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En lecherias en confinamiento la suerte esta echada

Publicado: 20 de marzo de 2015
Por: Mario H. Sirvén
Una de las causas por las que las vacas encerradas -tanto a cielo abierto como en “free-stall”- producen más leche, es por el tiempo que pasan tumbadas en relación a lo que ocurre con las vacas que pastorean. No solamente hay un mejor ajuste de la alimentación y los aspectos nutricionales cuando las TMR son eficientemente utilizadas, también el tiempo en que las vacas descansan “echadas” tiene que ver con la cantidad de leche que producen.
La causa de que eso suceda es porque la cantidad de sangre que circula por la glándula mamaria es significativamente mayor en las vacas lecheras cuando están en decúbito, y por ese mismo motivo llegan más componentes de la materia prima que las ubres necesitan para producir la leche, nutrientes que son aprovechados sin contemplación por las vacas de alta producción.
¿Cuánto tiempo deben estar tumbadas las vacas en ordeño? Puede decirse que más de la mitad del día, y en unos pocos períodos diarios. Unas 12 a 14 horas de buen descanso son necesarias para alcanzar los máximos potenciales de producción individual, algo imposible cuando las vacas deben proveerse del alimento en los sistemas pastoriles de producción.
Pero hay algunas causas por las cuales las vacas pueden permanecer tumbadas menos horas que las que necesitan, y vale la pena enumerarlas:
  • La primera y más importante es la calidad del suelo que tienen a disposición para echarse. A las vacas no les gusta la suciedad y saben que en charcos de agua (con tierra, materia fecal, etc) la higiene es imposible. No disfrutan de la suciedad, sino todo lo contrario. Sólo utilizan estos lugares cuando la temperatura ambiente es alta y buscan refrescarse. Pisos con saliencias traumáticas, o muy resbaladizos, también reducen el tiempo de decúbito.
  • La búsqueda del organismo de evitar el estrés calórico incluye todos los mecanismos que las vacas tienen para eliminar temperatura corporal; uno de ellos es por “conducción” a través de sus miembros. Las vacas en estrés calórico no se echan, o se tumban mucho menos que en temperaturas de confort.
  • Las mastitis suelen ser causa de menos tiempo de descanso en decúbito a causa del dolor que producen, que se ve incrementado cuando la ubre sufre la presión del peso de la vaca echada.
  • Si bien es lógico pensar que una vaca coja preferirá permanecer echada a caminar con dolor, también es cierto que la dificultad en echarse y/o levantarse hace que muchas  permanezcan más tiempo en estación.
  • El suministro de agua limpia y fresca en forma permanente permite a las vacas beber mucho en unas pocas veces por día. Una vaca Holstein es capaz de beber 15, 20 y hasta 30 litros de agua por minuto, y con pocas pasadas diarias por los bebederos es suficiente para recibir el total de agua que necesita.
Sin embargo, bebederos insuficientes que originan competencia, o bien que se quedan sin agua frecuentemente, hacen que las vacas utilicen tiempo de descanso en la búsqueda de agua y por lo tanto permanecen tumbadas menos horas que las que necesitan para alcanzar sus potenciales productivos. La falta de suficiente consumo de agua agrava el problema.
En conclusión; es necesario atender a las necesidades de confort de las vacas, y el tiempo en el que pueden permanecer tumbadas es una de ellas que, además,  influye directamente en los niveles de producción de leche.
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Hernan Marini
8 de junio de 2015
No importa cual sea el sistema de produccion elegido, no debe resignarse sus pilares fundamentales: Reproducción, sanidad, genética, nutrición y manejo (Ej. Confort animal como menciono el Dr. Sirven). Los sistemas pastoriles vs sistemas estabulados son motivo de controversia en todos los lugares del mundo. Uno puede empezar por el pastoril e ir intensificando hasta llegar al limite donde se pierde rentabilidad (Ley de incrementos decrecientes). En este punto el productor deberá analizar que cambios al sistema deberá hacerle para mantener la rentabilidad de su produccion, la cual siempre estará basada en los 5 pilares claves, que no son negociables independientemente del sistema que se elija.
