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Nuevos ingredientes en la nutrición de aves

Desafío del uso de ingredientes en la nutrición de aves

Publicado: 24 de mayo de 2016
Por: Antônio Mário Penz Junior (Profesor Titular del Departamento de Zootecnia, de la UFRGS y Director Técnico de Nutron Alimentos Ltda) y Mario Gianfelici (Departamento de Zootecnia, de la UFRGS). Brasil
1. Introducción
Hasta ahora, los avances en el conocimiento de la nutrición animal de las diferentes especies nunca habían sido restringidos por la disponibilidad de los ingredientes para las formulaciones de las dietas. Algunos podían ser más abundantes que otros, en algunas regiones, pero esto nunca constituyó un problema. La canola estaba disponible en Canadá y las harinas de pescado más accesibles en algunos países de la costa oeste de América, como Chile y Perú.
En las discusiones y investigaciones académicas, bien como en los medios de comunicación, la gran discusión siempre fue cuales ingredientes serian los que, animales domésticos monogástricos, podrían consumir sin comprometer el abastecimiento de alimentos para los humanos. Sin embargo, hace algunos años esta situación se viene alterando, especialmente por el aumento del precio del petróleo, y por lo que esto representa estratégicamente para algunos países. Alternativas, denominadas de renovables, comenzaron a ser consideradas, la primera alternativa que compite por el uso como materia prima alguna fuente alimento, que presento una oportunidad económica fue el etanol. Brasil se distingue en este aspecto porque en la década del setenta, del siglo pasado, ya tenía la tecnología para producir esta fuente de energía a partir de caña de azúcar, insumo importante para la producción de azúcar. Los conflictos recientes por el dominio del petróleo hicieron que esta materia prima, fundamental como fuente de energía, legara a niveles de precio nunca esperados. Así, nuevas opciones energéticas renovables, utilizando alimentos, pasaron a tener una gran importancia, como la producción de etanol, a partir de granos, en especial del maíz, o la producción de biodiesel en especial de aceites de soja, palma o residuos de la alimentación humana.
Con esto un nuevo paradigma surge y comienza a crear una discusión internacional de dimensiones no esperadas que es el hombre competiendo con el propio hombre por la fuente de energía. O la energía es usada para la alimentación de la humanidad o ella pasa a ser usada como alternativa del petróleo, para mantener y mejorar el suministro de energía, esencial para el crecimiento de las naciones.
Esta discusión asumió una proporción impresionante por el aumento repentino de los precios de los alimentos. La discusión en este momento se divide entre los que opinan que el descontrol ocurrió por la decisión de los EEUU de producir una cantidad gigantesca de etanol, a partir de maíz, fuente poco eficiente energéticamente, si es comparado con la caña de azúcar . y otros ,como Brasil , que entienden que este desequilibrio esta ocurriendo como consecuencia de los subsidios agrícolas siempre sustentados por países desarrollados, que tienen desestimulado a los países en vías de desarrollo para producir algunos alimentos de manera eficiente para la alimentación humana.
Esta discusión esta tomando proporciones incalculables. ¿Quien tiene razón y cual es el problema? De cualquier manera , en el presente, el stock mundial de granos alcanzó el menor nivel de los últimos 30 años . Como puede ser visto en el gráfico 1, una crisis similar ocurrió en la década del ochenta y ahora se repite y persiste en estos años. Es importante recordar que la crisis de los años ochenta, excepto la caña de azúcar, que ya venia siendo usada para la producción de etanol, otras culturas no eran empleadas industrialmente para este fin. O sea en esta época todavía no había la competencia por los granos, empleados en la alimentación, para la producción de etanol. El panorama era otro. En aquella época era la crisis de la producción y hoy los stocks están bajando por el aumento del consumo de los granos como alimentos y el aumento del uso de ellos para fines no alimenticios (USDA, 2008a). Para confirmar esta afirmación, en la China en los últimos 10 años la producción de granos aumento en aproximadamente 9 % y el consumo aumento en aproximadamente 30 % (USDA, 2008a).esta situación podría ser minimizada si la producción mundial de granos aumentase, por el aumento de la área producida o por la productividad alcanzada. Sin embargo, las estadísticas muestran que en los últimos 20 años esto no ha ocurrido (USDA, 2007b). Los EUA han mantenido una producción mayor que su consumo, pero esto, por ejemplo no ha ocurrido en China (USDA, 2007b)
Gráfico 1. Stock mundial de granos.
