en la jornada anterior. Además, se estableció una alta asociación entre lactatemia y frecuencia cardíaca.

El rendimiento deportivo de equinos de polo es superior en el segundo día, dado a que en éste los parámetros presentan porcentajes de aumento máximo y recuperación, menores y mejores, respectivamente. Los equinos de polo no presentan una rápida homeostasis de lactatos sanguíneos, por lo tanto, deben ser expuestos a éstos durante su entrenamiento, para así mejorar la reversibilidad metabólica lactatémica.
INTRODUCCION
El equino es un atleta por naturaleza, es capaz de presentar adaptaciones substanciales en respuesta al entrenamiento (Hodgson y Rose, 1994 A). Cuando se comparan los parámetros metabólicos con los del hombre, la habilidad del equino en aumentar la eficiencia metabólica en las fases de demanda excede ampliamente al humano. Es así, como un maratonista de élite puede obtener como máximo por kilo de peso corporal 80ml de oxígeno, en cambio un equino puede conseguir 160ml (Morris y Seeherman, 1995). Hasta ahora la mayor cantidad de publicaciones relacionadas con fisiología y medicina deportiva en el equino, hacen referencia a los Fina Sangre Inglés de Carrera que compiten en carreras de velocidad, excluyendo otras disciplinas tanto o más exigentes que ésta. Una de ellas es el Polo, el cual constituye para los equinos un deporte intenso, donde es posible que existan alteraciones en su metabolismo hidrosalino, dadas las grandes cantidades de agua y electrólitos que éstos pierden por concepto de sudor (Snow y Harris, 1992). Esto conlleva a la disminución del volumen plasmático y a un aumento de la viscosidad sanguínea, pudiendo comprometer el trabajo cardiaco y con esto la perfusión muscular, predisponiendo así a fatiga (Martínez, 1999).

La evaluación de la respuesta muscular al ejercicio, permite dirigir desde una perspectiva objetiva el entrenamiento, y así obtener el máximo rendimiento y expresión del potencial atlético que un deportista posea. Los requerimientos energéticos que generan una carga atlética, gatillan una serie de reacciones metabólicas, bioquímicas y hematológicas que producen cambios en una gran cantidad de parámetros, entre los que se encuentran lactatemia, glicemia, proteínas plasmáticas totales, volumen globular, frecuencia respiratoria, frecuencia cardíaca, temperatura corporal, entre otras; variables que ayudan al conocimiento del grado de esfuerzo realizado facilitando el entendimiento de aspectos energéticos e hidrosalinos implicados en la respuesta muscular al ejercicio (Snow y Harris, 1992).

Parámetros Fisiológicos
Temperatura Corporal1: al comienzo del ejercicio la cantidad de energía calórica producida excede a la cantidad de calor disipado, resultando en una rápida elevación de la temperatura. Este hecho presenta un sin número de ventajas, tales como aumentar la temperatura muscular mejorando su rendimiento, facilitar la liberación de oxígeno desde los eritrocitos y provocar un aumento en la frecuencia cardiaca. Todo lo cual conlleva a acelerar las reacciones metabólicas y mejorar la actividad enzimática, haciendo que la producción de energía sea más rápida (McConaghy, 1994).
Frecuencia Cardiaca2: al comienzo del ejercicio existe un incremento de la actividad nerviosa simpática y/o catecolaminas, lo que resulta en un rápido aumento de la frecuencia cardiaca (Evans, 1994). Este hecho proporciona un mejor volumen eyectado en cada proceso sistólico, un mayor débito cardíaco, por lo tanto, un mayor volumen minuto, con lo que crece la velocidad circulatoria y la perfusión orgánica (Martínez, 1999). La recuperación de la frecuencia cardíaca es un buen índice de evaluación de la capacidad atlética de un individuo, debido a que aquellos que poseen un entrenamiento adecuado presentan tiempos menores de recuperación (Hodgson y Rose, 1994 A).
Frecuencia Respiratoria3: ésta aumenta durante el ejercicio, debido a que la principal función del sistema respiratorio es el intercambio gaseoso, por lo tanto, se produce un mayor ingreso de oxígeno y eliminación de dióxido de carbono. Además de poseer funciones de termorregulación, equilibrio ácido base, entre otras. (Lekeux y Art, 1994). Posterior al ejercicio la frecuencia respiratoria generalmente permanece elevada con el fin de cubrir algún déficit de oxígeno y realizar función de termorregulación, por lo que no es un parámetro posible de utilizar en forma única como indicador de la recuperación (Snow, 1990).
