Centroamérica - Descartan uso de hormonas en pollo y huevos

Las autoridades sanitarias del país destacaron ayer que las granjas avícolas de Centroamérica no utilizan hormonas para acelerar el crecimiento de los pollos y sus derivados, los cuales son un alimento básico en la dieta de los costarricenses y miles de centroamericanos. Según José Joaquín Oreamuno, director de Salud Animal del MAG, este fue uno de los principales resultados dados a conocer por la Comisión Técnica Regional en Sanidad Aviar, la cual reunió en suelo nacional a empresarios y ministerios de Agricultura y Ganadería de Guatemala, Belice, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Costa Rica. "Cualquier percepción de riesgo que exista o pueda surgir acerca del consumo de hormonas en la carne del pollo es infundada. Los profesionales lo entendemos, y es necesario que la población lo sepa", dijo Oreamuno, quien explicó que el uso de hormonas es prohibido en todo el istmo. "Hace tiempo se prohibió el uso de hormonas en los pollos, pues se tenían sobradas sospechas sobre el riesgo para la salud humana". Por su parte, Mario Mota, secretario de la Federación de Avicultores de Centroamérica y el Caribe (Fedavicac), desmintió el "mito" de la producción con hormonas. "Para tranquilidad de toda la población, podemos asegurar que la producción de pollo de engorde y huevos de plato se realiza sin hormonas. Ha sido la especialización genética, junto a las excelentes medidas nutricionales y sanitarias, lo que ha permitido que se produzcan pollos en tiempo reducido y con pesos impresionantes", aseguró. El uso de hormonas para engordar aves está relacionado con la aparición de cáncer y un crecimiento o desarrollo prematuro de las mujeres. Según la OMC, al año se consumen 36 millones de toneladas de huevos, y se venden para el consumo 11.329 millones de aves de granja.