La exposición semanal a la ocratoxina A está por debajo de los valores considerados de riesgo

Teniendo en cuenta todos los datos actuales sobre la toxicidad de ocratoxina A, el Panel de Contaminantes de la Cadena Alimentaria de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, en sus siglas inglesas) ha emitido un informe en el que admite que se trata de una micotoxina que se acumula en el riñón. Los expertos admiten además que la exposición semanal de la población a OTA varía entre 15 y 60 ng/kg de peso corporal, por debajo de la ingesta tolerable, que está en 120 ng/kg de peso corporal. A pesar de estos datos, los expertos recomiendan reducir los niveles de OTA en alimento y establecer un programa de control para recopilar datos más específicos sobre la exposición para grupos vulnerables. Según las investigaciones hechas hasta ahora, ocratoxina A es una toxina renal potente en animales como roedores y cerdos. El grado de lesión renal depende de la dosis y de la duración de la exposición. Y es que según los expertos, el riñón ha sido identificado como el órgano más sensible respecto a la toxicidad de esta micotoxina. La ocratoxina A aparece de forma natural en productos vegetales, como cereales, granos de café, cacao y frutos desecados. También se ha detectado en alimentos a base de cereales, el café, el vino, la cerveza y el zumo de humo, así como en productos de origen animal como los riñones de cerdo.