Un caso de intoxicación aguda por salinomicina en cerdos

Los casos de intoxicación en cerdos no son de frecuente presentación, con excepción de las micotoxicosis, Sin embargo, cuando se presentan, afectan a un gran número de cerdos debido a la vehiculización del tóxico a través del alimento produciendo ingentes pérdidas económicas (1, 2). La salinomicina (SAL) es un ionóforo autorizado para ser usado como coccidiostato en cerdos y aves. Así mismo en otros países, el SAL es utilizado en el cerdo como promotor del crecimiento (1,3). En la práctica, la intoxicación con SAL está asociada a una sobredosificación y/o a su utilización conjunta con tiamulina debido a que comparten el mismo mecanismo enzimático de biotransformación (1, 2, 3). El objetivo de este trabajo fue la descripción clínica y los resultados de los estudios complementarios utilizados para el diagnóstico de un caso de intoxicación aguda por SAL.

 

El caso se presentó en una granja de 120 madres. El cuadro clínico se registró en el galpón de engorde (población en riesgo: 516 animales) entre los 105 y 161 días de vida, luego del consumo por 4 días de un alimento de formulación comercial adicionado de SAL a dosis de 60 ppm. El día 1, se reportó en un cerdo anorexia, tremor y decúbito progresivo observándose en los días 2 y 3, 3 nuevos casos con similar signología. El día 4 se realizó la inspección clínica del lote y las necropsias de 2 cerdos afectados para la toma de muestras para estudios histopatológicos.

En función, de la anamnesis y la ausencia de lesiones macroscópicas se tomaron muestras de sangre a 13 cerdos con los signos mencionados (grupo A) y 8 sin signos pero del mismo lote (grupo B). Se realizó hemograma completo y determinación de niveles séricos de aspartato aminotransferasa (AST) y creatininaquinasa (CK) indicativas de daño de músculo esquelético. Se tomaron muestras de alimento para determinación de SAL por cromatografía en capa delgada.

 

En 15 cerdos sobre 516 (2,7%) se consignaron signos clínicos tales como: decúbito lateral, debilidad y sonidos compatibles dolor generalizado. No se registró fiebre ni signos nerviosos. En la necropsia no se observaron lesiones macroscópicas. El diagnóstico histopatológico de músculo esquelético consignó necrosis hialina multifocal monofásica caracterizada por fragmentación de fibras musculares con proliferación de mioblastos, células satélites y macrófagos. Dichos hallazgos fueron compatibles con intoxicación por ionóforos. Los resultados de los estudios hematológicos demostraron un hemograma de estrés en ambos grupos. Así mismo, los valores de AST y CK se encontraron elevados en ambos grupos en relación a la lesión muscular.

El rango CK en A: 5105-19711 UI/L; B: 873-14222 UI/L; rango AST en A: 12-2677 UI/L; B: 62-708 UI/L. Los valores de referencia para cerdos de esa categoría son: CK <25UI/L; AST 40-60 UI/LT. El análisis de alimento dio un valor de 240 ppm de SAL. Sobre la base del cuadro clínico así como la ausencia de lesiones macroscópicas se sospechó de un cuadro tóxico. Se indicó el retiro del alimento del silo y de la línea de alimentación y su reemplazo por una nueva formulación sin el agregado de SAL. Luego del retiro del alimento no se detectaron nuevos casos, sin embargo por cuestiones humanitarias los cerdos severamente afectados fueron sacrificados. El seguimiento del cuadro determinó que el crecimiento del resto de los cerdos se vio afectado, sin mortalidad, originando la venta anticipada de los animales a los 90kg en lugar de los 110-115 kg (promedio histórico).

 

Si bien el cuadro clínico, las lesiones microscópicas y los valores bioquímicos son de utilidad para el diagnóstico presuntivo de intoxicación por SAL, su detección en el alimento en una concentración de 4 veces mas de la indicada en la formulación, fue de valor diagnóstico (1, 3). El período de 4 días registrado entre comienzo del suministro de alimento con sobre dosis de SAL y la presentación del cuadro clínico está en concordancia con lo indicado en la literatura de cuadros agudos (3).

El mismo guarda relación con la acumulación de SAL en sangre debido a la saturación de los mecanismos de biotransformación por la sobredosificación (3). Los resultados del estudio de las enzimas AST y CK guardaran relación con la extensa y severa lesión de los músculos esqueléticos tanto en los grupos A y B. Sin embargo no guardaron relación la severidad del cuadro clínico ni con la posibilidad de recuperación de los animales tal como ha sido reportado (2). El grupo B de cerdos sin signos clínicos, no alcanzó el peso comercial en el tiempo requerido debido a una la baja performance productiva (1,2), posiblemente a la dificultad de deambular para el consumo de alimento o por otro mecanismo no conocido.

Con relación al origen de la intoxicación se relacionó con un error en la formulación y la adición de 4 veces la dosis recomendada para su utilización en cerdos (240ppm vs 60ppm). Este error resalta la necesidad de ser cuidadosos en el uso de drogas y más aún aquellas con un rango de seguridad estrecho como es la SAL (2). EL manejo de las mismas debería ser realizado por personal entrenado y bajo la supervisión de un profesional. Así mismo, debería limitarse el uso de SAL sólo para los fines para los cuales fue autorizado por la autoridad sanitaria. Finalmente este caso muestra la necesidad de llevar a cabos programas de auditoria que permitan reducir los errores de este tipo, para evitar así sus consecuencias productivas y relacionadas con el bienestar animal y la salud pública. .

 

1) Carpenter J et al. 2005. J Swine Health Prod 13:333336.

2) Croubels S et al. 2001. Vlaams Diergeneeskundig Tijdschrift 70:54-58.

3) Plumlee KH et al. 1995. J Vet Diag Invest 7:419-20 Este trabajo fue parcialmente financiado por PICT 20100961 y la Secretaria de Ciencia y Técnica UNLP.