Desafío del uso de ingredientes en la nutrición de aves - Image 1
Otro aspecto a tener en cuenta, es que más de la mitad del stock mundial de granos está constituido por maíz y se encuentra en los EUA y en China (USDA, 2007a). Esta información no solamente llama la atención sobre el riesgo existente de que los stocks continúen bajando aún más, pero también demuestra que no existe una distribución lógica de los granos en el mundo. Dicha situación es similar a la de las fuentes fósiles energía y en el futuro también presentará todos los problemas relativos a su logística de distribución (USDA, 2007b).
Por consiguiente, en este momento resulta importante decir que la reducción del stock es grave y que, asociada a la complejidad de distribución, transforma el escenario aún más complejo para aquellos países distantes de las fuentes de producción. En el futuro, en algunos países podrá producirse una eventual falta de abastecimiento del producto debido a dificultades de transporte. 
2. Uso de ingredientes en la nutrición de aves
Las variaciones de calidad de los ingredientes pueden ser muy grandes, ellas pueden estar relacionadas con la manera en que los alimentos son producidos, almacenados, sus humedades y como son empleados en las dietas. Estas variaciones implican pérdidas de desempeño o pérdidas económicas en la producción animal. Para la determinación de energía de estas materias primas tan cambiantes, ecuaciones de regresión pueden ser utilizadas, empleando datos de humedad, proteína, extracto etéreo, fibra, y cenizas, con el fin de corregir las distorsiones de la calidad de ingredientes. Nagata et al. (2004) demostraron esto en un trabajo en que determinaron las EMAn de varios ingredientes (sorgo, germen de maíz , maíz, etc). Cuando evaluaron los alimentos en conjunto y correlacionaron los resultados de EMAn con aquellos obtenidos “in vivo”, concluyeron que la mejor ecuación de predicción fue 4021,8 – 227,55MM. O sea, el componente mineral (MM) fue el componente de la dieta más importante para predecir el valor energético de los ingredientes evaluados. Esta observación no coincide con aquellas de Borges et al. (2003). Los autores, trabajando con granos de trigo y sus subproductos, identificaron a la fibra bruta como el componente más importante del alimento y los valores de las ecuaciones se tornaron más precisos con la inclusión de los niveles de extracto etéreo y de proteína.
2.1. Harina de Soja
En la harina de soja, varias son las características genéticas y químicas (solubilidad proteica, índice de dispersión de la proteína, actividad de inhibición de la antitripsina) que pueden afectar el desempeño de los pollos parrilleros. Batal y Parsons (2003), trabajando con diferentes cultivares de soja identificaron que es muy importante la cualidad para pollos de hasta 21 días de edad. En esta fase, una harina indebidamente tostada compromete el desempeño de los pollos. Neoh y NG (2006) identificaron una diferencia en el desempeño de los pollos alimentados con harina de soja proveniente de Malasia, EEUU y Argentina, siendo que aquellas provenientes de Argentina fueron las que proporcionaron los peores desempeños. Independientemente del cultivar, los autores identificaron que el aumento de la energía metabólica aparente (EMA) de la harina de soja tiene correlación con la ganancia de peso de los pollos (R2 0,75) y con la mejora e la conversión alimentar (R2 0,77). Gerber et al. (2006) demostraron que pollos, con edad de 1 a 21 días, alimentados con harina de soja con diferentes niveles de proteína (fibra) presentaron desempeños diferentes. La harina de soja con 48 % de proteína proporciono mayor consumo de ración, ganancia de peso y mejoró la conversión alimentar en los pollos al compararse con una de 44% .Hubo un incremento también el coeficiente de metabolicidad de la energía bruta y de la materia seca para la harina de 48 % de proteína. Las diferentes harinas de soja no comprometieran la estructura física de los enterositos.
