Utilización de ingredientes alimentarios de proteínas vegetales no convencionales

1. La mayoría de los ingredientes alimentarios de proteínas vegetales no convencionales contienen factores antinutricionales o toxinas y deben procesarse adecuadamente antes de poder usarse.

2. La mayoría de los ingredientes de proteínas vegetales no convencionales son subproductos del procesamiento de semillas de leguminosas. La calidad y el valor nutricional del producto están muy influenciados por la tecnología de procesamiento, particularmente la digestibilidad y disponibilidad de aminoácidos.

3. Los aminoácidos de la mayoría de los ingredientes alimentarios de proteínas vegetales no convencionales están desequilibrados y carecen de ciertos aminoácidos limitantes. Al sustituir la harina de soja en la dieta, se debe prestar atención a la suplementación con aminoácidos.

4. En general, los ingredientes alimentarios de proteínas vegetales no convencionales tienen mala palatabilidad, por lo que se debe prestar atención al procesamiento y la modulación.

En general, se debe evitar la harina de colza para los pollitos jóvenes. Para harina de colza de alta calidad, la dosis puede ser de hasta un 10-15% en las últimas etapas de los pollos de engorde. Sin embargo, para evitar un deterioro del sabor del pollo, la dosis debe controlarse dentro del 10%. Se puede utilizar hasta un 8% para ponedoras y reproductoras. Si la dosis alcanza el 12%, el peso del huevo se reducirá y la incubabilidad disminuirá.

La harina de semilla de algodón, que contiene una gran cantidad de cáscaras, no tiene un alto contenido energético y debe evitarse en las dietas para pollos de engorde. La cantidad utilizada en otras dietas debe ser inferior al 5%. Para las gallinas ponedoras, los niveles de gosipol inferiores a 200 ppm en la dieta no afectarán la producción de huevos. Para evitar la decoloración de la yema de huevo durante el almacenamiento, el contenido de gosipol debe limitarse a menos de 50 ppm. De lo contrario, la clara del huevo puede volverse rosada durante el almacenamiento y la yema puede volverse de color amarillo verdoso o rojo oscuro con manchas. La decoloración de la yema se acelera cuando el pH de la yema es alto. La adición de sales de hierro puede aumentar la tolerancia al gosipol y prevenir la absorción de gosipol en el intestino delgado. Generalmente se utiliza sulfato ferroso como sal ferrosa y la cantidad es cuatro veces el contenido de gosipol. Cuando se añade para evitar la decoloración de la yema, la tolerancia se puede aumentar a 150 ppm. La tolerancia de los pollos de engorde al gosipol es de 150 ppm, que puede aumentarse a 400 ppm después de la adición de sal ferrosa.

No se recomienda el uso de harina de linaza en la alimentación de pollos. Una dosis del 5% provocará pérdida de apetito y producción de excrementos pegajosos, que afectarán el ambiente del gallinero. La linaza verde contiene factores antivitamina B6 y su uso en la alimentación de los pollos aumentará el requerimiento de B6. La linaza se puede remojar en agua, tratar con vapor a alta presión o agregar vitamina B6 a la fórmula para reducir las molestias.

El valor energético de la harina de maní es muy diferente para los pollitos y los pollos adultos. La harina de maní cruda puede causar hipertrofia pancreática en los pollitos. Por lo tanto, la harina de maní es adecuada para su uso en la alimentación de pollos adultos. La dosis en el pienso para pollos adultos puede ser de hasta el 6%. Las gallinas ponedoras pueden utilizar hasta un 9%. Para evitar la intoxicación por aflatoxinas, la dosis debe ser inferior al 4%.

Harina de coco

El coco tiene un alto contenido de fibra, por lo que no tiene un alto contenido energético y tiene una mala composición de aminoácidos. Es deficiente en lisina, metionina e histidina, pero es rico en arginina. Todas las grasas están saturadas, por lo que no es necesario complementar con ácidos grasos esenciales cuando se utiliza harina de coco en la dieta. El contenido de vitamina B es alto y el contenido de fósforo también es alto.

