dietas para destete de lechones

A los 21 días de vida del lechón, la actividad de la tripsina, principal enzima que degrada proteína de los alimentos, es 10 veces menor que la actividad que tendrá a los 56 días de vida del lechón, suficiente para digerir la leche materna, pero insuficiente para digerir alimentos de origen vegetal. Al momento del destete el sistema digestivo requiere adaptarse rápidamente a un cambio brusco de dieta, pasando de la leche materna a un alimento balanceado, entre más rápido sea el periodo de adaptación será menor la incidencia de diarreas y mejorará el crecimiento del cerdo.

Para lograr este objetivo se utilizan diferentes aditivos, muchos de los cuales tienen efectos secundarios indeseables que ponen en peligro la salud humana y al medio ambiente, pero la clave para el diseño de alimentos que mejoren la adaptación del lechón al destete sin efectos secundarios negativos quizá esté en estudiar las razones de fondo por las cuales estos aditivos promueven el desarrollo y crecimiento de los lechones.

¿Por qué algunos aditivos alimenticios tienen un efecto sobre el crecimiento del cerdo? Se sabe que existe una interacción entre los alimentos ingeridos y la expresión de genes relacionados con el desarrollo del sistema digestivo; al estudio de la interacción entre el consumo de alimentos y la expresión de genes se le conoce como nutrigenómica. Uno de los aditivos más eficaces para disminuir las diarreas en lechones destetados, pero con efectos secundarios no deseados, son los antibióticos en el alimento. Yu et al. (2017) señalan que el efecto benéfico de los antibióticos, usados como promotores de crecimiento, no se debe sólo a la prevención de enfermedades por su efecto bactericida o bacteriostático, también a un incremento en la expresión de genes de transportadores de aminoácidos (CAT1, EAAC1, ASCT2, y+LAT1) y de transportadores de péptidos (PepT1), en el intestino delgado, lo que significa que los antibióticos coadyuvaron en la digestibilidad de las proteínas, sin embargo, existe el peligro de que el uso de antibióticos en el alimento genere resistencia de bacterias patógenas, y hay una tendencia mundial para reducir su uso como promotores de crecimiento, pero empezamos a vislumbrar las razones por las cuales promueven el crecimiento y se podrán diseñar aditivos que no se usen como antibióticos pero que permitan la misma expresión de genes para mejorar la digestibilidad de las proteínas.

Otro aditivo polémico es el zinc, se ha observado que suplementar con dosis terapéuticas de zinc, 3000 ppm, disminuye la incidencia de diarrea, aumenta el tamaño de las microvellosidades del duodeno e ileum (Zhu et al 2017) y aumenta la expresión de IGF-1, hormona muy importante para el crecimiento del lechón (Li et al 2006), es decir, el zinc además de tener un efecto bactericida, tiene un efecto sistémico que motiva el desarrollo del cerdo, sin embargo el exceso de zinc en las dietas tiene repercusiones ambientales, por contaminación del suelo y agua con metales pesados; y puede crear también resistencia de bacterias patógenas en granjas de cerdos. (Jensen et al. 2018), por lo que actualmente se estudian alternativas para utilizar zinc en pequeñas cantidades mediante nanotecnología y lograr el mismo resultado obtenido en las dosis terapéuticas sin los efectos ambientales negativos.

Otro aditivo son los productos altos en fibra, Superchi et al. (2017) observaron un aumento en la producción de somatotropina, conocida como hormona del crecimiento, con dietas altas en fibra en lechones destetados, de igual manera, Wan et al. (2017) estudiaron el efecto del consumo de oligosacáridos, resultado de la polimerización de ácido algínico y polisacáridos, y observaron que promueve la secreción de hormonas que motivan el crecimiento y desarrollo del lechón, lo que podría cambiar el paradigma del uso de fibra en dietas para lechones. Las recomendaciones generales para formular dietas para destete son usando bajos niveles de fibra, quizá sea importante ahora formular con un mínimo y máximo de fibra en la dieta, e identificar los tipos de fibra que promueven la secreción de hormonas del crecimiento para usarlas como aditivos en las dietas para cerdo.

También el uso de aminoácidos sintéticos y la cantidad total de nitrógeno en la dieta afectan la absorción de nutrientes, Morales et al. (2017) observaron una mayor expresión de los genes transportadores de aminoácidos b0,+AT en duodeno y B0AT1 en ileum cuando se usan dietas con aminoácidos sintéticos; por otro lado, el uso de dietas bajas en proteína (3% por debajo del nivel recomendado) mejora también la expresión de transportadores de aminoácidos en músculo esquelético de cerdos (Li et al. 2017), lo que pudiera significar que formular dietas con un máximo de nitrógeno total y utilizar aminoácidos sintéticos como aditivo, podrían mejorar la digestibilidad de la proteína del alimento.

Estos son sólo algunos ejemplos del uso que se puede dar a la nutrigenómica para el diseño de aditivos y formulación de dietas para destete, el camino es largo y las oportunidades son muchas, y esperemos que dentro de poco tiempo empecemos a ver el beneficio de dichos estudios en la producción de cerdo a nivel comercial.