Un número importante de criterios deben ser considerados, cuando se
selecciona el desinfectante efectivo y apropiado. Los desinfectantes deben:
- Estar libre de olores fuertes y objetables.
- No ser corrosivos. · No tener una fuerte toxicidad luego de su aplicación,
ni ser excesivamente irritantes.
- Ser efectivos a temperaturas ordinarias cuando se diluye en agua, y mezclarse
rápidamente con ella.
- Estar empacados en una forma y concentración que sean fáciles
de transportar, mezclar y económicos de usar.
- Tener una alta potencia antimicrobiana de rápida acción, aún
en áreas altamente contaminadas.
Un simple desinfectante raramente cumple con todos estos criterios, y la elección
del mismo debe estar basada en la interrelación de factores, como el
tipo de superficies a ser limpiadas, una acción mecánica o de
frotado, y el conocimiento de los microorganismos que están causando
un riesgo de enfermedad.
La siguiente es una descripción breve de muchos de los desinfectantes
usados más ampliamente.
La efectividad de todos los desinfectantes aquí discutidos se mejora
por una cuidadosa limpieza previa de todas las superficies con un chorro de
alta presión y un buen detergente.
Para discutir apropiadamente sobre el objeto de la desinfección, es necesario
hacer una breve definición de los términos. La esterilización
es el uso de un procedimiento físico o químico para destruir todas
las formas de vida microbiana. La desinfección es generalmente un proceso
menos letal, en el cual estas endosporas bacterianas no son habitualmente inactivadas,
sin una exposición extensa a químicos desinfectantes altamente
concentrados. Un antiséptico se define como un germicida que se usa en
tejidos vivos, con el propósito de inhibir o destruir microorganismos.
Algunos germicidas pueden ser utilizados como desinfectantes y antisépticos.
Formaldehído: Puede ser
usado como un fumigante para descontaminar todas las superficies de la instalación,
si ésta puede ser fuertemente sellada. Tiene un amplio espectro de acción
y es altamente efectivo. Sin embargo debe ser utilizado cuidadosamente debido
a los humos irritantes y su potencial explosivo. El criadero debe estar completamente
vacío (sin animales). El paraformaldehído, un polímero
sólido, se calienta en un cazo eléctrico a 204° C, produciendo
gas de formaldehído. Utilice 5 grs por metro cúbico de la construcción.
La electricidad para el cazo eléctrico necesita ser controlada desde
afuera de la porqueriza, que debe estar sellada por 24 horas. No entre hasta
que haya sido completamente ventilada. El gas de formaldehído es uno
de los pocos agentes efectivos contra la coccidiosis y la criptosporidiosis.
Otras formas de producir la fumigación incluye el rociado de una solución
al 20 % de formalina en 10 litros, por cada 1000 metros cúbicos de espacio,
o reactivando permanganato de potasio (620 grs) con formalina (1240 ml) por
cada 100 metros cúbicos de espacio. La instalación debe estar
a 20° C, y todas las superficies deben ser humedecidas inmediatamente antes
de la fumigación, para que la humedad relativa sea de 80 a 90 %, pero
no deje charcos de agua que puedan absorber el formaldehído.
Cloro (Lejía): Es barato
y ampliamente usado como desinfectante. El agua dura no interfiere con su actividad,
pero los pisos con material orgánico consumen el rendimiento del cloro,
haciéndolo ineficaz. Puede ser corrosivo para algunas superficies. La
descomposición ocurre rápidamente en temperaturas cálidas.
Nunca debería ser utilizado juntamente con el formaldehído u otros
ácidos. Las superficies deben ser limpiadas por completo de material
orgánico antes de usar el cloro. Una dilución de 1:10 de lejía
casera (5.25% hipoclorito de sodio) es adecuada para la mayoría de las
necesidades desinfectantes, incluyendo actuar como esporicida.
Compuestos Cuaternarios de Amoníaco:
Avances significativos en el desarrollo de químicos y combinaciones
de la cuarta y quinta generación, han ampliado el espectro de la actividad
biocidal, y aumentaron su eficiencia en presencia de material orgánico.
Son tan eficaces como cualquier otro desinfectante para la sanidad de superficies
duras no porosas, y una cualidad deseable es la habilidad de limpieza del detergente
tanto como su acción. Aunque tengan una buena actividad bactericida,
antivirósica y fungicida, no son esporicidas. El químico residual
tiene muy poca toxicidad para los animales.
Desinfectantes Fenólicos:
Son ampliamente utilizados. El cresol y el clorifenol son útiles para
desinfectar superficies sucias, porque no se desactivan con la materia orgánica.