Debido al bajo contenido energético de la harina de coco, no debe utilizarse en dietas para pollos de engorde. La palatabilidad de los pollitos no es buena, por lo que no se debe utilizar con frecuencia. Las dosis de otros alimentos para pollos deben controlarse por debajo del 5% y se debe prestar atención al equilibrio de energía y aminoácidos.

La composición de aminoácidos de la harina de sésamo es baja en lisina, alta en metionina y triptófano, baja en vitaminas A, D y E y alta en B2 y niacina. El grupo B se modifica mediante calentamiento. Los minerales son ricos en calcio y fósforo, pero el alto contenido de ácido fítico inhibe en gran medida la absorción de calcio, fósforo y zinc.

Incluso cuando se suplementa con lisina, el efecto de la harina de sésamo en la alimentación de los pollos sigue siendo significativamente peor que el de la harina de soja. Esto se debe a que la harina de sésamo contiene demasiado ácido fítico, que inhibe la absorción de muchos nutrientes. Por ejemplo, el alimento para pollos que normalmente requiere un 0,8% de calcio debe aumentarse al 1,05% cuando se utiliza harina de sésamo. También se reduce la utilización de zinc. Por lo tanto, si la dosis de harina de sésamo es demasiado alta, puede provocar una inhibición del crecimiento, por lo que la dosis en el alimento para pollos debe ser baja y no usarse en pollitos jóvenes.

La lisina es el primer aminoácido limitante, pero el contenido de aminoácidos que contienen azufre es alto; el contenido de fibra cruda varía según la proporción de la cáscara, el contenido de grasa varía según el método de extracción del aceite y la energía varía mucho, pero es menor que la de la harina de soja. 

El contenido de vitamina B es mayor que el de la harina de soja, el contenido de niacina es particularmente alto y el contenido de calcio y fósforo es mayor que el de la harina de semillas oleaginosas ordinaria.

La harina de girasol es baja en energía y tiene un efecto de engorde pobre, por lo que no debe usarse para pollos de engorde. La harina de girasol descascarada se puede utilizar en pequeñas cantidades para los pollos de engorde, pero su bajo contenido de lisina, leucina y metionina la hace de poco valor. Es apropiado utilizar menos del 10% para gallinas ponedoras. En las dietas para pollos de engorde, el nivel de harina de girasol descascarada se puede aumentar al 20%. Un nivel demasiado alto provocará manchas en la cáscara del huevo.

La harina residual después de la extracción de la goma manano galactano de los frijoles guar contiene entre un 40 y un 50 % de proteína bruta. El principal factor antinutricional es la goma manano galactano residual. Este factor antinutricional se puede descomponer añadiendo la cantidad adecuada de enzimas. Actualmente se utiliza principalmente en grandes pastos y sólo en pequeñas cantidades por parte de los fabricantes de piensos. Se puede añadir aproximadamente entre un 3 y un 6 % a las dietas de pollos de engorde, patos y gansos.

El contenido de proteína bruta del altramuz es del 32-42% y su valor nutricional es similar al de la soja. Sin embargo, los cerdos utilizan muy poca lisina, mientras que la tasa de utilización en los pollos de engorde puede llegar al 90%.

El principal factor limitante del altramuz en la alimentación animal es su contenido en alcaloides, mientras que su uso se ve reducido por la baja concentración energética debido al alto contenido en fibra bruta (25%), gran parte de la cual puede aumentar el tracto intestinal.

El problema del alto contenido de fibra en los altramuces puede resolverse mediante el descascarado, la molienda fina y la adición adecuada de enzimas. A diferencia de la harina de soja, los altramuces no requieren tratamiento térmico antes de su uso.
Los resultados de alimentación fueron similares cuando se compararon dietas de harina de soja con dietas para pollos de engorde en las que los altramuces reemplazaban entre el 15 y el 45% de la harina de soja.