2.2. Maíz
Entre tantos aspectos que pueden afectar la calidad del maíz esta la relación amilosa: amilopectina. La digestibilidad del almidón del maíz aumenta con el aumento de la participación de la amilopectina. La forma de este almidón es más amorfa que la de la amilosa favoreciendo esto su digestión. Aproximadamente 15% del almidón del maíz es llamado de resistente, siendo digerido. Las condiciones de resistencia pueden ser causadas por la molienda indebida, por la mayor presencia de amilosa, por su asociación con proteínas y con la pared celular, causada , por ejemplo , por la acción térmica de la pelletización (Iji et al., 2006). Los autores, comparando tres temperaturas de secado del maíz (85, 95 e 105°C), verificaron que el tratamiento térmico proporciono algún aumento del desempeño de los pollos.
También se han preocupado por la presencia de micotoxinas en el maíz .Los efectos pueden ser o no perceptibles, pero, de alguna forma pueden afectar el desempeño de los pollos, y en dosis mas elevadas, pueden comprometer la calidad de la canal. Denli y Okan ( 2006) fueron capaces de mostrar el perjuicio en el desempeño de los pollos alimentados con dietas contaminadas con 40 e 80 ppb de aflatoxina B1. También encontraron alteraciones en la secreción de algunas enzimas evaluadas y alteraciones histológicas en el hígado de las aves.
2.3. Harina de carne
Este ingrediente en países en que el uso no fue prohibido, normalmente es importante pues reduce el costo de de las formulaciones. Karakas et al (2001) identificaron que, independientemente del origen de la harina de carne (bovino o suíno), el aumento de el contenido de cenizas y de la inclusión en las dietas de pollos con edad entre 14 y 31 días de edad, disminuyó sus valores de EMAn. Parsons et al. (1997), trabajando con 14 muestras de harinas de carne , ya habían verificado la variación significativa de la calidad de la proteína de aquellas harinas. Esta variación, puede estar relacionada con las condiciones de procesamiento y con el tamaño de partícula de las diferentes harinas. En la misma época, Johnson e Parsons (1997) confirmaron que el sistema y la temperatura de procesamiento de las harinas afecta la digestibilidad verdadera de los aminoácidos, en especial de la lisina (68 a 92%), y de la cisteína (20 a 71%) y de la energía metabolizable verdadera (EMVn). También identificaron que el aumento de las cenizas perjudica la EMVn. Por esta razón es que los autores (Wang e Parsons, 1998) pasaron a recomendar la formulación de dietas para pollos en que la harina de carne y huesos fuese usada en base a aminoácidos digestibles.
2.4. DDGS
Cuando se emplean cereales en la producción de etanol, el principal residuo de este procedimiento de transformación de los granos son los DDGS (distiller´s dried grains with solubles/granos secos de destilería con solubles). Su producción corresponde a aproximadamente el 30% del cereal empleado. Por consiguiente, debido al aumento mundial de la producción de etanol a partir de los cereales, especialmente del maíz en los EUA, la oferta de DDGS aumentará proporcionalmente al uso de los cereales. Los DDGS tienen un valor regular de energía, similar al de la harina de soya y de la proteína, teniendo como limitantes los aminoácidos triptófano, arginina y lisina (Parsons, Baker y Harter, 1983). Mientras tanto, dependiendo de la tecnología empleada para la obtención del etanol (plantas de producción “antiguas” x plantas “modernas”) la calidad de los DDGS puede ser muy variada. Los autores consideran plantas “antiguas” a las que usan maíz para la producción de refrescos y plantas “modernas” a las que usan maíz para la producción de etanol. Spies, Whitney y Shurson (2002) compararon la variabilidad de la composición y de la digestibilidad de nutrientes de DDGS provenientes de 10 plantas “modernas” de Minnesota, EUA (ocho plantas) y Dakota del Sur, EUA (dos plantas) con la composición de DDGS publicada por el NRC (1998) y con la composición de DDGS provenientes de plantas “antiguas”. Los autores identificaron que los DDGS provenientes de plantas “modernas” presentaban más energía, fósforo, lisina, metionina y treonina que los DDGS provenientes de plantas “antiguas”. Considerando todas las muestras, la lisina total varió del 0,72% al 1,02% con un coeficiente de variación del 17,3%. En las muestras, la metionina varió entre el 0,49% y el 0,69% con un coeficiente de variación del 13,6%. Shurson (2002) indicó que la disponibilidad del fósforo de los DDGS, proveniente de plantas “modernas” es un 90% superior al que está publicado en el NRC (1998) (77%) y al valor del maíz (NRC, 1998) (14%). Algunos autores sugieren que existe una correlación entre la calidad de los DDGS y su color. Trabajando con cerdos y evaluando varias muestras de DDGS, Pedersen, Boersma y Stein (2007) encontraron una correlación de solamente 0,43 y 0,44 del color con relación a ED y a EN. Por otra parte, Fastinger y Mahan (2006) también en sus experimentos con cerdos, verificaron que la digestibilidad aparente para aminoácidos esenciales y para lisina fue entre el 15% y el 10% inferior, respectivamente, para muestras más escuras, cuando comparadas con las más claras.