Sin embargo, las esporas bacterianas son resistentes. Los desinfectantes fenólicos
no son generalmente compatibles con los detergentes, y a menudo, un producto
combinado puede precipitar en aguas duras. Son altamente tóxicos y dejan
olores duraderos.
Peróxido de Hidrógeno (Agua oxigenada): Se lo considera
como un desinfectante oxidante, e incluye otros tales como ozono y permanganato
de potasio. El peróxido de hidrógeno debe experimentar una compleja
reacción química, no completamente entendida, formando radicales
de hidroxil altamente reactivos, los cuales atacan las membranas celulares.
Existen preparados comerciales disponibles de peróxido de hidrógeno
al 3 %, que son relativamente estables y efectivos cuando se usan en superficies
inertes, pero el contacto debe ocurrir por un lapso de al menos 20 minutos para
tener una acción fungicida. Las indicaciones apuntan que las concentraciones
deben estar en un rango entre 10 y 25 %, con un tiempo de contacto mayor para
ser esporicida. El peróxido de hidrógeno resultaría inapropiado
para la desinfección en áreas de superficie grandes, las cuales
no pueden ser sumergidas en la solución.
Virkon: Este es el nombre comercial
de un nuevo desinfectante/limpiador que contiene monopersulfato de potasio como
ingrediente activo. Tiene un amplio espectro de acción antivirósica,
bactericida y fungicida debido a un fuerte sistema de acción oxidante.
Los componentes ácidos orgánicos y sulfatantes abarcan este efecto.
Virkon se vende como polvo, y necesita ser mezclado inmediatamente antes de
su uso. Cuando se utiliza como baño de pies o para otros propósitos,
el Virkon diluido permanece estable por sólo dos semanas. No es corrosivo,
y tiene baja toxicidad. Puede ser aplicado manualmente, rociado en una instalación
a la vez. Se debe evitar el contacto del polvo con la piel o los ojos, o su
inhalación. Tiene buenas propiedades detergentes también. Sin
embargo, una profunda limpieza previa es aún lo mejor antes de su rociado.
El equipo para realizarlo está disponible del mismo fabricante. Virkon
es ampliamente utilizado en el Reino Unido para lavar las cerdas antes de llevarlas
a las parideras. Normalmente, una solución al 1 % se usa, y se prepara
mezclando 10 grs de polvo en 1 lt de agua.
Alcoholes: Necesita estar en una
concentración de 70 % o más. Se evaporan rápidamente, resultando
en tiempos de contacto muy breves, así como también existe una
falta de habilidad para penetrar materiales orgánicos residuales. Las
herramientas pequeñas que se desinfectarán deben ser previamente
limpiadas, y luego ser totalmente sumergidas por 10 minutos. Los alcoholes son
a menudo utilizados como antisépticos en la piel antes de la cirugía.
Otros: Los químicos tales
como la clorhexidina, el yodo y los compuestos yodados son usados primariamente
como antisépticos (utilizados en la piel para inhibir organismos). Los
compuestos yodados no tienen acción esporicida.
La aplicación de algunos de estos desinfectantes puede necesitar una
calibración cuidadosa de un equipo de lavado de alta presión,
para lograr la concentración deseada.
Apéndice sobre parásitos
internos helmintos (gusanos):
El mayor modo de transmisión de parásitos intestinales es por
contaminación de la comida o medio ambiente con heces infectadas. Los
huevos de gusanos ascáridos, por ejemplo, se pegan a las superficies
con concreto, y los desinfectantes comunes utilizados en las granjas no los
matan. El mejor método de descontaminación es a través
de una limpieza cuidadosa con detergente y vapor.
Lo siguiente es un sumario de los pasos para la limpieza correcta y la desinfección
de una instalación:
- Todas las heces, basura y alimento inutilizado deben ser quitados.
- Todas las superficies deben ser cuidadosamente limpiadas con una lavadora
de alta presión (preferiblemente de vapor), con un buen detergente,
incluyendo las herramientas para la alimentación.
- Todas las superficies deben ser rociadas con una cantidad abundante del
desinfectante adecuado.
- En algunos casos, puede ser necesario enjuagar el desinfectante de todas
las superficies.
- Si las instalaciones no pueden ser desinfectadas adecuadamente con el rociado,
se debe considerar la fumigación.
- Permita que la instalación se seque y quede vacía por varios
días antes de reingresar animales.
9 de Abril, 1998
Dr. Marvin McCallister - Veterinario
de Extensión - Area de Servicios Veterinarios