Efecto de 1 vs. 2 ordeñes en vacas de primer parto Holstein cruza Sueca Roja sobre parámetros productivos. Comunicación

La frecuencia de ordeñe está relacionada con aspectos productivos, de calidad y económicos de un sistema lechero. En general en los sistemas de Argentina se plantean al menos dos ordeñes por día. Sin embargo, hay sistemas en los que la producción de leche es inferior y sería posible, diseñar esquemas de un ordeñe (Lazzarini, 2020). A su vez, a pesar de la posibilidad de una disminución en la producción de leche, asociada con la falta de estímulo por un solo ordeñe, se cita como ventajas de este planteo no solo un impacto positivo en los costos asociados al ordeñe sino también a que la reducción en las horas de trabajo lograda contribuiría al bienestar de los empleados. Es así que el objetivo del presente trabajo fue evaluar el efecto de 1 vs. 2 ordeñes sobre la producción de leche y el peso vivo en vacas de primer parto Holstein cruza Sueca Roja durante el segundo tercio de la lactancia.

El trabajo se realizó en un establecimiento que prioriza la simplicidad y la reducción de gastos. El mismo se ubica en el partido de Trenque Lauquen, provincia de Buenos Aires. La dieta está conformada por el pastoreo directo con una asignación estimada de 10 kg MS/día/vaca de una pastura polifítica de base alfalfa (Medicago sativa) y festuca (Festuca arundinacea) y 2 kg/día/vaca en ordeñe de concentrado suministrado en la sala de ordeño. En el último ejercicio productivo el rodeo promedió 140 vacas en ordeñe y 2400 litros/día. Para el presente estudio se trabajó con 8 vacas de primer parto F1 Holstein cruza x Sueca Roja con la misma genética de base que parieron en la primavera de 2022 con una edad promedio de 30 ± 2 meses. La asignación a cada tratamiento fue por orden de parición, siendo esta alternada. Los tratamientos fueron definidos como un ordeñe (UO) y dos ordeñes (DO). Las vacas de primer parto se manejaron dentro del único rodeo de vacas en ordeñe con el que cuenta el establecimiento, lo que garantizó igual suministro de alimento para los 8 animales. A diferencia de las vacas de primer parto del tratamiento DO las de UO durante la tarde ingresaban al tambo pero no eran ordeñadas. Para evaluar la producción de leche se utilizaron las mediciones mensuales que se llevan adelante en el control lechero oficial mediante lactómetros Waikato. Dado que se considera como el segundo tercio de la lactancia el más estable tanto en producción como en calidad de leche, es que se utilizaron los registros del mes 4, 5 y 6 postparto.

Cabe mencionar que, desde el parto los animales estuvieron sometidos a los tratamientos planteados. Las vacas de primer parto fueron pesadas durante la primera mañana previa a la asignación de alimentos tanto en el mes 4 como en el 6 de lactancia. Los datos de producción de leche fueron analizados como observaciones repetidas en el tiempo. La covariable utilizada fue la producción de leche de cada vaca durante el 1er trimestre de su lactancia. Se utilizó el paquete de modelos mixtos del programa Infostat 2020. El peso se evaluó mediante la prueba de Kruskal Wallis del mismo programa estadístico. La comparación de medias se realizó mediante la prueba LSD y el nivel de significancia fue de 0,05.

El promedio de producción difirió estadísticamente a lo largo de los 3 meses (P=0,001), pero sin diferencias entre los tratamientos (P=0,7042). Tampoco se detectaron diferencias estadísticamente significativas para la interacción entre el tratamiento y los meses de ensayo (P=0,3266). Estos resultados difieren de los reportados por Lazzarini (2020), en una recopilación de distintos trabajos, posiblemente explicado por los bajos niveles productivos del establecimiento donde se desarrolló el ensayo. La producción de leche en el mes 4 resultó de 12,7 ± 1,47 litros (a) y de 11,5 ± 1,32 litros (a) en el mes 5, sin embargo, en el mes 6 decayó a 7,7 ± 1,39 litros (b). Esto resulta esperable en función a la curva de lactancia, ya que por ser vacas de primer parto y con planteos pastoriles con oferta restringida en cuanto a disponibilidad pueden comenzar a disminuir los litros producidos en el segundo tercio de la lactancia, lo que lleva a un acortamiento en los días en leche (Cuatrín, 2007). En la Figura 1 se presenta la evolución de la producción por mes y por tratamiento. Respecto del peso de los animales tanto al inicio del ensayo como al final, no se detectaron diferencias estadísticamente significativas entre los tratamientos (P=0,4857 y p > 0,9999). El peso promedio fue de 441,2 ± 43,2 kg, 420,0 ± 21,6 kg al mes 4 y de 442,2 ± 44,4 kg y 427,0 ± 26,2 kg al mes 6 para UO y DO, respectivamente. Que el peso resulte superior conforme se avanza la lactancia es esperable dado que los requerimientos asociados a la producción de leche se reducen y la energía remanente puede ser utilizada para la formación de reservas corporales.

En este trabajo exploratorio no se detectaron efectos ni en la producción ni en el peso vivo de los animales asociados con la disminución de la frecuencia de ordeñe durante el segundo tercio de la lactancia. Se prevé a futuro poder llevar adelante este tipo de estudios también en otras categorías productivas y a lo largo de toda la lactancia.