 
Parámetros Hematológicos
Hematocrito: el volumen de sangre de un equino en reposo es cercano al 9% de su peso corporal. El volumen globular puede variar enormemente durante la excitación o el ejercicio, donde la contracción esplénica aporta una gran cantidad de eritrocitos, aumentando el hematocrito (porcentaje de elementos figurados en sangre) desde 35 a 45 % en reposo, hasta un 70% después del ejercicio (Evans, 1994). Estudios han reportando que existe una relación directamente proporcional entre la capacidad atlética de un individuo y el total de hemoglobina y/o glóbulos rojos. Sin embargo, equinos sobre entrenados y con valores de más de 2 desviaciones estándar sobre su valor medio de hematocrito presentan un bajo rendimiento deportivo (Rose y Hodgson, 1994 A).
Proteínas Plasmáticas Totales4: controlan la presión osmótica para el óptimo intercambio de fluidos entre la sangre y los tejidos. Éstas no abandonan el compartimiento vascular, lo que hace que se eleve su valor basal durante el ejercicio, debido a la gran cantidad de agua plasmática sustraída por el músculo hiperosmótico y a las pérdidas acuosas por sudor y aire espirado. Una vez terminado el trabajo muscular, el aumento de la osmolaridad plasmática, permite recuperar agua desde la orina y propicia la reabsorción de ésta desde el hipoosmótico transcelular digestivo (Martínez, 1999).
Parámetros Bioquímicos
Lactatemia: en todos los tipos de ejercicio el lactato5 es producido por el trabajo muscular, alcanzando mayores concentraciones al aumentar la intensidad del esfuerzo, y cuando el oxígeno a nivel muscular es insuficiente (Rose y Hodgson, 1994 A). Los cambios en la concentración del lactato sanguíneo representan, en alguna medida la magnitud de la glicólisis empleada, la eficiencia de su saturable mecanismo de transportación y su reversibilidad metabólica (Martínez, 1999). El incremento de la lactatemia post ejercicio es el resultado de un aumento de la glicólisis anaeróbica muscular producto de la falta de oxigenación tisular con que se realiza el ejercicio. Esto es considerado como una fuente de energía subsidiaria cuando el aparato muscular requiere más energía de la que se puede generar aeróbicamente (Cerretelli, 1992). El ácido láctico producido durante el ejercicio puede ser parcialmente tamponado en el citosol de la célula muscular, el resto debe ser rápidamente transportado hacia el extracelular, donde es neutralizado por el bicarbonato plasmático, resultando en lactato y ácido carbónico (ac. volátil). El lactato en circulación es transformado por el metabolismo hepático (Ciclo de Cori) en glicógeno, considerándose un importante intermediario metabólico (Martínez, 1999).
Glicemia: la glucosa6 es el sustrato energético del organismo, la cual aumenta en todas las formas de ejercicio por estimulación de la glicogenólisis hepática .Sin embargo, durante el esfuerzo e inmediatamente posterior a éste, la glicemia debe presentar un descenso en sus valores, dada la mayor incorporación al músculo para evitar su fatiga (Rose y Hodgson, 1994 A). Los cambios en circulación de concentraciones de glicemia expresan en alguna medida, la magnitud de la glicólisis empleada y entregan información sobre el aporte de este sustrato a la glicólisis. Por este motivo, sus variaciones indican niveles de consumo y participación en la vía glicolítica  (Martínez ,1999).
Creatin Kinasa7: enzima altamente específica de la musculatura estriada que se encuentra en gran concentración en músculo esquelético y miocardio, por lo que permite detectar y determinar el grado de daño a este nivel. Ésta es abundante en el citosol, fácilmente liberada cuando ocurre ruptura celular, por lo que se califica como un sensitivo indicador de mionecrosis. Sin embargo, esta enzima puede presentar incrementos leves o moderados posterior a la realización de un ejercicio, producto de un aumento en la permeabilidad de la membrana mitocondrial (Rose y Hodgson, 1994 B).
