Las pruebas de ADN, herramienta clave para resolver homicidios y otros delitos graves, se están aplicando con éxito en la lucha contra el robo de ganado. Un equipo de investigadores de la Universidad de La Plata (UNLP) diseñó un programa para almacenar datos genéticos de animales que son utilizados por la Justicia para las investigaciones sobre casos de abigeato. La experiencia funciona desde 2002 y este año el Gobierno bonaerense puso en marcha un banco de ADN de bovinos y equinos donde podrá incorporarse información de toda la producción ganadera de la provincia.
El mecanismo es el siguiente: los científicos, con el uso de técnicas de biología molecular tipifican el ADN de un pelo, el cuero o los huesos de los animales que quedaron en el campo después de concretado el delito. Luego, esto se compara con las muestras secuestradas en carnicerías o frigoríficos. Así, ya lograron resolver 68 casos.
La provincia de Buenos Aires tiene casi 17 millones de cabezas de ganado. "Ese es el techo de este proyecto. Pero llevará mucho tiempo lograr la inclusión de todos esos datos", dijo Guillermo Giovambattista, investigador de la Facultad de Veterinaria de la UNLP y miembro del equipo que confecciona el banco.
La inscripción en el registro es voluntaria, hay que llenar un formulario con los datos personales y la actividad, y cuesta 2 dólares por animal. Sin embargo, el productor que incorpora su ganado en el registro obtiene otros servicios, como certificados de evaluación genética y trazabilidad.
