Explorar
Comunidades en español
Anunciar en Engormix

La ganadería bovina en el municipio de Olinalá, Guerrero

Publicado: 25 de julio de 2022
Por: E.Y. Valenzo1, J. Salgado1, E.C. García2, M.B. Bottini1, M.A. Mejía3, L. Alaniz1*1Universidad Autónoma de Guerrero, Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia No. 2. 2Universidad Autónoma de Guerrero, Escuela Superior de Medicina Veterinaria y Zootecnia No. 3Universidad Autónoma de Sinaloa, Facultad de Agronomía
Resumen

Para caracterizar las unidades de producción dedicadas al ganado bovino en la cabecera municipal de Olinalá, Guerrero, se aplicó una encuesta a 100 ganaderos. Se encontró que la edad promedio de los ganaderos es de 55.45 ± 15.46 años; la superficie promedio de las Unidades de Producción es de 110.62 ± 188.74 ha, con 28.64 ± 20.93 cabezas de ganado por Unidad de Producción Pecuaria (UPP). En el 92% de las UPP no se utilizan biotecnologías reproductivas. El 99% de los ganaderos suplementa el ganado, la mayoría en la temporada de sequía. Se concluye que la ganadería en Olinalá se practica a baja escala; en general los productores tienen poca escolaridad, edad avanzada y requieren asistencia técnica, lo que hace que desconozcan y no adopten nuevas técnicas para mejorar la reproducción, nutrición y sanidad en sus UPP.

