Uso de Inoculantes en silajes de Primavera

El ensilado es un proceso y como tal debe prestarse atención a cada etapa del mismo, estas comprenden: cultivo, confección, conservación y suministro; a su vez estas etapas tienen puntos críticos y decisiones de bajo o nulo costo y alto impacto, como por ejemplo: Momento optimo de picado, tamaño de picado, altura de corte, uso de inoculantes, dimensionamiento del silo,etc.

Dentro del proceso de ensilado debemos poner especial atención y comprender que sucede una vez que se pica y compacta el forraje ya sea en los silos puente o embolsado: Aquí estamos generando un proceso químico y biológico que se produce en anaerobiosis, para que el mismo se realice correctamente es necesario que los tejidos vegetales posean suficientes azucares fermentables, de este proceso se desprenden ácidos orgánicos quienes serán los responsables de conservar el forraje hasta el momento de su utilización, siempre y cuando se mantenga la anaerobiosis.

No es lo mismo maíz que alfalfa 
Si bien el título es una obviedad, muchas veces a campo no es así y en varias ocasiones una mala decisión puede hacer fracasar la tecnología de ensilado.

Aquí el aspecto de importancia clave a tener en cuenta es la naturaleza del cultivo. Nos referimos a que es muy diferente ensilar cultivos como: verdeos de invierno, alfalfa, soja,etc. Estos cultivos poseen dos aspectos a tener en cuenta cuando los conservaremos bajo la forma de ensilados:

Uno de los aspectos a considerar es el bajo contenido de materia seca de los mismos, en el momento óptimo de corte, para una correcta conservación bajo la forma de ensilado, el tenor de materia seca del cultivo debería ser mayor al 25-30 %, para lo cual debemos lograr disminuir esta alta humedad.

En la actualidad un proceso que se realiza es un presecado o corte y pre oreo del cultivos hasta lograr este valor de materia seca, aquí es importante destacar que esta medición no debe ser subjetiva, sino todo lo contrario debe medirse con elementos que nos de una medición concreta, por ejemplo humedímetros (este rango de humedad debe estar entre 55 y 65 %).

Hoy en día estamos ensayando productos biológicas los cuales logran disminuir esta humedad pudiendo ensilar y/o enificar los cultivos en menor tiempo y con menor utilización de maquinarias y mejorando sustancialmente su calidad.

Otro aspecto es el bajo contenido de azúcares disponibles para las bacterias lácticas respecto del contenido de proteína sumado a la baja presencia de estas bacterias en el material a ensilar. Esto le transferirá un lento descenso de ph de la masa ensilada imposibilitando la conservación del mismo, esta falta de azúcares es suplida por el uso de inoculantes enzimáticos, dotados de enzimas (amilasas y celulasas ) que dejaran disponibles estos azúcares para la alta carga bacteriana colocada en este ensayo el inoculante utilizado poseía (principalmete bacterias lácticas pertenecen a los géneros Lactobacillus, Streptococus y Pediococus) al momento del ensilado, en el Cuadro 1, se puede apreciar lo que se describe anteriormente, como el silaje de alfalfa inoculado disminuye su pH a valores aceptables para una correcta conservación, otro parámetro de conservación importante y pocas veces tenido en cuenta es el nitrógeno amoniacal respecto del nitrógeno total (N-NH3/NT) este valor no debe superar el 10% .

Cuadro n°1: Respuesta de los principales parámetros de calidad a la inoculación (*)


FUENTE:INTA BALCARCE, ING. LUIS MARIA GUTIERREZ,2005
(*)Inoculante utilizado: 6 bacterias productoras de ácido láctico y 4% de enzimas 

Cuando los valores son cargados en un programa para de formulación de raciones se aprecia un diferencia de 700 gramos de leche entre el caso inoculado y no inoculado.

Los parámetros como fibra en detergente neutro y detergente ácido (FDN y FDA, respectivamente) son parámetros relacionados con la composición química del forraje, pero es conocido que al disminuir estos valores tendremos mayor consumo, por lo tanto aquí vemos otra ventaja fundamental para la utilización de un inoculante enzimático.

Por ultimo podemos ver como aumenta la digestibilidad del caso inoculado versus el no inoculado lo que se traducirá en un aumento de producción. 

Teniendo en cuenta lo expuesto anteriormente a continuación describiremos que es un inoculante y que función cumple dentro de un ensilado:

Un inoculante es un aditivo inocuo que posee bacterias y puede poseer no enzimas que permitirán de forma natural una rápida acidificación del material ensilado(descenso de pH) produciendo esto una cantidad de ventajas muy importantes: estabilización del forraje, evita la proliferación de hongos y producción de micotoxinas, conservación en el tiempo, mayor y mejor aprovechamiento del mismo por los animales.

La rápida estabilización del ensilado además del pH otro parámetro que se puede medir es el descenso de temperatura, la cual depende del oxigeno residual en la masa ensilada.

En este tipo de inoculante posee bacterias que consumen el oxigeno residual, evitando el deterioro de materia seca por aumento de temperatura. Lo importante es que este descenso se produce en las primeras 24 - 48 horas de ensilado.(Foto 1)

Foto 1: Rapida reducción del pH


Fuente: Dr. Antonio Sergio de Oliveira, Universidad de Londrinas.

Esto solo sucede con productos de formulación liquida en donde las bacterias están
metabólicamente activas.

Características que debe cumplir un inoculante

1. Bajar rápidamente el Ph (Ideal en 24-48 hs. a niveles de 3,8 - 4,2)

2. Poseer gran número de bacterias productoras de ácido láctico al inicio de proceso mayor a 106 UFC/gramo.

3. Poseer gran variedad de bacterias productoras de acido láctico.

4. Poseer un complejo multienzimático, ideal 4%.

5. Si bien todas las aplicaciones son liquidas, ya que los inoculantes se disuelven en agua.

El producto se puede presentar de forma liquida o en polvo, generalmente los formulados líquidos son mas prácticos al momento de usarlos ya que las aplicaciones son mas uniformes y no obstruyen los equipos aplicadores.

Otorgando una inmediata acidificación del silo.