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Relación salud y medio ambiente en becerras de la Comarca Lagunera

Publicado: 8 de abril de 2016
Por: Segura-Herrera, C., Delgado-González, R.A.
Introducción
La Comarca Lagunera se encuentra en el altiplano centro-norte de México posee un clima extremoso, es cálido en el verano 30 a 42 °C y frio de 19 hasta – 5 °C. Su suelo es de tipo arenoso arcilloso y no es muy permeable.
En esta región se ha desarrollado una economía en base a agricultura y ganadería intensiva a través del ganado lechero, principalmente de la raza Holstein, el cual se ha ido adaptando a este medio a través de los años y de nuevas instalaciones y tecnologías que les permite sobrevivir y tener altas producciones de leche.
La etapa más representativa de la vaca es el momento del parto pues es crucial para ella y de aporte económico para los trabajadores en la industria lechera, pues es aquí donde inicia el trabajo para obtener una becerra saludable y donde el medio ambiente influirá en su desempeño y buena salud.
Medio ambiente del área de parto
Los corrales de parto son las áreas destinadas para que las vacas y vaquillas, tres semanas antes del parto, ahí deberán permanecer hasta el momento del parto. Este corral debe contar con área de sombras y otro lugar donde eventualmente tendrá ayuda al parto y un espacio donde las crías sean separadas de sus madres y reciban las primeras atenciones postparto.
Los problemas que encontramos aquí son los relativos al proceso del parto. Esta área debe ser desinfectada cada semana pues es aquí donde se recibe a la vaca y su cría. Otro aspecto a cuidar es la cama de arena y muy recomendable que se cuente con área de sombra ya que si se descuidan estos 2 aspectos entonces se observará a simple vista inquietud y estrés en la vaca y puede aumentar la probabilidad de que la cría nazca con dificultad y se altere su status respiratorio y muera.
Mucho se ha avanzado respecto al hecho de separar lo más pronto posible a la cría de su madre por cuestiones de transmisión de enfermedades de la madre a su cría, esto debe seguir siendo importante para los hatos lecheros, para el control y erradicación de enfermedades infecciosas como brucelosis y tuberculosis.
Se debe cuidar el entorno donde nace una becerra pues es aquí donde deben ser atendidas para desinfectar el ombligo, deberá ser llevada en un buen transporte al área de crianza, así mismo la vaca va a permanecer en esta área por alrededor de12 horas en la espera de ser atendida para la recolección de calostro e inicio de su nueva lactancia.
El primer punto inicial ha comenzado, y si éste medio ambiente es favorable, la becerra deberá mostrar ser un animal vigoroso al mostrar buen amamantamiento respiración sin flemas en pulmón y arrojar el meconio en 8 a 12 horas.
Los corrales de partos deberán mantenerse secos ya que son las áreas que van a recibir a las becerras y son un factor de riesgo para la transmisión de enfermedades de los recién nacidos. Se ha demostrado la presencia y persistencia de patógenos como Cryptosporidium spp y Salmonella spp, ya que son patógenos que son eliminados en las heces, por animales portadores asintomáticos, y un becerro al nacer puede quedar sucio y lamerse, y a partir de aquí adquirir una infección que se va a manifestar en las jaulas.
Medio ambiente del área de crianza
Después la becerra será llevada al área de jaulas donde permanecerá en promedio 60 días donde, será recibida en una cama limpia y jaula sin restos de materia orgánica de animales anteriores. Aquí el medio ambiente influirá en el microambiente creado por el manejo, y es aquí en donde se encuentran mayores descuidos en la planeación del trabajo ya que por falta de higiene, de cada jaula principalmente, o por sobrecupo, no hay tiempo para que las jaulas sean lavadas y desinfectadas y en especial sea retirada o cambiada la cama de arena. La nueva becerra esta en mayor riesgo de enfermar al presentar estrés y falta de higiene.
De acuerdo a reportes de la Unidad de Diagnóstico de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, Unidad Laguna, entre los factores que causan enfermedades en las crianzas de becerras, se han encontrado diarreas atribuidas a Cryptosporidium spp (66%), Rotavirus (47%), Salmonella spp (29%), Coronavirus 28% y Escherichia coli (15%).
Con respecto a trastornos respiratorios, las neumonías por Mycoplasma bovis se han observado con prevalencias de hasta 84%. Esta bacteria se ha aislado de oídos sanos (26%) y de becerras con otitis clínica (66%). Se ha encontrado también que tanto Pasteurella multocida y Mannheimia haemolytica son causa de neumonías en becerras de jaula y participan en porcentajes similares entre 35 y 45%. En el caso de los virus, éstos han sido controlados durante generaciones por la aplicación frecuente y adecuada de vacunas.
Con éstos antecedentes, se puede inferir que éstas alteraciones pueden ocurrir en cualquier crianza, por lo que se debe contar con un manejo preventivo en base a problemas de salud detectados, un calendario de vacunación en las vacas secas, así como el uso de anticuerpos orales en el primer día de edad y durante la lactancia, además de la utilización de Lactobacillus y extractos de la pared celular de levaduras, que han sido de apoyo en la salud intestinal y el control de estas enfermedades.