MATERIALES Y METODOS
El estudio fue realizado durante el mes de Diciembre de 2005, en la R. Metropolitana de Chile. Se utilizaron 5 equinos de Polo clínicamente sanos, que se encontraban compitiendo en seria alta. A cada individuo se le realizaron mediciones básales en reposo y otras seriadas posterior al ejercicio, de parámetros fisiológicos, hematológicos y bioquímicos, en dos días consecutivos de competencia. Cada ejemplar fue sometido por día, a un tiempo de juego de siete minutos. Las mediciones posterior al ejercicio se realizaron inmediatamente terminado éste (0'), luego, algunos parámetros fueron muestreados seriadamente en seis controles; los cuatro primeros se evaluaron con un intervalo de 5 min, y el quinto y sexto con un espacio respecto al último de 10 y 90 min respectivamente (0', 5', 10', 15', 20',30', 120',6 hrs). Para establecer el comportamiento en el tiempo de glicemia y lactatemia, frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria y temperatura corporal, se utilizaron las medias obtenidas del análisis de varianza (Anova) para cada uno de los parámetros. La existencia de diferencias entre el comportamiento de las variables mencionadas en dos días consecutivos de competencia, se realizó mediante la determinación de correlación entre éstas, considerando los valores obtenidos por día. La existencia de diferencias entre los días consecutivos de competencia de los valores de hematocrito, proteínas plasmáticas totales y la enzima Creatin Kinasa, fue realizada mediante la prueba t'-student de acuerdo con Díaz (2005). Mediante un análisis de regresión polinomial, según curvas de respuesta de acuerdo con Kuenl (2000), se realizaron las asociaciones entre lactatemia - frecuencia cardiaca, temperatura corporal - frecuencia respiratoria y lactatemia - frecuencia respiratoria. Los porcentajes de aumento y de recuperación para las variables analizadas se obtuvieron mediante la realización de una ecuación lineal.
RESULTADOS Y DISCUSION
Se observó que entre dos días de competencia consecutiva, la mayoría de los parámetros analizados no presentaron diferencias significativas (p > 0,05) en su comportamiento. Sin embargo, en el segundo día los porcentajes de aumento máximo fueron inferiores a los de la jornada anterior. Así mismo en este último, se determinaron mejores porcentajes de recuperación en el tiempo respecto al primer día. 
Los valores  de las medias observados de la frecuencia cardíaca no presentan diferencias significativas entre ambos días (p = 0,9; p > 0,05), pero si difieren sus porcentajes de aumento y recuperación. Se determinó un porcentaje de aumento de un 209,3% versus un  166,7% para los días 1 y 2, respectivamente. Además, se estableció que a los 15 minutos posterior al ejercicio, el porcentaje de recuperación fue de 47% para el primer día versus un 61,6% para el segundo. La frecuencia respiratoria mostró un comportamiento semejante, el cual alcanzó un peack posterior al esfuerzo y un descenso paulatino en el tiempo. En ambos parámetros su tendencia puede ser homologada a la que presentan equinos que practican otras disciplinas deportivas, observándose en el caso de la frecuencia cardíaca que a los 20 minutos sus valores correspondían prácticamente al doble de los básales (Hodgson y Rose, 1994 A). En los atletas velocistas este hecho indica una buena adaptación al ejercicio (Martínez, 1999). El comportamiento de la frecuencia cardiaca encuentra explicación en la necesidad de proporcionar un mayor volumen minuto para conseguir un incremento en la velocidad circulatoria y perfusión orgánica, indispensables para la realización de un normal desempeño deportivo (Snow, 1990). La diferencia de 42,6 puntos porcentuales observada en los valores básales de este parámetro, puede deberse a que en el segundo día existió un precoz estímulo adrenérgico, incrementando la actividad de las catecolaminas, reflejándose en una frecuencia cardíaca mayor (Evans, 1994). Respecto a la frecuencia respiratoria el gran aumento observado, se debe sin duda a la mayor demanda de oxígeno requerida durante el ejercicio, eliminación de dióxido de carbono originado por el catabolismo muscular y a su función termoreguladora (Snow, 1990). La disipación de calor por medio de la ventilación, está dada por un aumento en la frecuencia respiratoria, pero no del volumen tidal. En el equino a diferencia de otros mamíferos, la hiperventilación presenta un incremento mayor, debido a su imposibilidad de respirar por la boca (Jones, 1989 A).
