Argentina - Feriagro. La maquinaria agrícola como motor social

El Círculo Argentino de Periodistas Agrarios (CAPA) realizó ayer la Primer jornada de capacitación en maquinaria agrícola para periodistas en Feriagro. Distintos actores de la gran cadena agroindustrial expresaron la importancia de la actividad en el desarrollo del interior. La historia de la maquinaria agrícola comienza en 1920 en nuestro país y su evolución ha estado siempre signada por la innovación. Hoy hay 650 empresas agroindustriales en el país en torno de las cuales viven unas 40.000 familias. El 29 % de la producción nacional de maquinaria agrícola sale de la zona donde se realiza Feriagro 2006, en el Departamento de Belgrano, donde se encuentran Las Parejas, Armstrong y Las Rosas. Además, la provincia de Santa Fe reúne al 60 % del sector metalmecánico. De la historia de estos pueblos y la evolución del sector hablaron sus protagonistas en la jornada de Capacitación en Maquinaria Agrícola para periodistas, organizada por Feriagro, el INTA y el Círculo de Periodistas Agrarios (CAPA). Las comunidades Heraldo Mansilla, Intendente de Las Parejas, y Fernando Fischer, Intendente de Armstrong comentaron el impacto que el sector tiene en sus comunidades. “Trabajamos para darle a estas industrias, mano de obra calificada. En 2002 llegaron a Las Parejas más de 800 familias que se quedaron en el lugar. Eso obligó a que empresarios y municipio nos pusiéramos a trabajar para darle viviendas y asistencia sanitaria a estas familias”, dijo Mansilla. Tanto Armstrong como Las Parejas cuentan con gran cantidad de talleres y fábricas de maquinaria agrícola y, en función de la fuerte recuperación de ese sector, sus economías se han visto tonificadas mientras han reducido al mínimo los niveles de desempleo. Fischer comentó que hay 84 industrias metalmecánicas y 54 de otros servicios en Armstrong. Allí la industria factura 180 millones de pesos anuales, por el IVA técnico aporta 40 millones al Estado nacional y 16 millones por retenciones. Cada habitante de Armstrong aporta a nivel nacional 4150 pesos anuales. Sustento de los pueblos Carlos Capisano, del Movimiento de Defensa de la Maquinaria Agrícola (MODEMAQ), dijo que de 2002 a 2005 se duplicó la producción y el empleo de mano de obra. En estas localidades hay pleno empleo y tranquilidad social. “Estas son comunidades felices”, enfatizó. Respecto de la evolución del sector, Capisano sostuvo que Brasil provee el 70 % de lo que se compra en el exterior y a nosotros nos compra sólo el 14 %. “Hay que estimular relaciones comerciales más equitativas, como la de Venezuela, y comprarle a quien nos compra”, dijo. La historia de Postachini Reynaldo Postachini, director de Claas, se sumó al panel y le contó a un nutrido grupo de periodistas su historia de vida vinculada a la maquinaria agrícola. Postacchini comenzó siendo un contratista que, de puro apasionado por los “fierros”, arreglaba sus máquinas. De tanto meter mano en una vieja Claas, la tradicional fabricante alemana lo contactó para que fuese su representante en el país. Así llegó a presidente de la firma en América Latina. Su historia es una postal del sector, donde productores, contratistas y fabricantes se entremezclan de manera permanente. Hijo de contratistas, Reynaldo Postachini pasó su niñez en el campo y luego en la localidad de 9 de Julio, provincia de Buenos Aires. Estudió 3 años ingeniería mecánica, tuvo que abandonar la carrera por dificultades económicas, regresó entonces a su casa y trabajó como contratista. Armó una sociedad que en algunos años le permitió pasar de 4 a 11 máquinas, para trabajar desde Orán, Salta, a Bahía Blanca. Tres de sus cosechadoras eran de la marca Claas, lo que lo puso en vinculación directa con la empresa alemana. Hoy es director de Claas en Argentina. Cada máquina de Claas que se presenta a nivel mundial está en nuestro país tres meses después de su lanzamiento mundial. Claas es una firma familiar, pese a eso, una de las 4 más grandes del mundo. El negocio Durante la reunión, Mario Bragachini, del INTA Manfredi, comentó que en Argentina se importa maquinaria agrícola por valor de entre 350 y 450 millones de dólares al año. En 2005 la cifra fue de 400 millones. Hasta el 2004, Argentina no tenía cultura exportadora. La balanza comercial de maquinaria agrícola en 2005 fue de 400 millones en importación versus 30 millones de dólares en exportaciones. Para 2006, las exportaciones pueden crecer de 30 a 160 millones de dólares, incluyendo los 1136 millones que significa el mercado venezolano. La inversión para el sector prevista durante este año podría ascender a 20 millones de dólares. “¿Cómo se pueden producir 80 millones de toneladas de granos con 5000 tractores, de los cuales la mitad se destinan a traccionar tolvas autodescargables?, se preguntó Bragachini. Esto indica que Argentina es el único país donde verdaderamente se hace siembra directa, por eso no hace falta tener tractores. “Tenemos que aprender a ser fabricantes y exportadores de maquinaria agrícola”, dijo el técnico. “Una de las características de este sector es la falta de mecanización. Algunos modelos de maquinaria agrícola no superan las 15 unidades por año, son todos prototipos”, agregó. Bragachini hizo hincapié en la necesidad de innovación permanente a la que se enfrentan los empresarios del sector. Un indicador, es que en el stand del INTA se muestra una sembradora que siembra a 26 y a 52 cms con la misma formación. “La siembra directa obliga a una renovación permanente de la maquinaria agrícola que debe responder a la evolución de la técnica y la necesidad de que la industria le dé respuestas”, dijo Bragachini. Por ejemplo, nuestros cabezales maiceros están acondicionados para levantar los maíces quebrados por diatraea pero existe una nueva realidad que tiene que ver con la tecnología Bt, que permite obtener mayores rendimientos y evitar el problema del quebrado. Pero, la dificultad se presenta ante situaciones de viento en que el maíz se cae desde la raíz y eso no hay cosechadora que lo levante. Entonces, debemos trabajar en ser más eficientes en el sistema de siembra para evitar desde ahí el problema. “Desaparece la pulverizadora de arrastre en Argentina”, destacó Bragachini. Las industrias no se pueden quedar afuera del mercado porque cambian los usos o las preferencias de los usuarios. Las empresas deben estar atentas y dar respuestas a la evolución del mercado. “Quienes no incorporen tecnología a sus maquinarias quedarán afuera del mercado”, dijo. Argentina es el país de Latinoamérica que más tecnología incorpora a su maquinaria. Incluso comienza a buscar tecnología de la industria automotriz. Para Bragachini es momento de reinvertir en el sector, que además debe recibir políticas de estímulo con descuentos impositivos. Este año, la Argentina multiplicará por cinco sus exportaciones de maquinaria agrícola. Las ventas de ese sector agroindustrial pasarían de 30 millones de dólares en 2005 a 145 millones, básicamente gracias al acuerdo que suscribió el Gobierno nacional con Venezuela para colocar allí equipos por unos 500 millones en el próximo lustro. La estimación pertenece al presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma), Jorge Médica.