Introducción
El inventario ganadero en el estado de Guerrero es de 1,458,044 cabezas de bovinos (García, 2019). Esta actividad se desarrolla principalmente en las regiones Costa Grande, Costa Chica y Tierra Caliente, y la ganadería se caracteriza por su baja rentabilidad y ser de libre pastoreo. La localidad de Olinalá, Guerrero, es conocida como un pueblo artesanal y ganadero, ello pese a que no se encuentra entre las regiones con mayor aptitud natural para el desarrollo de la ganadería. No obstante, en la localidad se trata de una práctica muy antigua claramente vinculada a la economía e identidad, por lo que su análisis resulta de relevancia como parte de la dinámica social y económica, requiere ser valorada, especialmente en el contexto de los nuevos desafíos que impone la necesidad de cuidar la salud pública y la seguridad alimentaria, en lo cual se reconoce el papel de la diversificación productiva, así como la importancia de fortalecer las actividades económicas locales y regionales (SECTUR, 2020). Es importante identificar las características socioeconómicas de los productores, el tamaño del sistema de producción, así como la comercialización de carne, leche y sus derivados (Orantes-Zebadúa et al., 2014). La caracterización de fincas ganaderas es un mecanismo que permite conocer sus limitantes y potencialidades, para proponer planes y proyectos de transformación tecnológicos (Martínez, 2010). Por lo anterior, este trabajo se propuso caracterizar las UPP, y los sistemas de producción bovino en la localidad de Olinalá, Guerrero, para identificar las limitantes y potenciales en la producción de bovinos, y al mismo tiempo, desarrollar propuestas para la capacitación de los productores, así como la adopción de tecnologías y proponer políticas públicas que contribuyan a mejorar la rentabilidad y reducir el impacto negativo del ganado sobre el ambiente.
Materiales y métodos
Olinalá es un municipio que pertenece a la región Montaña del estado de Guerrero; se ubica entre los paralelos 17° 41’ 59’’ y 18° 03’ 48’’ de latitud norte, y los 98° 36’ 43’’ y 98° 58’ 54’’ de longitud oeste (INEGI, 2016). Tiene una extensión territorial de 705 km2 , su superficie corresponde al 1.11% del área estatal. Colinda al norte con Copalillo y el estado de Puebla, al sur con Ahuacuotzingo y Cualác, al este con Huamuxtitlán, Cualác y Xochihuehuetlán, y al oeste con Ahuacuotzingo y Copalillo (Figura 1). Su cabecera municipal se encuentra a una altura de 1,350 msnm. Predominan los climas semicálido sub húmedo, cálido subhúmedo y semiárido cálido. La temperatura media anual es de 23.4°C, con mínimas en diciembre oscilando en los 11°C, y máximas en mayo cercanas a los 35°C. Las lluvias se presentan de mayo a septiembre, con una precipitación pluvial media anual de 968 mm. Para analizar los sistemas de producción bovina, se desarrolló un cuestionario con 37 preguntas relacionadas con la práctica de producción bovina local, incluyendo temas socio económicos, y principalmente técnicos, como sanidad, nutrición y reproducción, de manera que para el entrevistado fuera sencillo comprender y responder las preguntas. El cuestionario se aplicó a 100 ganaderos residentes de la cabecera municipal de Olinalá, Guerrero. Los ganaderos encuestados fueron seleccionados aleatoriamente y visitados en sus domicilios; la información se recabó en el periodo de julio a octubre de 2019. Los datos fueron ordenados y capturados en Excel, se analizaron mediante estadísticas descriptivas y se representaron usando gráficas y proporciones, de acuerdo con las características de cada variable. La mayoría de los resultados fueron graficados y tabulados directamente en frecuencias y hubo algunas variables que se representaron en porcentajes, otras en promedio ± desviación estándar.
Figura 1. Regiones del estado de Guerrero, ubicación del Municipio de Olinalá y su cabecera municipal.
Figura 1. Regiones del estado de Guerrero, ubicación del Municipio de Olinalá y su cabecera municipal.
Resultados y discusión
El 98% de los productores encuestados son hombres, y tan sólo el 2% son mujeres. Se encontró que el 33% de los productores cuenta con nivel de escolaridad de secundaria, el 32% preparatoria, 14% primaria, 13% cuenta con formación universitaria, mientras que el 8% no cuenta con ningún grado de estudios (Figura 2). El promedio de edad de los productores es de 55.45±15.46 años, el 50% de los encuestados cuentan con una edad entre los 50 a 69 años. El 90% de los productores dijo pertenecer a la asociación ganadera local y el 10% no son socios ganaderos.
Figura 2. Escolaridad de los productores de ganado bovino en Olinalá, Guerrero, 2019.
Figura 2. Escolaridad de los productores de ganado bovino en Olinalá, Guerrero, 2019.
La superficie promedio de las unidades de producción es de 110.62± 188.74 ha, con 25.14± 35.36 ha sin desmontar. El 85% de los productores cuentan con terreno propio, aunque un 15% renta terrenos adicionales para mantener su hato durante todo el año. Los hatos promedio se componen de 26.64 ± 20.84 cabezas de ganado. En el 90% de las unidades de producción no se lleva ningún tipo de registros productivos ni económicos. La mano de obra empleada es eminentemente familiar, solo en 20% de las UP se contrata mano de obra temporal para colaborar en actividades específicas, en el 80% de los casos la totalidad de la mano de obra es familiar.
En lo relativo al manejo sanitario, se encontró un 10% de productores que no vacuna su ganado. El 90% restante aplica vacunas principalmente contra “derriengue”, entre otras vacunas, que se aplican generalmente dos veces al año: entre los meses de diciembre y enero los de mayo y junio. Conforme a los entrevistados, las enfermedades que se presentan con mayor frecuencia en el ganado son el carbón sintomático, la priroplasmosis, y la rabia paralítica bovina. El 92% de los productores reconoce que necesita asistencia técnica, aún que solo 23% de ellos la recibe, y el 77% no tiene acceso a este servicio; ello afecta negativamente la productividad y la adopción de tecnologías (Marizacén y Artunduaga, 2017). No obstante, el 88% de los entrevistados acude a un médico veterinario cuando se presenta algún problema sanitario en su ganado, mientras que el 12% procura resolverlo con recomendaciones de familiares y amigos. En lo relativo al manejo nutricional, 99% de los entrevistados cultiva algún tipo de forraje para suplementar a su hato; 17% de los entrevistados afirma ofrecer algún forraje o suplemento a su ganado durante todo el año, mientras que el 90% ofrece alimentación al menos entre los meses de febrero a mayo. Respecto a los productos utilizados, el 39% de los productores afirma emplear alimento comercial, 14% recurre a maíz ensilado, y el resto suele combinar ensilados, granos y sales minerales. Durante 2019, de los 1,575 vientres propiedad de los entrevistados se destetaron 664 becerros, resultando en parámetros reproductivos por debajo de los valores ideales aún para explotaciones ganaderas de tipo familiar y de traspatio. Las razas más usadas son de cruzas de ganado cebuino con pardo suizo. Se utilizan poco las biotecnologías reproductivas; solo el 7% de los productores ha utilizado alguna vez la inseminación artificial a calor natural, y solo 1% utiliza la sincronización de estros. Aún que los productores de Olinalá consideran que sus explotaciones son de doble propósito, solo en el 19% de las UP se ordeña durante todo el año, y en el 65% de los casos no se ordeña en ninguna temporada. El período de ordeña es muy variable, en la mayoría de los casos se practica un destete tardío. Hay poca variabilidad en la leche producida durante épocas de lluvia y secas, ya que casi todos los productores que ordeñan suplementan a las vacas en ordeña. Respecto a la venta de aminales, durante 2018 en la totalidad de las UP se registró la venta de 883 animales, 731 becerros de engorda y 57 vacas de desecho; ello ocurre principalmente durante los meses de mayor escasez de forrajes (particularmente abril y mayo).
Se concluye que la ganadería en el municipio de Olinalá se practica a abaja escala y es de tipo familiar. Sobresale la falta de asistencia técnica como una necesidad insatisfecha de los productores, lo que se refleja en desconocimiento y baja adopción de tecnologías en reproducción, nutrición y sanidad; ello implica que existen diversas oportunidades de mejora que, de ser abordadas, se reflejarían en incremento de los parámetros productivos y la rentabilidad. Se recomienda emplear protocolos reproductivos para elevar el índice de partos, valorar la carga animal, así como el empleo de nuevas alternativas de forrajes y diseñar programas de suplementación para mejorar la nutrición y reducir las pérdidas de ganado en época de sequía.