Otro aspecto importante en la evaluación de los DDGS es su composición de macro y microelementos. Teóricamente, como los DDGS corresponden a aproximadamente 1/3 del valor total del maíz, donde los otros 2/3 se transforman en etanol y dióxido de carbono, las concentraciones de minerales deberían ser aproximadamente tres veces las del grano de maíz. No obstante, Batal y Dale (2003) analizando 12 muestras de DDGS, no encontraron la proporción esperada, especialmente para sodio, calcio y azufre. Para las variaciones de los valores de calcio no encontraron una justificativa. Mientras que para los valores de sodio, concluyeron que los mismos varían debido a alguna contaminación del proceso de producción del etanol. Los autores también observaron variaciones significativas entre las muestras para manganeso, hierro, cobre y aluminio.
En pollos de engorde, Waldroup (2007), además del problema de la variación del nivel de sodio de las fuentes de DDGS del maíz, observó las variaciones de energía metabolizable y de los contenidos y disponibilidades de lisina y fósforo. Batal y Dale, en 2006, evaluaron 17 muestras de DDGS provenientes de 6 plantas distintas productoras de etanol. Las plantas se consideraron como “modernas” y los DDGS obtenidos eran del tipo “gold”. Los investigadores determinaron la energía metabolizable verdadera (EMVn) en machos adultos para estas muestras y evaluaron la digestibilidad de los aminoácidos de 8 muestras, empleando la técnica de digestibilidad en machos adultos cecectomizados. Los valores de EMVn variaron de 2490 a 3190 kcal/kg. Los autores propusieron un valor promedio de 2820 kcal/kg para este ingrediente. Las diferencias mencionadas fueron atribuidas al origen del maíz, a la fermentación y a la retirada de solubles. Para digestibilidad aminoacídica, los autores encontraron valores promedio del 70%, 87%, 74%, 75%, 80%, 83%, y 84%, para lisina, metionina, cisteína, treonina, valina, isoleucina y arginina, respectivamente. También encontraron diferencias significativas entre estos valores y observaron una correlación importante entre las digestibilidades y el color de los DDGS. Recomendaron una evaluación nutricional detallada de los DDGS cuando se considera un nuevo proveedor.
Shurson (2002), trabajando con 103 muestras de DDGS provenientes de plantas “modernas”, demostró que el NIR puede ser un instrumento importante para la evaluación inmediata de la calidad de los DDGS adquiridos. El autor encontró ecuaciones razonables de predicción, según él, para energía y para aminoácidos totales. Como es de suponer, Shurson también subrayó que la calidad de los resultados dependerá de la calidad de las ecuaciones generadas.
