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Enfermedades respiratorias de presentación simultánea en las aves

Publicado: 14 de junio de 2017
Por: Oscar Robin, DMV. Director Científico de Carval. Colombia
El sistema respiratorio de las aves es la principal puerta de entrada para las enfermedades, la invasión del aparato respiratorio por agentes patógenos y las condiciones inadecuadas del galpón afectaran la salud y el desempeño del lote. La temperatura incorrecta, el polvo, la humedad, el amoniaco y una pobre ventilación asociados a los microorganismos ocasionaran la presencia del complejo respiratorio, el cual es una condición o síndrome en donde múltiples agentes etiológicos están presentes lesionando el sistema respiratorio.
Los principales agentes primarios que afectan el tracto respiratorio de las aves son:
- Virus.
  • Enfermedad de Newcastle.
  • Bronquitis infecciosa.
  • Lariongotraqueitis Infecciosa.
  • Influenza Aviar.
  • Rinotraqueitis Aviar.
- Bacterias.
  • Pasteurella multocida.
  • Haemophilus paragallinarum.
  • Ornithobacterium rhinotracheale.
  • Mycoplasma gallisepticum.
- Hongos.
  • Aspergillus fumigatus.
Los agentes etiológicos mencionados anteriormente se pueden presentar en forma simultanea y además asociados a otros agentes como E. coli y a factores medio ambientales como temperatura, humedad, densidad de población etc. y con otros factores como la línea genética, la respuesta inmune, el estado nutricional que son predisponentes. La complejidad de las enfermedades respiratorias se incrementa cuando las condiciones predisponentes y los organismos oportunistas están presentes, estos organismos aprovechan el daño causado por los agentes primarios para invadir y proliferar en las aves susceptibles. Los agentes secundarios interactúan con el agente primario resultando un efecto acumulativo que es peor que cuando el agente primario está solo.
En las enfermedades respiratorias otra condición importante es el mecanismo de transmisión que es el paso del agente de un huésped a otro por medios directos o indirectos y que esta influenciado por la disponibilidad de población susceptible, ruta de entrada, mecanismo de eliminación, rata de multiplicación, grado y duración de la enfermedad, excreción y supervivencia del agente etiológico en el medio ambiente.
El Sistema respiratorio es vital en el organismo, proporciona Oxigeno, retira CO2, regula el balance de fluidos del cuerpo, regula la temperatura del cuerpo y sirve para la comunicación o fonación.
El sistema respiratorio de las aves evolucionó hacia una máxima eficiencia en el intercambio gaseoso y hacia un peso mínimo para el ave, fue un paso importante en la evolución para que así las aves lograran volar. El sistema respiratorio aviar tiene un complejo grupo de sacos aéreos, y el aire inhalado debe ser empleado con eficiencia y esto se logra controlando su flujo a través de dichos sacos para pasar luego a los pulmones.
Sin embargo, este desarrollo de la evolución tiene debilidades como son una tráquea extremadamente larga, pulmón sin alvéolos, pulmón rígido que no se expande ni se contrae pero con una gran superficie para el intercambio de gases, no existe el reflejo de la tos, no existen cilios en los parabronquios.
La presencia de 9 sacos aéreos (1 impar y 4 pares), que funcionan como “fuelles” y que son los que causan las diferencias de presión a través de los pulmones, originando el movimiento de los gases durante la respiración, tienen una pared extremadamente delgada y no contribuyen al intercambio de gases con la sangre, ocupan el espacio disponible no ocupado por las vísceras.
Los sacos aéreos se dividen en dos grupos. El primer grupo lo componen los sacos aéreos craneales que proceden del primer grupo de bronquios secundarios y que son cervicales, clavicular y torácicos craneales en donde la tensión de oxigeno es menor que la de CO2. El segundo grupo está conformado por los sacos aéreos caudales que tienen su origen en el segundo y tercer grupo de bronquios secundarios y son los sacos aéreos torácicos caudales y abdominales y en estos la tensión de oxigeno es mayor que la de CO2.
La anatomía y fisiología del tracto respiratorio de las aves permite una gran debilidad y es que un proceso infeccioso en cualquier parte del tracto puede rápidamente diseminarse a través de la red de sacos aéreos los cuales penetran el tórax, abdomen y aún los huesos largos neumáticos, así que una infección del tracto respiratorio alto casi siempre llega a los sacos aéreos abdominales e incluso a la cabeza del fémur.
El tejido linfoide asociado al ojo y el sistema Bronco-asociado (BALT) con sus agregados de células linfoides en el tracto respiratorio son el mecanismo primario de defensa para controlar la diseminación de un proceso infeccioso. Estas células inician la respuesta inmune local y luego estimulan la respuesta en otros órganos linfoides generando la respuesta inmune sistémica para poder controlar la situación de enfermedad. La glándula de Harder del tejido asociado al ojo y como órgano linfoide secundario del tracto respiratorio desempeña un papel muy importante con la presencia de anticuerpos maternos, en el control de los agentes infecciosos, así como en generar una respuesta local a las vacunas.
