El genoma de la vaca, Un Hito en el avance científico

Este articulo explota la ingenuidad de los lectores, muchos de ellos profesionales que estudiamos (y asumimos como cierto) el paradigma de la ingeniería genética, en el sentido de que a partir del reconocimiento (secuencia) de ADN (de los genes), pasar a la fabricación de proteínas era como soplar y hacer botellas. El proceso de transferencia de los genes y la adecuación al medio celular exrtraño ha demostrado ser de una complejidad tal que los resultados son prácticamente impredecibles (en términos de resultados, los que se remiten a la viabilidad técnica del proceso al menos -no a la ecológica- los éxitos se remiten al campo vegetal en cuanto a lo animal, dada su mayor complejidad metabólica, el asunto es a otro precio) el mismo concepto de genes está hoy en día en entredicho...y el papel, otrora claro de CONTROL por parte de aquellos, hoy está desvirtuado cocontrol o cogestión serían términos más cercanos a la realidad. Es decir, el medio interviene y afecta las redes metabólicas y éstas a su vez contribuyen a modular la expresión de los genes (entendidos ahora como unidad funcional hipotética, más que física). En otras palabras, el medio externo, el medio interno (redes metabólicas) y genes interactuan para adaptarse a las exigencias propias de la vida. La visión reduccionista de la fisiología celular propuesta desde la genética (que ha pretendido constituirse en base para explicar la vida entera) será en el futuro modificada para dar cabida a una concepción menos centrada en los elementos particulares ( los genes) y retomar una visión sistémica (las redes metabólicas, el entorno y los genes) o mejor dicho ecosistémica. Un resúmen muy bien logrado del tema lo encuentran en el libro LAS CONEXIONES OCULTAS de Fritjof Capra, que les recomiendo.