Respecto a la tendencia observada de los lactatos sanguíneos, se pudo apreciar que fue similar en los 2 días de competencia, manifestándose su peack inmediatamente posterior al ejercicio y un descenso paulatino hasta los 30 minutos. Además, se observó que en el segundo día el aumento máximo fue prácticamente la mitad al resultante homologo del día anterior, arrojando una diferencia entre ambos de 401,53 puntos porcentuales. Esta situación posiblemente tenga respuesta en el hecho de que en el día anterior los equinos habían sido sometidos a niveles de lactatemia, lo que posibilita resistir una igual o mayor carga atlética antes de alcanzar el umbral anaeróbico y posteriormente el punto máximo de reversibilidad metabólica del lactato (Martínez, 1999).

La lactatemia presentó una asociación con la frecuencia cardíaca de 77,95% en promedio de ambos días, es decir, la primera variable logra explicar en el porcentaje mencionado el comportamiento de la segunda. Esto se debe a que los lactatos sanguíneos, aunque indirectos, son indicadores de la capacidad cardiovascular (Rose y Hodgson, 2000) También éste indicador bioquímico mostró un 47,5% (promedio de ambos días) de asociación con la frecuencia respiratoria, interpretándose como el porcentaje en que la lactatemia condiciona el comportamiento de la variable mencionada. Situación que es posible explicar, debido a que el oxígeno es necesario para favorecer la reversibilidad metabólica del lactato (Lekeux y Art, 1994).
La temperatura corporal mostró una asociación con la frecuencia respiratoria de un 37.7% en promedio de ambos días, interpretándose que la primera variable condiciona a la segunda en el porcentaje señalado. Situación que podría explicar el porque las alzas térmicas observadas no representaron una gran diferencia con respecto a los valores básales (Lekeux y Art, 1994). Este último parámetro, alcanzó su peack posterior al ejercicio y mantuvo un plató por aproximadamente 30 minutos, tiempo en el cual comenzó su descenso. Esto coincide con lo señalado por otros autores, los que además mencionan que la duración de éste obedece a la intensidad del ejercicio, siendo relativamente independiente de las condiciones ambientales  (McConaghy, 1994). Respecto a los porcentajes de aumento de hematocrito para el día 1 y 2, éstos resultaron en un 75,69% y en un 40,9%, respectivamente.

En cuanto a los porcentajes de recuperación a los 30 minutos posterior al ejercicio, el primer día experimento un 52,7% versus un 75,6% el segundo. Esta tendencia se asemeja a la descrita en otras disciplinas deportivas, obedeciendo a la contracción esplénica normal frente al ejercicio (Jones, 1989 B). La diferencia que se presentó en los valores básales, es posible que esté dada por un estímulo adrenérgico precoz en el segundo día, y no a un cuadro de deshidratación, debido a que las proteínas plasmáticas totales no reflejaron tal alteración, ya que, éstas siempre se encontraron dentro de los rangos de normalidad. Además, este hecho puntual no resulta importante, debido a que cerca de un tercio de los eritrocitos en equinos en reposo se encuentran en el bazo, por lo que su medición basal no es representativa del valor real del hematocrito. (Jones, 1989 B).
En relación a la glicemia, se pudo observar que su peack se encuentra en tiempos distintos en relación al día de competencia. El valor más elevado para el primer día se obtuvo inmediatamente después del ejercicio, mientras que para el segundo se alcanzó a los 30 minutos posterior a éste. Aquí no fue posible observar su disminución sanguínea característica de atletas velocistas (Rose y Hodgson, 2000), lo que puede encontrar explicación en que el Polo es una disciplina donde se exige a los equinos a realizar carreras cortas en velocidad y detenciones bruscas por un periodo de 7 minutos, situación que imposibilita la apreciación de hipoglicemia post ejercicio. Sin embargo, fue posible observar la hiperglicemia posterior al esfuerzo debido a la acción glicogenolítica de las catecolaminas y a la inhibición adrenérgica de las células beta pancreáticas, con lo que disminuye la producción de insulina (Martínez, 1999).
La tendencia observada por la enzima Creatin Kinasa, fue prácticamente lineal, es decir, los valores obtenidos posterior al ejercicio no presentaron diferencias respecto a los básales. De aquí se puede inferir que en los equinos estudiados no existió daño muscular, y que el leve aumento descrito, se debió sólo a un incremento en la permeabilidad de la membrana mitocondrial, y no a cuadros de mionecrosis (Rose y Hodgson, 2000).
 
CONCLUSIONES
El rendimiento deportivo de equinos de Polo es superior en el segundo día, dado a que en éste los parámetros presentan porcentajes de aumento máximo y recuperación, menores y mejores, respectivamente.
