España - Efectos de la vacunación de lechones frente a PCV2

Al final de los años 90 emerge en los cerdos una enfermedad que se caracterizaba con una fuerte pérdida de condición corporal y con sintomatología respiratoria y en ocasiones digestiva, apareciendo entre las 10 y las 14 semanas de vida de los animales. Se denominó Síndrome de Desmedro Multisistémico Postdestete (PMWS) y posteriormente se determinó que estaba ocasionada por Circovirus Porcino tipo 2 (PCV2). Esta enfermedad produce un incremento del coste en el periodo de ceba de los animales no solo por la alta mortalidad, entre el 8% y el 16% sino que ocasiona un incremento del coste de medicación y de los animales que no tenían valor comercial. Por estas razones la pérdida de rentabilidad de las explotaciones fue muy alta, y condujo a la producción de vacunas para evitar los efectos del virus. Con la aparición de las primeras vacunas, se produjo una reducción muy notable de la mortalidad en la fase de transición y cebo y como consecuencia una mejora de los parámetros zootécnicos de los animales. 

En un estudio titulado "Efectos de la vacunación de lechones frente a PCV2 en parámetros productivos y de calidad de canal en condiciones de campo" cuyo objetivo fue comparar distintos parámetros productivos y patológicos en animales vacunados y no vacunados, dejando de vacunar un lote en una granja después de 2 años de usar vacuna frente a PCV2, se constataron diferencias. Con respecto a los parámetros productivos, estas diferencias se evidenciaron en una disminución de la mortalidad en transición y cebo del 1,6%, aunque no significativa, probablemente por el tamaño muestral. Otra variación importante se apreció en los animales invendibles por bajo peso, efecto ya descrito en animales vacunados. Con respecto a Ganancia media diaria (GMD) en cebo, se aprecian diferencias estadísticamente significativas, ya que los animales vacunados presentaron una mejora de la GMD de 18 gramos, cuando comparamos todos los animales, y de hasta 26 gramos cuando se eliminan los animales de más de 7kg de peso al destete.

El estudio fue realizado en la Universidad de Murcia (España) y corresponde a la tesis presentada por Manuel Toledo Castillo en la Escuela Internacional de Doctorado, y contó con la Dirección de Guillermo Ramis Vidal y Francisco José Pallarés Martínez. 

El investigador señala en la introducción de su trabajo que los pesos a los 101 días de cebo categorizados, mostraron diferencias en la distribución de frecuencia, propiciada por la diferencia en la frecuencia de animales con menos de 75 Kg de peso (1,9% en el grupo vacunado frente a 5,2% en el grupo no vacunado). Al analizar la homogeneidad de canales al sacrificio, en este estudio, se demuestra que la población vacunada tiene un coeficiente de variación inferior al que 10%, lo que consideramos como límite de la normalidad. Y en cuanto a la calidad de las canales, los resultados arrojaron diferencias estadísticamente significativas en cuanto al precio pagado por el kilo, por la clasificación de las canales en cada uno de los tratamientos. Los animales vacunados se pagaron a un precio 0,0015 € superior por kilo de peso vivo. La vacunación nos produjo un retorno de inversión de 2,74.

Con respecto a los parámetros patológicos, el PCR-perfil realizado en este estudio demostró que en el grupo vacunado ninguna de las muestras llegó al umbral de detección, mientras que en los animales no vacunados se aprecia viremia en un 57,1% de ellos en la semana 15, cifra que se incrementa hasta el 65% en la semana 19 para quedar en tan solo un 5% de animales virémicos en el muestreo de la semana 28. Se constató que el virus PRRS, aun presente no produjo ninguna diferencia entre grupos. Se constataron diferencias en la respuesta serológica comparando grupos. Por lo tanto, dejar de vacunar en una granja con un programa vacunal instaurado hace que los animales muestren viremia, una serología distinta de los vacunados, peor calidad de canal al sacrificio y mejorías en parámetros como la ganancia media diaria, la mortalidad o la homogeneidad del peso al sacrificio.

En sus conclusiones del documento de 275 páginas señala seis puntos importantes:

1). PCV2 persiste en las granjas en las que se está realizando un programa de vacunación. Una vez se deja de vacunar, el virus circula de nuevo entre los animales, lo que se verifica por la detección de viremia.
2). En las condiciones de este estudio, la supresión de la vacunación no produce un incremento de la mortalidad hasta los niveles que se producen durante la enfermedad sin presencia de vacunación.
3). La vacunación frente a PCV2 produce una reducción en la heterogeneidad de pesos, entendida como una reducción del coeficiente de variación, lo cual podría estar causado por un mejor aprovechamiento de los nutrientes o ser la expresión de un mejor estado de salud.
4). Los animales vacunados tienen un mayor porcentaje de magro y una pérdida menor en el oreo, lo que supone un mayor valor de las canales.
5). El incremento del valor de las canales se traduce en un incremento en los ingresos recibidos en matadero en los animales vacunados, lo que supone un retorno de inversión acorde con la inversión en la vacuna.
6). La vacunación reduce el porcentaje de canales ligeras, es decir aquellas que no alcanzaron más de 75 kg de canal.

El autor señala que el trabajo experimental ha sido financiado por Boehringer Ingelheim España SA y Juan Jiménez García SA.

Si desea acceder al trabajo completo de Manuel Toledo Castillo en la Biblioteca Universitaria DIGITUM de la Universidad de Murcia: Efectos de la vacunación de lechones frente a PVC2 en parámetros productivos y de calidad de canal en condiciones de campo