Uso de la bacitracina de zinc como mejorador del desempeño del pollo de engorde

Para alcanzar altos índices de producción y lograr que su producto sea competitivo, el productor de pollo de engorde tiene a su disposición varios productos comerciales. Los antimicrobianos mejoradores del desempeño (AMD) (N. del T.: conocidos mejor en español como antibióticos promotores del crecimiento) son ingredientes clasificados como aditivos zootécnicos y su adición en los alimentos del pollo de engorde tiende a mejorar la eficiencia y el rendimiento animal. Sin embargo, el uso de dichos productos con este fin ha sido impugnado principalmente en los países de la Unión Europea, donde existe una poderosa presión de los consumidores que buscan productos sin antimicrobianos. En Brasil está permitido el uso de estos productos dentro de las normas estipuladas por el Ministerio de Agrucultura, Pecuaria y Abastecimiento (MAPA). Estas normas entraron en vigor a partir de 2004, cuando además se modificó la definición de los niveles máximos de inclusión de cada antimicrobiano, haciendo que las empresas que comercializan estos aditivos se adecuasen a las nuevas reglas. A pesar de los límites estipulados, queda a criterio del formulador el nivel a utilizar y, dependiendo del antimicrobiano, este nivel puede variar considerablemente. Por ejemplo, la bacitracina de zinc cuyo límite máximo recomendado es de 55 ppm, pero al adoptar dicho límite máximo, el formulador puede utilizar dosis superiores a las necesarias para mejorara el rendimiento animal, generando una ración de mayor costo. Es por ello que el conocimiento del mejor nivel de utilización puede ser esencial para una producción eficiente y a bajo costo. En vista de lo anterior, el objetivo del presente trabajo fue evaluar el efecto de la utilización de diferentes niveles de bacitracina de zinc, dentro de los límites recomendados por el MAPA, sobre el rendimiento de las aves criadas de 1 a 21 días.

Se utilizaron 1,500 pollos machos Cobb-500^® de un día de edad, provenientes de una incubadora comercial, que se distribuyeron en 60 secciones. Cada sección (parcela o corral experimental) se preparó con un sistema de calefacción a base de una lámpara incandescente de 200 V, un bebedero colgante y un comedero tubular. El piso de cada sección contaba con cama reutilizada, procedente de un galpón comercial, con el fin de crear la contaminación microbiana del ambiente (desafío) con el fin de que el experimento fuese semejante a las condiciones de campo, aunque no se realizó el análisis microbiológico de la cama para comprobar este hecho. Se utilizó un diseño completamente aleatorio con 5 tratamientos de 10 repeticiones cada uno. Los alimentos experimentales se formularon a base de maíz y torta (pasta o harina) de soya, siendo isonutritivos para cada fase experimental, de acuerdo con el manual de la estirpe.

El programa de alimentación consistió en dos fases: preiniciación (1-7 días) e iniciación (8-21 días). El antimicrobiano fue bacitracina de zinc al 15%. Los tratamientos experimentales consistieron en cinco niveles de inclusión (0, 10, 25, 40 y 55 ppm), que se asignaron a cada grupo experimental, mientras que el agua y el alimento se proporcionaron ad libitum durante todo el experimento. Los bebederos se lavaron solamente dos veces por semana con el fin de aumentar el desafío.

Al final de cada fase se pesaron las aves y el alimento sobrante, para calcular después el consumo de alimento, la ganancia de peso y la conversión alimenticia.

Los resultados se sometieron a análisis de varianza y se aplicó la prueba F, por medio del programa denominado Sistema de Análisis de Varianza (SISVAR) para datos balanceados, descrito por Ferreira (2000). Cuando fue significativo, el efecto de los tratamientos se sometió a un análisis de regresión para obtener un estudio más desglosado de los diferentes niveles del antimicrobiano.