Material de cama en las jaulas
El material de cama que es utilizado para las becerras sido a base de heno de forraje de segunda, aserrín de madera y arena del río o de bancos de arena que se encuentran en lugares cercanos al establo lechero. Esta actividad debe ser cuidada al máximo ya que en ocasiones esa arena que es transportada a la crianza puede estar contaminada con restos de basura del lugar donde fue extraída, las consecuencias para las becerras que se observa en un incremento en brotes de diarrea por Salmonella spp y Cryptosporidium spp.
Calidad del agua
El agua que es utilizada para una crianza debe ser constantemente monitoreada para su calidad bacteriológica como agua potable y de la presencia de minerales pesados o “aguas duras”.
El hecho de vivir en una zona de clima semidesértico, en algunos puntos geográficos de la Comarca Lagunera se ha detectado la presencia de carbonatos sulfatos y arsénico. Esto acarrea problemas de indigestión, mala absorción de nutrientes y minerales cuando ésta agua es utilizada para preparar los sustitutos de leche y como agua de beber para las becerras.
El apoyo de la tecnología para este caso es de gran ayuda, pues algunos establos han instalado específicamente en el área de crianza una serie de sistemas para purificar el agua: como son filtros de carbón activado y membranas de osmosis inversa para remover sulfatos y arsénico.
Estrés calórico
Durante los meses de primavera y verano, donde la temperatura ambiente se eleva por encima de los 30 °C a 42 °C se produce el fenómeno de estrés calórico. La presentación de estrés calórico en la Comarca Lagunera es un hecho conocido y que ha sido enfrentado por los productores de leche en base a instalaciones que han beneficiado a las vacas en producción principalmente.
La temperatura ambiente para la crianza de becerras es de 12 a 26°C así que en de las becerras lactantes el problema de estrés calórico se manifiesta durante los primeros 5 días de edad cuando ellas no pueden termoregular su temperatura especialmente si las becerras nacieron de un parto distócico o fueron dejadas a la intemperie después del parto.
Los signos más relevantes de las becerras que sufren estrés calórico son: incremento en la frecuencia respiratoria, (más de 80 resp/min) la temperatura corporal se eleva a más de 39.5 °C y una rápida deshidratación y muerte. La recomendación más indicada es cambiar a estos animales a lugares bajo techo y refrescarlos con un baño ligero, una vez que se controla la frecuencia respiratoria se les ofrece electrolitos orales y la inyección de dipirona, vitamina B12 y cardiotónico.
Los esfuerzos para paliar esta situación han sido dirigidos a la construcción en el área de jaulas de techos de lámina y de malla sombra que puede ser enrollada en los días nublados o de poca radiación solar, así como el uso de rociadores y ventiladores debajo de estas mallas, Estas construcciones han podido bajar la temperatura de 2 a 4 °C a la temperatura ambiental exterior, y hacer que las becerras tengan un mejor desempeño en salud y ganancia de peso.
Inmunidad de las becerras
La relación salud y medio ambiente debe empezar con un animal recién nacido con suficiente capacidad de responder a las infecciones de los agentes que comúnmente circulan en un hato. Un mal manejo del calostro impide la inmunización adecuada del becerro, por lo tanto el manejo del calostro es crucial para transferir la inmunidad deseada.
El calostro debe ser ordeñado bajo estrictas normas de higiene evitando la contaminación de los recipientes donde se va a depositar, controlando el medio ambiente y desinfectando las manos del personal que recupera a éste. La medición de la calidad del calostro también requiere medidas higiénicas y separar el calostro de acuerdo a su calidad (> 80) y congelarlo inmediatamente en recipientes de tamaños uniformes, si es que no se va a utilizar de inmediato. La cantidad de calostro administrado (10-12% del PC), en tiempo óptimo, deberá ser en la primera media hora después de nacido el animal. Al momento de administrar el calostro es necesario mantenerlo a temperatura ambiente; con esto se cumple el manejo de calostro que debe tener higiene, temperatura, calidad, cantidad y tiempo de administración adecuados.
Además del manejo del calostro, la inmunidad se puede verificar dentro de las primeras 24 a 48 horas utilizando la refractometría del suero sanguíneo (valor óptimo mínimo arriba de 6.0), ésta deberá practicarse máximo tres horas después de que los becerros hayan ingerido leche, calostro o agua, para evitar falsos valores debido a la deshidratación de los animales.
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Autores:
Ramón Alfredo Delgado González
Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro - Mexico
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Umberto Francesa
22 de marzo de 2019
Desearía que el autor nos dijera si en La Laguna ya existen ranchos especializados en la crianza de becerras, bajo contrato. Estos sistemas que estas empresas llevan a cabo, crían los animales juntos o en grupo desde muy temprana edad, son alimentados automáticamente y el enviroment alrededor de ellos, es bastante manipulado; obteniéndose, tasas de mortalidad cerca del 0%.
Daniel Manelli
Eurotec Nutrition Argentina S.R.L.
15 de abril de 2016
Estimado, lo felicito por el enfoque que le dio al tema de crianza. Es común artículos sobre sistemas de crianza, alimentación, pero no tiene tanta difusión el impacto que tiene el medio ambiente sobre el ternero. Mi experiencia en el asesoramiento de crianza, me indican que trabajando en bienestar ( lugar, alojamiento, etc) y correcto calostrado es la base de las crianzas exitosas. Saludos
Oscar Ricardo Reyes
15 de octubre de 2020
Muy acertado el trabajo. Realmente muchos productores no están sensibilizados con la importancia del reemplazo y menos con la atención de éste desde la gestación de la madre. Gracias por sus conocimientos expresados, apliquémoslo.
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