García, L.A. (09 de diciembre de 2019). El 38% del territorio de Guerrero tiene vocación ganadera. El sol de Chilpancingo, https://www.elsoldechilpancingo.mx/2019/12/02/el-38-del-territorio-de-guerrero-tiene-vocacion-ganadera/

INEGI (2016). Instituto Nacional de Estadística y Geografía. Información nacional por entidad federativa y municipios. http://www3.inegi.org.mx/sistemas/mexicocifras/default.aspx?e=25

Martínez, R. O. (2010). Bancos de biomasa con pasto elefante Cuba CT-115 para solucionar el déficit de alimento durante la seca en la producción de leche y carne. Curso: Los alimentos y su utilización. Centro de Desarrollo Tecnológico Tantakin. Yucatán. México. 85pp.

Marizancén, S. M. A. y Artunduaga, P. L. (2017). Mejoramiento genético en bovinos a través de la inseminación artificial y la inseminación artificial a tiempo fijo. Revista de Investigación Agraria y Ambiental. V. 8 Núm. 2.

Orantes-Zebadúa MA, Platas-Rosado D, Córdova-Avalos V, De los Santos-Lara MC, Córdova-Avalos A. (2014). Caracterización de la ganadería de doble propósito en una región de Chiapas, México. Ecosistemas y Recursos Agropecuarios, 1(1):49-58.

Secretaria de Turismo, 2020. Olinalá, arte con olor a Guerrero. https://www.gob.mx/sectur/articulos/olinala-arte-con-olor-aguerrero-238440?idiom=es

Contenido del evento:
Temas relacionados:
Autores:
Alaniz G.L
Universidad Autónoma de Guerrero
Recomendar
Comentar
Compartir
Antonio Diaz Castro
22 de febrero de 2023
Podrias regalarme una copia de tu trabajo, actualemente me encuentro realizando una tesis similar en la region costachica del estado.
Recomendar
Responder
Profile picture
¿Quieres comentar sobre otro tema? Crea una nueva publicación para dialogar con expertos de la comunidad.
Súmate a Engormix y forma parte de la red social agropecuaria más grande del mundo.