Desde el punto de vista de la nutrición las deficiencias de proteínas y aminoácidos reducen los anticuerpos circulantes en las aves sometidas al desafío de campo. Los niveles bajos de proteína reducen las proteínas plasmáticas y esa es la razón para la disminución de los anticuerpos circulantes.
En los procesos infecciosos la síntesis de proteínas se altera para lograr diferentes tipos de proteínas como las proteínas de la fase aguda y las Inmunoglobulinas, al mismo tiempo hay una ruptura controlada de proteínas para proporcionar aminoácidos a las funciones inmunitarias y para la reparación de tejidos en los sitios lesionados.
Un gran número de nutrientes impacta la respuesta de las aves al desafío, por lo tanto se deben preparar las aves para la exposición inevitable a los microorganismos mejorando los niveles de vitaminas y minerales, sin embargo los nutrientes son “desviados” de las funciones productivas hacia los mecanismos de defensa diseñados para el agente agresor, por esta razón el esfuerzo de las aves para combatir las infecciones virales del tracto respiratorio es a expensas del peso corporal y de la conversión alimenticia y pueden dejar al ave vulnerable a las infecciones bacterianas. Es importante que el alimento de las aves sea diseñado teniendo en cuenta la salud y el desempeño para soportar el mecanismo de defensa antes que llegue el desafío infeccioso.
Durante el estrés, incluyendo el estrés causado por las infecciones las necesidades de vitaminas se incrementan, vitaminas como la A, E, y C se disminuyen en la medida que los microorganismos dañan las paredes celulares y el organismo aumenta los requerimientos de vitaminas hidrosolubles en la medida que se incrementa la síntesis de proteínas para generar anticuerpos. El estrés agudo limita el crecimiento, causa perdidas en la eficiencia alimenticia y deja el ave susceptible a los desafíos virales. El estrés crónico, por el contrario deja las aves vulnerables a los desafíos bacterianos y a los causados por parásitos tanto internos como externos. Cabe anotar que el estrés moderado es necesario para lograr el mejor balance entre respuesta inmune y productividad.
La inmunosupresión afecta particular y profundamente la Respuesta Inmune tanto humoral como celular del tracto respiratorio, los inmunosupresores mas importantes y con incidencia marcada sobre la Respuesta Inmune en el tracto respiratorio son: El virus de la Enfermedad de Gumboro (IBDV), el virus de la Enfermedad de Marek (MDV), el virus de la Anemia Infecciosa Aviar (CAV), debido a las células que afectan durante los procesos de infección la respuesta Inmune del tracto respiratorio tanto local como sistémica se vera reducida o anulada dependiendo de la edad de infección. Es importante mencionar que otros agentes como las Aflatoxinas y las Ocratoxinas, otros virus y bacterias así como la pobre ventilación, los niveles altos de amoniaco, la alta humedad de la cama y del ambiente, la sobrepoblación y la mala nutrición van a comprometer la respuesta de defensa y las funciones respiratorias.
Las aves con la Bolsa de Fabricio Intacta producen un buen balance de anticuerpos entre IgA local, IgM e IgG sistémicas permitiendo un buen mecanismo de defensa frente a las enfermedades respiratorias, mientras las aves expuestas a la Enfermedad de Gumboro en las tres primeras semanas de vida, principalmente producen IgM monomerica y bajos niveles de IgA e IgG, anticuerpos muy importantes en la respuesta frente a patógenos respiratorios particularmente frente a Newcastle y Bronquitis Infecciosa, aunque para esta última la inmunidad celular es de suma importancia en prevenir la mortalidad.
Con respecto al virus de Gumboro surge una inquietud frente a la vacunación contra Bronquitis Infecciosa o contra Newcastle y es que si se aplican las vacunas de Gumboro o las aves se infectan con el virus de campo antes de la vacunación contra Bronquitis o Newcastle se afecta la función de la glándula de Harder para responder apropiadamente a la vacunación contra estas dos enfermedades, la investigación con respecto a esta inquietud señala que la infección o la vacunación contra Gumboro impide parcial y temporalmente la habilidad de la glándula de Harder para responder a la vacunación contra Bronquitis y Newcastle, este concepto se aplica en menor grado al virus de Laringotraqueitis.
El virus de Anemia Infecciosa Aviar es un inmunosupresor que empeora los efectos de la Enfermedad de Newcastle, y Bronquitis Infecciosa, del Neumovirus Aviar y de otros patógenos y su combinación con el virus de la Enfermedad de Gumboro hace que la consecuencia de la enfermedad respiratoria sea peor.
El virus de la Enfermedad de Marek que al inicio de la infección se replica en la Bolsa de Fabricio en las células B, deprimiendo la respuesta humoral e impidiendo la producción de suficiente cantidad de IgM. Luego en su proceso infeccioso infecta las células T activadas, particularmente las células Th y la consecuencia de este daño es que sin la contribución de las células Th la respuesta inmune contra varios patógenos respiratorios se vera comprometida como particularmente se ve con Bronquitis Infecciosa en donde la falta de respuesta T contra este virus produce alta mortalidad en las aves infectadas.
Ciertos medicamentos tienen efectos inmunosupresores locales o sistémicos en las aves como el Cloranfenicol, Estreptomicina, Neomicina y algunas Sulfas.