Usando pollos, Lumpkins, Batal y Dale (2004) evaluaron los DDGS de maíz provenientes de una planta de etanol “moderna”. En un experimento usando dos densidades de dietas (alta y baja) y dos niveles de DDGS (0% y 15%) para pollos de 1 a 16 días de edad, observaron el efecto de la densidad de la dieta pero no de la inclusión de los DDGS. En un segundo experimento con dietas isocalóricas e isonitrogenadas incluyeron valores crecientes de DDGS (0%, 6%, 12% y 18%) y observaron que a los 42 días, la ganancia de peso y la conversión alimenticia de las aves sufrieron efectos de la inclusión del 18% de DDGS en la fase inicial. Los demás parámetros relativos a rendimiento y a la canal permanecieron inalterados. Wang et al. (2007b) evaluaron el uso de DDGS en dietas para pollos de engorde, empleando dietas isocalóricas e isonitrogenadas y dividiendo el experimento en tres fases (de 1 a 21 días, de 22 a 35 días y de 36 a 42 días). Los tratamientos empleados siguieron una inclusión creciente entre las fases (0,0,0; 0,15,15; 0,15,30; 0,30,30; 15,15,15; 15,15,30; 15,30,30 y 30,30,30). La inclusión de DDGS empeoró la calidad de los pellets. Cuando las dietas de inicio y de crecimiento tuvieron el 30% de DDGS, los desempeños zootécnicos y los rendimientos de pechuga de los pollos quedaron comprometidos en relación con los animales que recibieron 0% o 15% de DDGS. Por otra parte, cuando el programa fue del 15%,15%, 30%, no hubo efectos sobre los resultados de desempeño zootécnico (ganancia de peso y conversión alimenticia) pero el rendimiento de pechuga se redujo cuando comparado a los pollos que recibieron menos DDGS. Los autores atribuyeron dicha reducción de rendimiento de pechuga a la deficiencia de algún aminoácido. Los mismos investigadores ya habían demostrado resultados similares (Wang et al., 2007a).
Empleando ponedoras Hy-line W36 en un período de 25 a 43 semanas de edad, Lumpkins, Batal y Dale (2005) incluyeron 0% o 15% de DDGS en dietas comerciales o en dietas de baja densidad. La única diferencia significativa encontrada con la inclusión de los DDGS, fue el número de huevos/ave/día en el período de hasta 35 semanas en el que las aves recibieron dieta con baja densidad. Aves que recibieron una dieta comercial solamente mostraron una tendencia de reducción en la producción de huevos hasta las 32 semanas de edad. Los autores concluyeron que los DDGS pueden ser una alternativa interesante en la alimentación de ponedoras.
2.5. Glicerol
La elevación del precio del petróleo también estimuló la producción de biodiesel a partir de diferentes aceites como el de soya, de canola, de mamona, de girasol y de origen animal. Para el año 2010, el objetivo establecido para la Comunidad Europea es la adición de un 5,75% de biodiesel a los combustibles regulares (Piesker y Dersjant-Li. 2006). En Brasil, la ley 11.097 del 13 de enero de 2005, ofrece incentivo a las empresas productoras de biodiesel y ha transformado en obligatoria la adición del 2% de biodiesel en el aceite diesel vendido en el país a partir de 2008. Para el 2013, el porcentaje deberá subir al 5%. Esta situación exigirá la producción interna de más de 2 mil millones de litros de biodiesel por año (Duarte, Tobouti y Hoffman, 2006)
La mezcla de una fuente de aceite con un alcohol (normalmente metanol) y un catalizador (Hidróxido de sodio o potasio) posibilita la ruptura de las moléculas de triglicéridos en metil ésteres, llamados biodiesel y glicerol (glicerina o 1,2,3- propanotriol). Para cada litro de biodiesel producido, se obtienen aproximadamente 80g de glicerol (Kerr et al., 2008). El glicerol presenta más de 1500 aplicaciones, desde cosméticos y productos farmacéuticos hasta alimentos y otros productos (Piesker y Dersjant-Li, 2006). En la Comunidad Europea, el glicerol está registrado como aditivo alimentario, sin limite de inclusión (en el 1831/2003) (Piesker y Dersjant-Li, 2006).
Kerr et al. (2008) mencionaron que la calidad de glicerol obtenido de la reacción química depende del equipo empleado. Esta aseveración fue confirmada en el Laboratorio de Nutrición Animal de Nutron Alimentos Ltda (Penz y Gianfellici, 2007) y en la Tabla 3 se pueden ver las amplitudes de valores. En las muestras analizadas no se evaluaron los niveles de metanol residual. Mientras tanto, Kerr et al. (2008) también citaron la variación de esta substancia, así como del color del producto final. La alteración del color depende del pigmento del aceite a partir del que se produce el biodiesel.
