Verdeos: uso de cereales forrajeros de invierno

Los cereales de invierno se utilizan en la región Pampeana de diversas maneras caracterizadas fundamentalmente por la época de siembra y la forma de defoliación a que son sometidos. Si bien se reconocen diferencias entre cultivares de cereales de invierno que harían variar su aptitud para diferentes usos, su versatilidad no ha sido evaluada experimentalmente.

En Azul, sobre un suelo Argiudol típico, franco arcilloso, con entre 14,8 y 20,9 ppm de P y 3,9 a 4,2 % de MO, usando labranza convencional, se realizó un experimento durante 2019, 2020 y 2021, para comparar el comportamiento productivo de 6 cultivares de cereales de invierno (C) bajo 5 formas de uso (U). Los C fueron: cebada forrajera Mariana (Hordeum distichum L.) y Trinidad (Hordeum vulgare L.), avena (Avena sativa L.) Florencia y Elizabet, y trigo (Triticum aestivum L.) Biointa 3005 y MS INTA 415. Trinidad, Elizabet y Biointa 3005 representaron los cultivares de ciclo más largo. Las formas de U fueron: 1) Verdeo: siembra de fin de febrero comienzo de marzo y 4 cortes, 2) Diferido: siembra similar a la anterior y evaluación del acumulado por corte a mediados de agosto, 3) doble propósito (DP): siembra en la primera quincena de abril y 2 cortes destinando luego el cultivo a producción de grano, 4) Reservas: siembra en segunda quincena de junio evaluando la biomasa acumulada en primavera, y 5) Cosecha: similar fecha de siembra que para reservas evaluando la producción de grano. A la siembra se aplicó FDA (60 kg/ha) y todos los U recibieron 150 kg/ha de urea aplicada en abril (Verdeo y Diferido), o en agosto (Reserva y Cosecha), o repartida entre mayo y septiembre (DP). En DP se realizó el último corte ante la aparición de entrenudos huecos y en Reservas en estado de grano lechoso-pastoso.

Los U fueron distribuidos en 4 bloques completos al azar como parcelas principales y, dentro de cada uno, los C conformaron parcelas secundarias de 6 x 1,5 m. El área de evaluación del rendimiento de forraje en Verdeo y DP, fue de 4 m2 mientras en Diferido y Reservas de 2 m2 . El rendimiento de grano fue determinado a madurez comercial sobre un área de 3 m2 de cada parcela, en DP y Cosecha, cortando, engavillando y trillando. Las muestras de forraje se secaron a 80°C durante 48 horas para estimar el rendimiento de materia seca.

El rendimiento de forraje o de grano de cada parcela fue dividido por el rendimiento promedio del bloque donde se encontraba y este rendimiento relativo, multiplicado por 100, fue usado para comparar el desempeño de los C a través de los U. Mediante un ANVA para un diseño de bloques al azar con parcelas divididas se compararon los rendimientos relativos para los efectos de C y U, combinado sobre los años (A).

La lluvia total de los 3 años, comparada con el promedio de 12 años anteriores, resultó normal en 2020 y 2021 pero con un periodo seco otoñal en 2019, e invierno seco los 3 años. Las temperaturas mínimas de fin de invierno y parte de la primavera resultaron relativamente bajas con presencia de heladas tardías, particularmente en 2019.

En el conjunto de los índices no hubo efecto significativo del A (p = 0,31) ni A X U (p =0,32), pero fue altamente significativo el efecto de C, U y C x U (p ≤ 0,01). La tabla 1 muestra mayores índices promedio de ambas avenas con valores superiores en Verdeo y Diferido y un comportamiento destacado de cebada Trinidad en Reserva. Cebada Mariana se destacó en el forraje DP y como Diferido pero obtuvo muy baja producción de grano (DP y Cosecha) debido a que su precocidad la expuso a heladas tardías en dos de los años (datos no mostrados). Ambos trigos mostraron elevado rendimiento de grano, tanto en Cosecha como en DP, mientras en este último uso se distingue el cultivar B3005.

Tabla 1. Índice de rendimiento, de forraje o de grano, relativos al promedio de cultivares (x100) de 6 cultivares de cereales de invierno bajo diferentes formas de uso. Dentro de cada uso o en el promedio final, las medias de cultivares seguidas de igual letra no difieren según LSD 0,05. Se incluyen los rendimientos medios, de forraje y de grano, obtenidas cada año.

Siendo la versatilidad en el uso de los cereales de invierno un aspecto de importancia en las explotaciones comerciales este tipo de comparaciones de rendimiento a través de los diferentes usos debería considerarse rutinariamente.