El diagnóstico clínico de las enfermedades respiratorias no es fácil debido a que sus signos y lesiones son similares o sino iguales, además se presentan de manera simultanea y asociadas a agentes secundarios generando la presencia del complejo respiratorio que como se cita anteriormente es una condición o síndrome en el cual múltiples agentes etiológicos están presentes, haciendo que los signos y lesiones sean similares. Por lo anterior es conveniente tener claro los signos y lesiones de cada enfermedad y recurrir al laboratorio para tener un ayuda diagnóstica precisa y así tomar las determinaciones correctas frente al episodio que se este presentando.
Es bien conocido que la infección por Mycoplasma asociado a E. coli tiene signos y lesiones similares a Bronquitis Infecciosa y resulta en una enfermedad mas aguda que la causada por cada agente en forma individual, la presentación simultanea de la Enfermedad de Newcastle o de Bronquitis infecciosa con Mycoplasma gallisepticum o con E. coli causan una enfermedad cuyos signos y lesiones son indistinguibles clínicamente, el proceso es muy severo causando mortalidad y bajas sensibles en la producción, los signos y lesiones son aún mas graves si los factores medioambientales son adversos.
Presentaciones simultáneas ocurren entre los virus de Newcastle y Bronquitis Infecciosa, así como entre Bronquitis Infecciosa y Laringotraqueitis, también es frecuente la presentación simultanea de Coriza Infecciosa y la Enfermedad de Newcastle cuya asociación tiene un efecto sinérgico reflejado en un cuadro respiratorio agudo muy severo, así como la asociación entre Coriza, Mycoplasma gallisepticum y Laringotraqueitis que son combinaciones frecuentes en ponedoras comerciales y reproductoras.
La combinación de Mycoplasma y Adenovirus en ponedoras comerciales se manifiesta en una fuerte caída en la producción de huevo. Aves infectadas con Gumboro y Adenovirus desarrollan una enfermedad respiratoria asociada a E. coli, esta bacteria puede ser agente primario o secundario y la susceptibilidad a ella puede ser aumentada por IBDV, Adenovirus, Reovirus y Marek.
La inmunosupresión por el virus de Gumboro en asociación a Mycoplasma gallisepticum induce infección de los espacios sinoviales y de las articulaciones y produce keratoconjuntivitis, lo cual normalmente no ocurre en una infección sola con Mycoplasma.
La literatura menciona otras presentaciones simultáneas con efectos devastadores como las asociaciones entre Newcastle, Neumovirus y Coriza, o Bronquitis Infecciosa y Ornithobacterium dichas combinaciones como ya se mencionó aumentan la severidad del proceso infeccioso.
Coriza asociada a E. coli produce signos que se parecen a los de Bronquitis y E. coli asociado a Amoniaco puede parecer la infección causada por Neumovirus.
Por lo mencionado anteriormente es de gran valor evaluar la inmunosupresión, establecer el diagnóstico diferencial de cada proceso y tener en cuenta el laboratorio para confirmar el diagnóstico.
Para que el laboratorio de diagnóstico sea de gran ayuda, es importante que la historia del caso sea real, que las muestras enviadas se tomen adecuada y correctamente y que las pruebas solicitadas correspondan al diagnóstico  presuntivo, de lo contrario la ayuda que el laboratorio pueda prestar no será valiosa y lo que es peor, los resultados pueden desorientar y llevar a una decisión equivocada con consecuencias económicas y sanitarias para las empresas.
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Los principales agentes primarios que afectan el tracto respiratorio de las aves son: - Virus. - Bacterias. - Hongos.
Los agentes secundarios interactúan con el agente primario resultando un efecto acumulativo que es peor que cuando el agente primario está solo.
Durante el estrés, incluyendo el estrés causado por las infecciones las necesidades de vitaminas se incrementan, vitaminas como la A, E, y C se disminuyen en la medida que los microorganismos dañan las paredes celulares y el organismo aumenta los requerimientos de vitaminas hidrosolubles.
Es importante mencionar que otros agentes como las Aflatoxinas y las Ocratoxinas, otros virus y bacterias así como la pobre ventilación, los niveles altos de amoniaco, la alta humedad de la cama y del ambiente, la sobrepoblación y la mala nutrición van a comprometer la respuesta de defensa y las funciones respiratorias.
Luego en su proceso infeccioso infecta las células T activadas, particularmente las células Th y la consecuencia de este daño es que sin la contribución de las células Th la respuesta inmune contra varios patógenos respiratorios se vera comprometida como particularmente se ve con Bronquitis Infecciosa en donde la falta de respuesta T contra este virus produce alta mortalidad en las aves infectadas.
los signos y lesiones son aún mas graves si los factores medioambientales son adversos. Por lo anterior es conveniente tener claro los signos y lesiones de cada enfermedad y recurrir al laboratorio para tener un ayuda diagnóstica precisa y así tomar las determinaciones correctas frente al episodio que se este presentando.
Autores:
Oscar Robin
Laboratorios Carval
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Jose Luis Rosales
19 de noviembre de 2019
Excelente informe. Gracias.
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