El residuo de metanol puede ser un problema cuando se lo encuentra en el glicerol. En el metabolismo, el metanol se transforma en formato afectando el sistema nervioso central, causando vómitos, acidosis metabólica grave, ceguera y alteraciones en el sistema motor. En los EUA aún no hay legislación que regule el nivel de metanol en el glicerol. No obstante, sí existen leyes que establecen que el nivel de metanol en la dieta no puede superar 150 ppm (Kerr et al., 2008).
La diferencia de valores de energía bruta de las muestras es una manera indirecta de establecer la eficiencia del proceso de producción de biodiesel. Cuanto menor sea el valor de energía más eficiente será la transformación, resultando como producto final solamente el glicerol y no parte de glicerol y parte de triglicéridos intactos. También se debe evaluar el nivel de sodio del glicerol para incluirlo como nutriente cuando se hace la formulación. Desde el punto de vista de la formulación, las variaciones de energía y de sodio, asociadas a la variación del metanol pueden restringirse al uso irrestricto del glicerol como alternativa para la alimentación animal.
Tabla 3. Niveles promedio y amplitudes de análisis de muestras de glicerol.
Desafío del uso de ingredientes en la nutrición de aves - Image 2
En la Tabla 4 están los valores de composición química del glicerol con purezas distintas, según lo han propuesto Schröder y Südekum (1999).
Tabla 4. Composición química del glicerol con relación a su pureza.
Desafío del uso de ingredientes en la nutrición de aves - Image 3
Es posible considerar al glicerol como una fuente adecuada de energía, ya que cuando las grasas son digeridas normalmente se obtienen dos moléculas de ácidos grasos y una molécula de monoglicérido. Cuando la digestión es total se obtienen tres moléculas de ácidos grasos y una molécula de glicerol. Esta última molécula, debido a su bajo peso molecular, es fácilmente absorbida por difusión. Una vez absorbido, el glicerol puede convertirse en glucosa vía glucogénesis, u oxidarse para la producción de energía, vía glicólisis y ciclo de Krebs (Robergs y Griffin, 1998). El metabolismo del glicerol se produce predominantemente en el hígado y en los riñones.
El glicerol, además de ser una fuente energética puede emplearse en las dietas para mejorar la calidad de los pellets. Groesbeck (2002), al trabajar con dietas de cerdos, demostró que la inclusión de glicerol mejoró la calidad de los pellets representado por valores de PDI y redujo el costo energético de la peletización. El autor también constató que cuando se adiciona entre el 3% y el 6% de glicerol, el porcentaje de 6% es el que permite obtener el mejor PDI. Por otra parte, las mismas adiciones de aceite redujeron el PDI. Sin embargo, tanto el glicerol como el aceite mejoraron el rendimiento energético de la peletización.
El glicerol también ayuda a reducir el polvo de las dietas y de los suplementos minerales y vitamínicos. Debido a su sabor dulzón, también sirve para mejorar el sabor de las dietas (Piesker y Dersjant-Li, 2006).
Algunos trabajos que han empezado a publicarse recomiendan el uso de glicerol en la alimentación de animales.
En pollos, Waldroup (2006) demostró que para aves con hasta 16 días de edad, el glicerol puede usarse en hasta el 10%. Sin embargo, cuando se usa glicerol en todas las dietas hasta el sacrificio, este nivel no debe superar el 5% pues afecta el consumo de la dieta. Debe subrayarse que el nivel del 10% en la dieta afectó la calidad de la canal. El autor sugirió que este ingrediente también deberá ser evaluado respecto a apariencia física de las dietas y a su acción sobre la calidad de los pellets. Cerrate et al. (2006) confirmaron las observaciones de Waldroup (2006) cuando constataron que la inclusión del 10% de glicerol afectó el desempeño zootécnico y el rendimiento de la canal de pollos Cobb 500. No obstante, cuando los autores emplearon el 2,5% y 5% de glicerol, no observaron pérdida de desempeño de los pollos y los rendimientos de pechuga y de muslo y sobremuslo aumentaron cuando comparados con pollos no alimentados con glicerol (0%). Cerrate et al. (2006) comentaron que las pérdidas de desempeño y de calidad de la canal de pollos alimentados con dietas que contenían el 10% de glicerol, se debieron a la dificultad que éstas presentaron de fluir en los comederos, ya que la calidad de los pellets fue afectada. El valor de energía considerado en las formulaciones fue de 3527 kcal EN / kg, y el valor de la energía bruta fue de 3596 kcal /kg.