Al evaluar el rendimiento de las aves durante el período de uno a veinte días, se observó un efecto significativo de los niveles de bacitracina de zinc en el alimento sobre todas las variables estudiadas (P<0.05) (Cuadro 1).

Cuadro 1. Consumo de ración (CR), ganancia de peso (GP) y conversión alimenticia (CA) de los pollos de engorde en la fase de 1 a 21 días, que recibieron dietas que contenían diferentes niveles de bacitracina de zinc

Para la variable consumo de ración se observó una respuesta lineal (P<0.05) (CR = - 0.000458x + 1.299562; R² = 50.42%) y se observó un menor consumo de alimento (1,264 g/ave) cuando se utilizaron 55 ppm de bacitracina de zinc. El mayor consumo de alimento se observó con la dieta que contenía 0 ppm de bacitracina, para generar un aumento estimado del 2.4% en el consumo. Por lo tanto, de acuerdo con la ecuación, las aves que recibieron el alimento con bacitracina de zinc presentaron un menor consumo de alimento en el período de 1 a 21 días. De manera similar los resultados obtenidos en el presente experimento, Sims et al. (2004) observaron en pavos una disminución en el consumo de alimento cuando éste contenía 55 ppm de bacitracina.

Al analizar los niveles de bacitracina en la ración sobre la ganancia de peso, ase observó una respuesta cuadrática (P<0.05) (GP = - 0.000027x² + 0.001568x + 0.897036; R² = 52.84%), calculándose la inclusión de 29.3 ppm para maximizar la ganancia de peso (920 g) lo que corresponde a un aumento de aproximadamente 3% con relación a las aves que no recibieron bacitracina en el alimento (0 ppm). Los datos mostraron que a pesar de que la ecuación estimó un mayor consumo de alimento en las aves que no recibieron el antimicrobiano, este mayor consumo no fue suficiente para incrementar la ganancia de peso.

Nuestros resultados corroboran los de otros autores (Engberg et al., 2000, Brennan et al., 2003) que encontraron una mejor ganancia de peso en las aves justificada por la diferencia en el perfil microbiológico del intestino delgado. Se observó un efecto positivo del uso de bacitracina de zinc en el alimento sobre la conversión alimenticia (P<0.05) (CA = - 0.000675x + 1.434360; R² = 69.73%), con una respuesta lineal en los niveles, con mejor conversión alimenticia (1.40) cuando se utilizaron 55 ppm de bacitracina en el alimento. La mayor conversión (1.44) se presentó en las aves que no recibieron bacitracina (P<0.05), lo que representa una diferencia de aproximadamente 3% entre ambos tratamientos. A pesar de la diferencia en el consumo de alimento de las aves que no recibieron bacitracina, la diferencia no fue suficiente para reflejarse en la ganancia de peso, lo que aumentó la conversión alimenticia. Para los tratamientos con bacitracina, la disminución en el consumo de alimento no se tradujo en un freno del rendimiento, lo que disminuyó la conversión alimenticia por lo que ésta mejoró a causa de una mayor efeciencia de las aves para aprovechar los nutrimentos de la dieta.

Brennan J, Skinner J, Barnum DA, Wilson J. 2003. The Efficacy of Bacitracin Methylene Disalicylate when Fed in Combination with Narasin in the Management of Necrotic Enteritis in Broiler Chickens. Poultry Science 82:360-363.

Engberg RM, Hedemann MS, Leser TD, Jensen BB. 2000. Effect of Zinc Bacitracin and Salinomycin on Intestinal Microflora and Performance of Broilers. Poultry Science 79:1311-1319.

Ferreira DF. 2000. Sistema de análise de variância para dados balanceados - SISVAR. Lavras: UFLA.

Sims MD, Dawson KA, Newman KE, Spring P, Hooge DM. 2004. Effects of Dietary Mannan Oligosaccharide, Bacitracin Methylene Disalicylate, or Both on the Live Performance and Intestinal Microbiology of Turkeys. Poultry Science 83:1148-1154.