Los equinos de Polo no presentan una rápida homeostasis de lactatos sanguíneos, por lo tanto, deben ser expuestos a éstos durante su entrenamiento, para así mejorar la reversibilidad metabólica lactatémica.
La lenta disminución de la lactatemia post esfuerzo no produce necrosis muscular.
La glicemia post esfuerzo no es un buen indicador de la aptitud física en equinos de Polo como en otras disciplinas deportivas.
 
REFERENCIAS
CERRETELLI P. Energy Sources for Muscular Exercise. En: Journal Sport Medicine.Vol. 13. USA. 1992. pp:106.
EVANS D. The Cardiovascular System: Anatomy, Physiology, and Adaptation to Exercise and Training. En: The Athletic Horse. Phidelphia, USA. Saunders Company. 1994. pp:129-145.
HODGSON D. y ROSE R. Training Regimens: Physiologic Adaptation to Training. En: The Athletic Horse. Philadelphia, USA. Saunders Company. 1994. pp: 379-386 (A).
HODGSON D. y ROSE R. Evaluation of Performance Potential. Physiologic Adaptation to Training. En: The Athletic Horse. Philadelphia, USA. Saunders Company. 1994. pp: 231-243 (B).
JONES W. The Respiratory System. En: Equine Sports Medicine. Philadelphia. USA. Lea & Febiger.  1989. pp: 59 - 86 (A).
JONES W. Perfomance Profiling. En: Equine Sport Medicine. Philadelphia. USA. Lea & febiger. 1989. pp: 210-213 (B).
LEKEUX P., ART T. The Respiratory System: Anatomy, Physiology and Adaptation to Exercise and Training. En: The Athletic Horse. Philadelphia, USA. Saunders Company. 1994. pp: 79-128.
MARTÍNEZ R. Cambios Fisiológicos inducidos por el ejercicio En: Monografías de Veterinaria, Vol. 18 (1-2). Santiago, Chile. Universidad Chile. 1999.
McCONAGHY F. Termorregulation. En: The Athletic Horse. Phidelphia, USA. Saunders Company. 1994. pp: 181-204.
MORRIS E., SEEHERMAN H. Sport Medicine Program and Performance Evaluation. En: The Horse Disease Clinical Managment. Philadelphia, USA. Saunders Company. 1995. pp: 1275-1284.
ROSE R. y HODGSON D. Hematology and Biochemistry. En: The Athletic Horse. Philadelphia, USA. Saunders Company. 1994. pp: 63-78 (A).
ROSE R y HODGSON D. Physical Examination. En: Manual of Equine Practice. Philadelphia, USA. Saunders Company. 2000. pp: 1-24. 
SNOW H. y HARRIS R.  Effects of High-Intensity Exercise on Plasma Cathecolamines in the Thoroughbred Horse. En: Equine Veterinary Journal. Vol. 24. UK. 1992;  pp:  462-467.
SNOW H. Haematological, Biochemical and Physiological Changes in Horse and Ponies During the Cross Country Stage of Driving Trial Competitions. En: Veterinary Research Communications. Vol. 126. USA. 1990. pp: 223- 239.
 

1 Temperatura corporal: 37.5° - 38.5° C (Rose y Hodgson, 2000 C).
2 Frecuencia cardiaca 28 - 36 latidos/minuto  (Rose y Hodgson, 2000 C).
3 Frecuencia respiratoria: 8 - 16 ciclos/minuto. (Rose y Hodgson, 1994 B).
4 Proteínas plasmáticas: 5.5 - 7.5 gr./dl.(Rose y Hodgson, 2000 C).
5 Lactato:  1.3- 4 mmol/L. (Jones , 1989).
6 Glucosa: 90-144 mg/dl (Rose y Hodgson, 2000 C).
7 Creatin Kinasa  : 100-300 U/L (Rose y Hodgson, 2000 C).

Trabajos científicos presentados en 2008 en el Congreso Mexicano de Veterinarios Especialistas en Equinos (AMMVEE).
