Incorporar nucleótidos en la dieta de los pollos reduce los efectos negativos causados por Clostridium perfringens en el intestino

La suplementación de nucleótidos en la dieta de pollos broiler ha demostrado disminuir notablemente los efectos negativos que provoca la bacteria Clostridium perfringens en su salud intestinal y crecimiento. Es la principal conclusión del estudio The impact of exogenous dietary nucleotides in ameliorating Clostridium perfringens infection and improving intestinal barriers gene expression in broiler chicken, que ha realizado un grupo de expertos en microbiología y nutrición animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad del Cairo (Egipto).

El estudio, que se ha publicado en Veterinary and Animal Science, se ha basado en 270 pollos divididos aleatoriamente en seis grupos de tratamiento durante 35 días.

“Los pollos infectados por Clostridium perfringens que siguieron una dieta suplementada con Nucleoforce™ de Bioibérica mejoraron la función de la barrera intestinal yla histomorfología intestinal, lo cual afectó positivamente los parámetros de crecimiento” explica Oriol Roigé, Product Manager de Bioibérica Animal Nutrition.

Sin lugar a dudas, la salud intestinal es crucial para lograr una tasa de crecimiento alta y rentable en la producción avícola. Una práctica extendida para hacer frente a las infecciones producidas por el Clostridium perfringens ha sido el uso de los promotores de crecimiento antibiótico (AGP, por sus siglas en inglés), pero los nutricionistas están tratando de encontrar alternativas naturales, tal y como indica el estudio mencionado. Una de estas alternativas es complementar la dieta de los animales jóvenes con sustancias bioactivas como los nucleótidos.

“Los nucleótidos, de forma natural, apenas están presentes en concentraciones óptimas en los piensos de origen animal y vegetal. Por eso, en Bioibérica recomendamos desde hace años seguir una estrategia nutricional en pollos sanos basada en Nucleoforce™, que aporta los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del sistema inmunológico intestinal” añade Oriol Roigé.