Miguel Angel Alejandro Garcia
Agroproducciones
29 de mayo de 2015
Es la lucha que nos toca,dentro de lo posible hacer docencia,dificil por cierto, pero después de haber viajado y conocer las dificultades que deben enfrentar productores y profesionales en otros paises estoy convencido que nuestro Pais tiene todo para tener una una ganadería de producción de leche y carne exitosa por demás, tenemos campo de sobra, profesionales de excelencia y operarios calificados,obviamente que con un escenario mas previsible los productores a quienes nos toca asesorar invertirían con tranquilidad y se lograría el objetivo buscado sin lugar a dudas.
Miguel Angel Alejandro Garcia
Agroproducciones
29 de mayo de 2015
Estimado Dr. Sirven, comparto en absoluto,ya que observé mientras estudiaba en Wisconsin que el tema del confort del rodeo es primordial,teniendo en cuenta las condiciones extremas a nivel climatológio, es decir muy bajas temperaturas en invierno hasta bien entrada la primavera y veranos bastante mas cortos que aquí sumando otoños complicados(frio y excesiva humedad) lo que hace que si no se tiene en cuenta ese tema, mas una nutrición bien balanceada y equilibrada de acuerdo a las necesidades fisiológicas del animal en cada estación puedan encontrase en graves problemas y con grandes pérdidas en producción. Para ello obviamente se necesitan manejo adecuado, instalaciones e infraestructuras acordes al lugar donde se encuentra la explotación,espacio directamente proporcional al tamaño del rodeo,resumiendo como usted bien dice en su artículo,a vaca cómoda y bien hidratada,mas producción de leche.No debemos olvidar que los animales no deben competir ni por agua ni por alimento. Saludos cordiales.
Eloy Eduardo Salado
Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria - INTA
29 de mayo de 2015
Estimado Ramiro, a nivel comercial ocurre lo que vos decís. Hay tambos bien manejados independientemente del sistema de producción y eso depende de la gestión empresarial. Sin embargo, si bien uno puede tener su opinión sobre un tema determinado, para evitar subjetividades en gral. recurrimos a la información publicada en revistas internacionales con revisión de pares, esto quiere decir que debe pasar previamente por un filtro importante. Como mencioné anteriormente, en este tipo de trabajos se busca evaluar la respuesta (productiva, sanitaria, reproductiva, etc.) a distintos sistemas de alimentación y para evitar efectos confundidos se comparan vacas de igual potencial de producción, las ordeña el mismo tambero (efecto operario), la gestión es la misma porque se trata del mismo tambo, etc. y se le brindan a los distintos tratamientos evaluados condiciones de confort adecuadas. Caso contrario, no vamos a poder saber si la respuesta se debió al sistema de alimentación solamente o hubo otros efectos afectando la misma (distinto operario, distinta gestión, distinto potencial de producción de las vacas, instalaciones adecuadas en un sistema e inadecuadas en otro, etc.). De ahí la importancia de este tipo de información.
Eloy Eduardo Salado
Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria - INTA
28 de mayo de 2015
Coincido con Uds en que las malas condiciones de confort animal limitan la expresión del potencial de producción de vacas consumiendo a voluntad raciones nutricionalmente equilibradas. Obviamente, en los ensayos como el que mencioné, en los que se busca evaluar la respuesta a distintos sistemas de alimentación, se le brindan a los distintos tratamientos condiciones de confort adecuadas para evitar efectos confundidos. Sin embargo, considero importante remarcar que en gral. la bibliografía estaría indicando que confort o bienestar animal no es sinónimo de sistemas confinados. Por consenso internacional, 2 de los ppales indicadores de bienestar animal son las enfermedades podales y la mastitis. En este sentido, investigadores de la Universidad de North Carolina-USA (Washburn y col., 2002. J. Dairy Sci. 85:105–111) realizaron un ensayo de larga duración (4 años) involucrando 504 vacas totales, en el cual evaluaron 2 sistemas de alimentación, confinado (free-stall, con acceso a un lote de ejercicio) vs. pastoreo con suplementación, e informaron que las vacas confinadas tuvieron 1,8 veces más casos de mastitis clínicas y una tasa de descarte por mastitis 8 veces superior que las vacas en pastoreo. Por otro lado, la dermatitis interdigital y la erosión del talón, consideradas dentro de las lesiones podales más comunes en el ganado lechero, fueron diagnosticadas 2 veces más en vacas estabuladas que en animales en pastoreo (Somers y col., 2005. Preventive Veterinary Medicine 71: 23-34). Asimismo, investigadores chilenos (Rodriguez-Lainz y col., 1999. Preventive Veterinary Medicine 42: 87-97) también demostraron que otro desorden del pie de la vaca, conocido como dermatitis digital papilomatosa, tiene 1,3 veces más probabilidades de ocurrir en vacas en corrales secos que en animales en pastoreo. Muchos de los productores lecheros que optaron por el confinamiento en estos últimos años, han padecido durante la transición entre los dos sistemas las problemáticas mencionadas.