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Amilcar Pacheco
22 de octubre de 2012
Carlos Pipolo, reciba mis saludos cordiales, y muchas gracias, cuando tenga nuevos análisis, lo consultaré, gracias, Amilcar Pacheco
Amilcar Pacheco
22 de octubre de 2012
Gracias Carlos, si, es cierto que no hay suficientes datos, de cualquier manera le cuento, que en analisis anteriores las plaquetas eran 90.000, ahora llegò a 150.000, el hematocrito también subiò algo, le estoy dando hierro B12, vit C, calcio DE (CALASTREME); RED CELL, creo que ha mejorado, dentro de 1 mes le volveré hacer análisis, también está creciendo (3,1/2 años), lo estoy haciendo correr, pero sin darle nada de estimulantes, le estoy dando ácido teotico, aminoácidos, y como le daba bastante avena, la he reducido y le estoy suministrando mas pasto
Carlos Pipolo
22 de octubre de 2012
Sr Amilcar,es que nos resulta muy dificil que solo a travez de un analisis podamos decir su caballo tiene esto o aquello,solo se aprecia cierto daño hepatico como ud dice pero no sabria precisarle la causa,infeccioso,alimenticio,medicamentoso,etc.,tampoco dice si tiene sintomatologia hepatica como decaimiento o falta de rendimiento,hipoproteinemia y otros parametros,si el caballo es de carrera esta bajo en todo,por lo tanto el tratamiento seria mas integral. Por lo pronto lo unico que puedo decirle es darle un protector hepatico (cosa que ya debe haber hecho) que contenga metionina,colina,vit. b15 ,lisina,sorbitol. Tambien la glucosa es buen protector al igual que la vit K, mucha suerte.
Amilcar Pacheco
12 de octubre de 2012
PARECE QUE NINGÚN VETERINARIO SE INTERESA POR EL PEDIDO QUE HE FORMULADO INMEDIATAMENTE ARRIBA
Amilcar Pacheco
11 de octubre de 2012
Agradezco si alguien me aconseja que medicación debo proveerle al equino, de acuerdo con estos análisis que a continuación transcribo: HEMOGRAMA Hematies: 8.610.000.- Leucocito: 10.600.- Hemoglobina: 15,4 Hematocrito: 38,6 V.G.M: 44,83.- Hb. C.M. : 17,88 C. Hb. C.M.: 39,89.- RECUENTO DE PLAQUETAS: Resultado: 149.000.- (v/r: 150.000 a 450.000/mm3) HEPATOGRAMA: Transaminasa Glutàmico Oxal (GOT): 429.- UI/1 .- VN: 0-38.- Transaminasa Glutàmico Pirùvica ( GPT) : 15 UI/1.- VN:0-40.- FOSFATASA aLCALINA: 891.- BILIRRUBINA: B.Indirecta: 27,2 B. Directa: 3,5 B.total: 30,7.- COLESTEROL: Resultado: 76 agradecería que me orienten para normalizar estos análisis, ya que observo algunos anormales en el RECUENTO DE PLAQUETAS Y EL HEPATOGRAMA, MUCHAS GRACIAS
Hugo
6 de enero de 2012
una pregunta tengo una yegua con 7.870.000 de globulos rojos y hematocritos 30,3% estaran mal los analisis o puede ser que . es mestiza de carrera. gracias, alguien que me informe.
Marcos Lucas
Marcos Lucas
3 de septiembre de 2009
Hola Quisiera saber si se han hecho estudios de rendimiento físico de caballos de polo en partidos. Distancia recorrida Intensidades de esas distancia Cantidad de sprint y a la velocidad que lo hicieron Cambios de direcciones Frenados o desaceleraciones Muchas gracias Marcos
Ricardo E. Caicedo
Ricardo E. Caicedo
10 de agosto de 2009
Me parece con todo respeto del autor que las n: numero de animales en experimentación o en la prueba debe aumentarse, para poder establecer parametros confiables en animales dedicados a esta actividad deportiva.
Alexander Orozco Hurtado
Alexander Orozco Hurtado
30 de julio de 2009
Para la suplementacion, de los equinos de polo ¿Cuales serian los productos a utilizar en cuanto a necesidades o deficiencias tenga el animal respecto a su poco estado fisico?
Ramón Martínez Peñaloza
Universidad de Chile
28 de julio de 2009
En la hiperventilación en ejercicio del equino debe existir la estimulación del centro respiratorio y otros por el seguro incremento de la concentración de potasio plasmático, junto a lactato. Si es verdad que nada es más gastador de energía que los cambios de velocidad, sería interesante constatarlo en poleros midiendo el VO2Máx en el Treadmill de La Plata. Cordiales saludos a los autores del interesante artículo
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