Adición de fitasa en una dieta baja en fósforo

El estudio fue diseñado para determinar el efecto de la fitasa extraída de Aspergillus niger (Natuphos ®E) sobre el rendimiento del crecimiento, la mineralización ósea, la excreción de fósforo y los parámetros de calidad de la carne en pollos de engorde alimentados con una dieta deficiente en fósforo disponible (aP). En total, se asignaron al azar 810 pollos de engorde de Indian River de un día de edad en uno de los tres tratamientos dietarios, con seis repeticiones por tratamiento. Los tres tratamientos dietarios fueron 1) grupo de control (CON: dieta basal con suficiente aP); 2) baja en fitasa (LPY: dieta deficiente en fósforo disponible suplementada con 0.01% de fitasa); y 3) alta en fitasa (HPY: deficiente en fósforo disponible) dieta suplementada con 0,02% de fitasa).

Se midieron la ganancia diaria promedio, el consumo de alimento y el índice de conversión alimenticia durante 35 días. Las excretas se recolectaron de cada corral el día 35. Se sacrificó un pollo de cada jaula para recolectar muestras de órganos viscerales y tibia. Los pollos de engorde alimentados con LPY y HPY mostraron una mejora (P <0.05) de rendimiento y crecimiento en comparación con los pollos de engorde alimentados con CON el día 35. La longitud de la tibia de los pollos de engorde alimentados con HPY fue mayor que la de los pollos de engorde alimentados con otras dietas el día 35 ( P <0.05). Sin embargo, el contenido de calcio y fósforo en la tibia en los pollos de engorde alimentados con LPY fue mayor (P <0.05) que en los pollos de engorde alimentados con CON y HPY. La longitud de la tibia y el contenido de calcio y fósforo mostraron una correlación positiva ( P <0.05) con el aumento de peso de los pollos de engorde el día 35.

El nivel de fósforo en las excretas de los pollos de engorde alimentados con LPY y HPY fue menor que el de los pollos CON el día 35 ( P <0,05). Además, los pollos de engorde alimentados con HPY mostraron un contenido de fósforo más bajo ( P <0.05) en las excretas que los pollos de engorde alimentados con LPY.

Los pollos de engorde alimentados con LPY y HPY mostraron (P <0.05) peso del hígado que los pollos de engorde CON. En conclusión, los pollos de engorde alimentados con una dieta deficiente en P suplementada con fitasa de Aspergillus excretaron menos fósforo, lo que mejoró el rendimiento del crecimiento y el desarrollo de la tibia desde el momento de la eclosión hasta el día 35.

El fósforo (P) es uno de los principales y costosos macrominerales necesarios para el metabolismo energético, la regulación de varias enzimas y la biosíntesis de ácidos nucleicos y membranas celulares (Richardson et al. , 2009). Además, el P es esencial para mantener la integridad esquelética de los pollos de engorde (Scholey et al. , 2018). Es importante comprender mejor la calidad de los huesos en las aves, ya que la rotura de los mismos y las contaminaciones relacionadas aumentan la mortalidad al tiempo que reducen la eficiencia y la calidad de la canal (Rath et al., 2000). Además, patas débiles resultan a menudo en una menor ingesta de alimento, lo que afecta el aumento de peso de esas aves (Orban et al., 1999).

El requerimiento de P (aP) disponible de las dietas para pollos de engorde se estimó en 0.35–0.45% (NRC, 1994). Una gran parte del P en los cereales y las semillas oleaginosas se une como fitato, que no está disponible para los pollos de engorde debido a su nivel limitado de fitasa endógena (Morgan et al., 2015). Por lo tanto, las dietas se formularon con un exceso de P procedente de fuentes de P inorgánico para proporcionar un margen de seguridad (Van der Klis y Versteegh, 1996). En consecuencia, el exceso de P en las dietas de los pollos de engorde se excreta al medio ambiente, lo que se ha convertido en un problema ambiental importante (Sharpley et al., 1994).

El efecto de la suplementación con fitasa en la dieta de monogástricos se está investigando extensamente (Adeola y Cowieson, 2011). La fitasa es un aditivo alimentario que desfosforila el fitato presente en las dietas de pollos de engorde (Cowieson y Adeola, 2005). La fitasa tiene la capacidad de aumentar la disponibilidad y utilización de P en pollos de engorde (Nelson et al., 1971). Los pollos de engorde alimentados con dietas que imitaban de cerca sus requerimientos de AP, junto con fitasa, pueden ser beneficiosos, con un desperdicio limitado de nutrientes (Waldroup, 1999). Los pollos de engorde alimentados con una dieta complementada con fitasa menos aP mostraron un mejor rendimiento de crecimiento y una mejor utilización de las cenizas óseas y los minerales (Olukosi et al. , 2007). Estudios anteriores han demostrado que los pollos de engorde alimentados con dietas suplementadas con fitasa mejoraron la retención de P en un 50–60% (Simons et al., 1990; Kornegay et al., 1996). Pieniazek y col. (2016) informaron que la superdosificación de fitasa más allá del nivel industrial no solo aumenta la disponibilidad de P, sino también la disponibilidad de otros nutrientes como proteínas, lípidos, carbohidratos, Ca 2+ , Cu 2+ y Zn 2+como resultado de la hidrólisis elevada por la fitasa. La fitasa también reduce el costo de la industria mundial de alimentos balanceados al reducir el costo de los insumos nutricionales, por ejemplo, al reemplazar las fuentes de P inorgánico como el fosfato dicálcico (DCP) (Mrigen, 2009). La sustitución parcial del fósforo inorgánico en la dieta por fitasa se confirmó en ponedoras, mientras que los resultados obtenidos con pollos de engorde fueron inconsistentes (Um et al., 2000).

Por lo tanto, este estudio tuvo como objetivo investigar el efecto de la fitasa extraída de Aspergillus niger (como reemplazo del P inorgánico de la dieta) sobre el rendimiento del crecimiento, la mineralización ósea, la excreción de P y los parámetros de calidad de la carne de los pollos de engorde desde el momento de la eclosión hasta el día 35 post eclosión.