Es destacada la participación de la Cadena de Soja en la Argentina siendo el principal rubro en la producción, exportación y generación de divisas. La Soja es responsable de la gran expansión de nuestra agricultura y el mejor ejemplo de la incorporación de la mejor tecnología disponible.
A la industrialización primaria de la que se derivan las harinas y aceites, mercados internacionales en los cuales Argentina es líder, se suma un excedente actual de granos que se exportan en su mayoría, determinando que de todo el complejo, menos del 5 % sea utilizado localmente.
Pero a este mercado de “commodities”, el mundo suma una serie de productos de soja, con destino directo a la alimentación humana y usos industriales, mediante el uso del grano como alimento directo o derivados de procesos sofisticados de aislamiento de elementos funcionales, preparados especiales, transformación física y química , etc. La proteína de soja ha sido la base de la alimentación de las culturas orientales y recientemente los descubrimientos de los efectos positivos de algunos componentes de la soja en la nutrición y salud humana, no solo ha vigorizado el consumo en aquellos, sino que han expandido su utilización en el mundo occidental. A su vez han mejorado los procesos tradicionales sobre el aceite y la proteína de soja, y se están generando procesos de alto valor tecnológico en la producción de alimentos.
En la Argentina, el consumo de productos derivados de soja se ha expandido en los últimos años. Por propia derivación de las nuevas conductas alimentarias de occidente, se han incorporado a la dieta de una parte de la población. Pero el mayor impacto en el crecimiento del consumo local, se dio luego de la reciente crisis alimentaria , adonde se reconoce que un producto ampliamente disponible y del cual el país alimenta al mundo, es una posibilidad cierta de integrar la dieta local. Hubo valiosos responsables en la planificación de la educación sobre los beneficios sobre la salud y de como preparar alimentos a base de soja que recibió la población. Entre ellos deben mencionarse el plan Solidario de AAPRESID, y otras instituciones, y la ayuda de SADESO en la detección de los actores de la campaña educativa y su aplicación de campo. El resultado directo fue que una importante parte de la población comenzó a consumir soja y se promovió la generación de nuevas formas de empleo.
Con el fin de promover la transformación local de la soja, y obtener una producción y exportación de mayor VALOR AGREGADO, se detallaran seguidamente los aspectos relacionados con los productos diferenciados de soja que el mundo consume y la posibilidades ciertas de satisfacer localmente esa demanda en continuo crecimiento.
Como en cualquier cadena alimentaria lo inicial es la semilla. La calidad genética de la semilla que va a generar el grano, debe tener óptima calidad para el fin que se propone y a la vez considerar los efectos de las técnicas de procesos sobre ciertas limitaciones del grano.
Dentro de los productos tradicionales, como el Tofu, Natto, Misso, Edamame y Leche de Soja, la calidad del grano es decisiva en la facilidad de elaborar y en la calidad del producto. Lo mismo sucede con los productos menos tradicionales como helados, yogurt y preparados con leche de soja. Otros productos elaborados a base de la proteina texturizada de soja milanesas, hamburguesas, salchichas, barras y una vasta lista de productos es menos sensible a la calidad del grano. Calidad originaria del grano y proceso son dos elementos que definen la calidad final en un mercado muy exigente.
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