Si tu perro ha sido picado por una abeja, es importante actuar rápidamente para ayudar a tu perro y minimizar el daño. A continuación, se presentan algunos pasos que puedes seguir:
Mantén la calma. Es importante no entrar en pánico ni asustar a tu perro más de lo que ya está.
Revisa la herida. Busca la abeja y retira el aguijón si aún está clavado en la piel de tu perro. Trata de hacerlo con cuidado para evitar que el aguijón se rompa y se deje parte de él atrás.
Aplica hielo. Coloca un poco de hielo en una bolsa o un paño y aplícalo sobre la herida durante unos minutos para reducir la hinchazón y el dolor.
Lleva a tu perro al veterinario. Si la herida es grave o si tu perro tiene una reacción alérgica, es importante llevarlo al veterinario lo antes posible.
Evita que tu perro se rasque la herida. Trata de mantener a tu perro alejado de la herida y evita que se rasque o se lamiera para evitar infecciones.
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