Marcos Snyder
28 de mayo de 2015
Obviamente que la mayor ingesta de materia seca de alta calidad es fundamental para lograr altas producciones de leche, pero quisiera que no perdamos de vista detalles fundamenteles como las que señala el Doctor Mario Sirven en lo que respecta al confort animal. Marcos
Eloy Eduardo Salado
Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria - INTA
28 de mayo de 2015
Gracias Dr. Sirvén, mi intención fue solamente resaltar que en el trabajo mencionado el gasto energético de la caminata-actividad de pastoreo sólo explicaría alrededor de 1/4 de la diferencia en producción de leche entre los dos sistemas de alimentación (sólo pasto vs. TMR en confinamiento). La distancia de la pastura a la sala de ordeño era de 1,3 km.
Eloy Eduardo Salado
Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria - INTA
27 de mayo de 2015
Estimado Dr. Sirvén, con la intención de aportar a la discusión de las razones que explican la diferencia en producción entre vacas alimentadas en un sistema puramente pastoril y uno confinado con TMR, le envío la siguiente información: Kolver y Muller (1998, J. Dairy Sci. 81: 1403-1411) evaluaron la respuesta productiva de vacas de alto mérito genético alimentadas con pastura de alta calidad o con TMR (confinadas). Las vacas alimentadas sólo con pastura no pudieron alcanzar el consumo potencial observado con TMR (3,39 vs 3,93% del PV). El consumo de MS y ENl disminuyeron 19% (19 vs. 23,4 kg MS/día y 32,4 vs. 40,2 Mcal ENL/día, para pastura y TMR, respectivamente), lo que provocó una disminución de 47% en la producción de leche (29,9 vs. 44,1 kg/día, para pastura y TMR, respectivamente). La disminución en el consumo registrado en alimentación pastoril respecto a la TMR resultaría la causa determinante de la menor producción obtenida. Dicha disminución no sería consecuencia de una baja disponibilidad de forraje, ya que tanto la disponibilidad inicial (2800-3000 kg MS/ha) como final (1400-1600 kg MS/ha) resultaron elevadas. A su vez, tanto la digestibilidad como la concentración energética fueron similares entre tratamientos (77 vs. 76% DIVMS y 1,65 vs. 1,63 Mcal ENL/kg MS, para pastura y TMR, respectivamente). Las principales diferencias entre dietas estuvieron dadas por el contenido de MS y FDN (17 vs. 58,2% y 43,2 vs. 30,7%, para pastura y TMR, respectivamente), parámetros de calidad que afectan el consumo. Adicionalmente, Kolver (2003, Proc. Nutr. Soc. 62:291-300) simuló las dietas experimentales en el Cornell Net Carbohydrate and Protein System (CNCPS). Las vacas en pastoreo produjeron 15,4 kg menos de leche que las vacas alimentadas con TMR y confinadas. Los resultados del modelo de simulación indicaron que el 61% de la diferencia en producción de leche fue explicado por el menor consumo de MS en las vacas en pastoreo, mientras que la caminata-actividad de pastoreo y la eliminación de urea explicaron sólo el 24% y el 12% de esta diferencia, respectivamente.
Mario Sirvén
25 de marzo de 2019
Estimados colegas; pido disculpas por no haber respondido antes a tantos interesantes comentarios, pero entre otras cosas me detuve en ellos y me distraje en su análisis. Creo que van a compartir conmigo esta posición: hay que enseñar, enseñar y enseñar al personal afectado al manejo del ganado, pero debemos encontrar la forma en que los productores que no trabajan con sus animales tomen conciencia de la importancia del tema. Esto es, para mí, lo más difícil en mi país.
Alvaro Martínez
19 de julio de 2016
Hola Dr. y amigos de la comunidad. Nosotros somos fabricantes de pisos de goma para ganaderías. Algunas personas que buscan usar por primera vez los pisos de goma me han preguntado y tienen dudas sobre la formación de bacterias en los pisos de goma vs pisos de concreto. Alguien me puede brindar alguna idea sobre alguna prueba de laboratorio que conozca para poder medir éste tema. Muchas gracias
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