Dozier et al. (2008) determinaron la EMAn del glicerol en pollos con diferentes edades. Los valores encontrados fueron, 3621 kcal/kg para pollos de 4 a 11 días de edad, 3331 kcal/kg para pollos de 17 a 24 días de edad y 3349 kcal/kg para pollos de 38 a 45 días de edad. Estos valores se aproximaron a los valores de energía bruta del glicerol, lo que permite inferir que este ingrediente posee una elevada digestibilidad. La diferencia entre el valor de energía metabolizable que se encontró en la primera etapa, con los de las otras dos etapas, es posible que se debiera a la edad de los animales o quizás a la metodología usada para la determinación de la energía. En la primera etapa se usó el procedimiento de substitución de la dieta basal por glicerol (6%), y en las otras dos etapas se usó el procedimiento de substitución creciente de la dieta basal por glicerol (0%,3%,6% y 9%).
En ponedoras, Lammers et al. (2008), al trabajar con la inclusión de glicerol en hasta el 15% (87% de glicerol, 9% de agua, 0,03% de metanol, 1,26% de sodio y 3625 kcal/kg de energía bruta), identificaron que aves Hy Line W36 con 40 semanas no sufrieron alteraciones en sus características productivas (producción de huevos, masa del huevo, consumo de alimento) y la energía metabolizable aparente de dicha fuente de glicerol fue de 3,805 kcal/kg, superior a los valores normalmente usados para el maíz.
Mientras tanto, al evaluar el valor de energía metabolizable del glicerol, Bartlet y Schenieder (2002) demostraron que los valores de energía metabolizable del glicerol puro para pollos de engorde, ponedoras y cerdos variaba de acuerdo con su inclusión en la dieta. En la Tabla 5 se presentan los valores observados por los autores, quienes sugieren que esta reducción de la energía metabolizable ocurre porque no hay reabsorción renal de glicerol, considerando que el exceso se excreta a través de la orina.
Tabla 5. Energía Metabolizable (kcal/kg) del glicerol puro en diferentes especies.
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3. Conclusión
Esta ocurriendo una alteración en los paradigmas respecto al uso de los ingredientes para la alimentación humana y animal. El hombre pasa a competir por las mismas fuentes de energía para su alimentación y para sus necesidades energéticas, no relacionadas directamente a sus necesidades nutricionales.
La falta de indebida distribución de los alimentos está manifestándose como un complejo aspecto a ser estudiado.
En la alimentación animal deberá ser considerada una mayor atención en la calidad de lo que estamos utilizamos.
Esta nueva matriz energética esta proporcionándonos sub. productos que deberán pasar a ser mas estimados en el futuro (DDGS y glicerol

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Preguntas Relacionadas
La única diferencia significativa encontrada con la inclusión de los DDGS, fue el número de huevos/ave/día en el período de hasta 35 semanas en el que las aves recibieron dieta con baja densidad.
Hasta ahora, los avances en el conocimiento de la nutrición animal de las diferentes especies nunca habían sido restringidos por la disponibilidad de los ingredientes para las formulaciones de las dietas.
Autores:
Antônio Mário Penz Junior
Provimi Argentina
Mario Gianfelici
Cargill
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Luis Yagual de la Rosa
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Luis Yagual de la Rosa
Nuproxa
4 de octubre de 2019
Excelente articulo, rompiendo Paradigmas, el DDGS es un excelente producto, ahora que se le ha disminuido la cantidad de grasa se ha concentrado el nivel de proteína y de AA, a los alimentos comerciales les da un color hermoso, dorado.
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cesar lopez
13 de noviembre de 2019
el color de pollo no es todo si el sabor y la consistencia de la Carne eso es mas importante
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