Argentina - La ganadería que promete darle pelea a la soja

En San Cristóbal, la actividad ganadera repunta ayudada por los bajos precios de la oleaginosa, los altos valores del ternero y la reapertura de mercados cárnicos. La soja del futuro es la carne” fue la contundente frase que eligió Luis Pomiés, representante de la Sociedad Rural de San Cristóbal, entidad enclavada en el departamento santafesino homónimo, que concentra el mayor stock vacuno del territorio provincial, para remarcar el optimismo de los productores ganaderos locales respecto del futuro de la actividad. Durante un contacto con la prensa en ocasión de anunciar la próxima exposición que realizará la entidad, el ruralista graficó un auspicioso horizonte basado en las condiciones del mercado, tanto interno como externo, algunos indicios del retroceso de la agricultura en la región y el perfeccionamiento en el manejo de los planteos ganaderos por parte de los productores. “La soja tuvo un brillo que, si bien no alcanzó a opacar del todo a la ganadería, fue suficiente para recluirla; ahora nosotros creemos que viene el momento en que la carne va a despegar. Los precios internacionales nos están favoreciendo y se abren nuevos mercados; y si seguimos haciendo buena letra como hasta ahora en la parte sanitaria y en la tecnología de engorde que estamos tomando en todos los campos de invernada va a llegar un momento, que no creemos que esté muy lejos, en donde la carne va a superar ampliamente los precios que hoy tenemos en los mercados”, aseguró. San Cristóbal es el departamento santafesino que concentra actualmente más de 1,3 millón de animales de los casi 7 millones de cabezas existentes en la provincia, según los registros del Sistema Integrado de Vacunación Antiaftosa oficial. Desde allí se envían mensualmente a faena entre 3.000 y 4.000 novillos de exportación durante la temporada de mayor producción. Sobre estas estadísticas, Pomiés indicó que “el buen momento de la región en materia ganadera se trasluce en los precios que se pagan por los terneros, en muchos casos verdaderos récords, aun superiores a los que se consiguen en Liniers”. El mismo fenómeno se repite, aseguró, en el momento de vender animales pesados. La explicación que esgrimió el ruralista para dar cuenta del sostenido crecimiento de la actividad durante los últimos años se basa, en primer término, en la evolución que muestra el manejo de la empresa ganadera por parte de los productores. Gracias a la labor de apoyo que brindan los entes oficiales y grupos de trabajo que proveen capacitación en forma constante, “el productor ya no tira vacas con toros” y, entre otros resultados, “aprendió a aprovechar el campo ocioso o a aumentar la carga por hectárea”. Por otra parte, se observan algunos indicios de cierto retroceso que estaría experimentando la agricultura en la región. “La prueba está en que, sobre todo al este del distrito, se observan lotes implantados con pasturas y que hasta no hace mucho estaban ocupados por la oleaginosa”. Pomiés explicó la vuelta de algunos productores al planteo ganadero por la brutal caída de precios de la soja, que de 700 pesos que valió a principio de año ahora difícilmente alcanza los 500 por tonelada. “Con los mismos costos sobre campos que pueden producir muchos kilos ganaderos, y mejorando un poquito los precios de la ganadería, creo que los números van a ser favorables a la carne a corto plazo”, aseguró. Al mismo tiempo, el ruralista remarcó que “estamos seguros de que la soja del futuro es la carne; por eso seguiremos apostando a la ganadería”. Al parecer, el análisis realizado desde la Sociedad Rural de San Cristóbal no está aislado de lo que calculan otros referentes del sector. Basta recordar que la Cámara de La Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra) estimó, en su último informe del mes de julio, que “el contexto internacional a mediano plazo se visualiza positivo”. La pronta reapertura de mercados, como Chile y los EE.UU.; la incidencia de la “vaca loca”, que mermaría la participación norteamericana y canadiense en el mercado internacional y podría abrir nuevas puertas a la carne argentina, y la probable aparición de China como demandante en el mercado cárnico, hacen que “por primera vez la Argentina está a las puertas de acceder a los mercados de mayor precio del sector cárnico, y coincidentemente esto ocurre en el momento en que los datos y las tendencias de producción y consumo mundial nos permiten suponer una demanda internacional creciente".