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Ensilaje de cereales y cultivos forrajeros en el trópico

Publicado: 29 de agosto de 2007
Por: G. Ashbell. Forage Preservation and By-Products Research Unit

INTRODUCCIÓN
La preservación de forrajes por medio del ensilaje es una técnica conocida desde hace mucho tiempo y es muy popular en América del Norte y en Europa. El uso de esta tecnología en gran escala requiere una inversión considerable en construcciones y equipos, un plan de trabajo muy estricto y bien coordinado durante las diversas fases del ensilado, y un conocimiento del proceso de ensilaje más profundo que el requerido para la henificación. Además, para ensilar bajo condiciones tropicales se debe prestar especial atención a tres aspectos muy importantes:
Madurez de la planta:

Depende de las condiciones climáticas. En las zonas cálidas, el tiempo necesario para llegar a la madurez puede ser mucho más corto y los cambios pueden ocurrir más rápidamente que en climas templados. En tales casos es más difícil poder controlar el momento óptimo para la cosecha, lo cual es un momento crítico en los cultivos de cereales en los últimos estadios de madurez.
Contenido de MS:

El contenido correcto de MS de la planta antes del ensilado es un factor importante para el éxito de la fermentación. Los imprevistos climáticos como sequías, lluvias o altas temperaturas pueden dañar el cultivo y aumentar las pérdidas.
Estabilidad aeróbica:

El ensilaje se puede deteriorar rápidamente, especialmente durante la fase de distribución bajo climas cálidos y húmedos: se reduce la calidad del forraje y se producen pérdidas. Las temperaturas altas facilitan el desarrollo de mohos y la actividad de las levaduras durante todo el año, por lo que debe evitarse el ingreso de aire dentro del silo y asegurar un triturado fino, buena compactación y sellado. Al abrir el silo y retirar ensilaje se debe cuidar que la extracción deje una pared muy plana con el mínimo de superficie expuesta al aire. La estabilidad aeróbica debería ser una prueba rutinaria en zonas calientes (Ashbell et al., 1991).
Este estudio se centrará en el análisis del proceso y el uso del ensilaje de tres cereales empleados como cultivos forrajeros en el trópico: sorgo, maíz y trigo.
SORGO (Sorghum bicolor (L.) Moench)
Introducción
El cultivo del sorgo comenzó en Egipto cerca del 2000 AC. Se lo cultiva generalmente en las zonas con pluviometría inadecuada para el maíz. Algunas de las características que lo distinguen del maíz lo han convertido en un cultivo de verano difundido en todo el mundo. El sorgo es poco exigente en agua y puede desarrollarse con 300 mm de lluvia o riego, o sin riego con las lluvias de invierno y tampoco es exigente en fertilizantes. El sorgo puede crecer en terrenos relativamente salinos (suelos y agua). En veranos calientes y largos se puede dar un corte y obtener un nuevo rebrote. El rendimiento, por supuesto, depende de las condiciones del cultivo.
La planta joven de sorgo contiene ácido cianhídrico que puede intoxicar el ganado que lo pastoree. Para evitar esto se recomienda pastar el sorgo sólo cuando las plantas alcanzan una altura de 60 cm.
Existe una gran variedad de sorgos pero la mayoría han sido desarrollados para la producción de grano para consumo humano y animal.
Planta entera - sus cualidades y su ensilado
En las últimas décadas, el sorgo forrajero se ha vuelto cada vez más popular. Se han obtenido genéticamente variedades que mejoran sus cualidades como planta forrajera y se dispone ahora de variedades conocidas como "sorgo forrajero para uso como planta entera". La mayor parte del trabajo de ensilaje de sorgo ha sido realizado en E. U. de América (Dickerson, 1986; Smith, 1986; Dost, 1989).
El sorgo es un cultivo estacional y la única forma de preservar la planta entera para la alimentación bovina es por medio del ensilaje. Para tener éxito con su ensilado y obtener un producto de alta calidad se debe prestar atención a varias características de la planta, como la digestibilidad, puesto que algunas partes de la planta que son poco digestibles reducen el valor nutritivo total. Muchas de estas partes tienen un contendido alto de componentes de la pared celular, especialmente lignina, la que predomina en el tallo o caña. Por ello, al reducir la proporción de caña aumenta la digestibilidad, por lo que se prefieren las variedades enanas.
Atributos importantes que determinan el valor del ensilaje de sorgo.
Alto contenido de energía
Los cereales en general aportan energía y poca proteína. Los carbohidratos hidrosolubles (CHS), los carbohidratos estructurales -pared celular- y el almidón son las fuentes energéticas principales contenidas en los cereales. El almidón se encuentra almacenado principalmente en los granos, por lo que la proporción de granos que se incluya afecta sensiblemente el contenido total de energía de la planta entera a ensilar. La presencia de almidón es especialmente importante para la alimentación de vacas lecheras. Un híbrido de sorgo con un contenido de granos es ideal para ensilar.
Contenido de MS
Al ensilar el forraje debe tener por lo menos 30 por ciento de MS. Con valores menores ocurre una fermentación incorrecta que produce una gran cantidad de efluente, lo cual induce una pérdida importante de nutrientes y crea de problemas de contaminación ambiental. Un ensilado muy húmedo facilita el desarrollo de clostridios, estimula la producción de ácido butírico, aumenta las pérdidas y reduce la calidad del ensilaje. La mayor parte del contenido de agua en la planta de sorgo se encuentra en el tallo o caña; por ello no es adecuado cortar y marchitar el sorgo, puesto que el tallo se pudre rápidamente y no se seca. Debido a todo esto, se requiere una forma de cosecha directa de la planta entera de sorgo que contenga por lo menos 30 por ciento de MS. En estadios más avanzados de crecimiento de la planta -granos lechosos y pastosos-, los granos son la parte más seca de la planta. Un rendimiento alto en granos, cosechados en el momento de madurez entre granos lechosos y pastosos permitirá aumentar el contenido total de MS a un nivel apropiado que impida el desarrollo de una fermentación clostridiana y el escurrimiento de gran flujo de efluente. En esta etapa el contenido de MS del grano es cercano al 50 por ciento. Se recomienda, por lo tanto, que la cosecha para ensilar la planta entera de sorgo sea realizada en la etapa entre granos lechosos y granos pastosos. Cuando se cosecha con granos pastosos en su estado más avanzado se reduce el valor nutritivo del ensilado porque aumentan las partes poco digestibles. Se puede aumentar la digestibilidad procesando el grano pero esto es recomendable sólo si hay pruebas de que resulta económicamente ventajoso. Un buen equilibrio entre las partes de grano más tallo y hojas, permite alcanzar un contenido de MS correcto. Para reducir la humedad o un contenido excesivo de CHS en el híbrido de sorgo forrajero, se puede recurrir a mezclarlo al ensilar con híbridos de sorgo para grano (Ashbell et al., 1999)
El Cuadro1 muestra las diferencias en composición de la planta entera de sorgo en sus diversos estados de crecimiento y los resultados de sus respectivos ensilajes. El contenido de MS aumentó, mientras que aquellos de CHS y NDF -fibra detergente neutra- disminuyeron principalmente entre las etapas lechosas y pastosas; esto se atribuye al hecho que el grano se llena con almidón. La digestibilidad de la MS in vivo (MSD) no fue afectada por la etapa de crecimiento; los mayores valores de pH de ensilajes de sorgo fueron aquellos cosechados en la etapa de grano pastoso. Sin embargo todos los ensilajes resultaron ser estables al ser expuestos a un ambiente aeróbico; en todos los ensilajes se encontró ácido acético y etanol en cantidades entre 10-20 g/kg (datos de Ashbell et al., 1999, resultados no publicados).
Cuadro 1. Cambios en la composición de la planta entera de sorgo durante su crecimiento (g/kg)

 Ensilaje de cereales y cultivos forrajeros en el trópico - Image 1
Vuelco
Las plantas de sorgo son susceptibles al vuelco. Esto complica su cosecha, la cual toma más tiempo y se incurre en mayores pérdidas. Aunque las plantas altas de sorgo no tienen una cabeza pesada, sus tallos son gruesos y fuertes, facilitando el vuelco. En consecuencia son preferibles los híbridos enanos que resisten mejor al vuelco.
Taninos
Los granos de ciertos híbridos pueden contener taninos, los cuales afectan negativamente la tasa de digestibilidad de la proteína de la ración. En los híbridos "resistentes al ataque de pájaros" se encuentran grandes cantidades de taninos.
En ciertos lugares el grano de sorgo se emplea en la alimentación humana y en esos casos el ensilado de sorgo se hace con sólo la caña y las hojas y la especie asume un papel de "doble propósito". Algunos híbridos de sorgo pueden "permanecer jóvenes" aún en etapas tardías de su crecimiento, y así retener una moderada digestibilidad debida a su mejor composición.
La fermentación del ensilado sorgo mejoró al inocular BAC pero esto redujo la estabilidad aeróbica del ensilaje (Meeske et al., 1993). Por ello, la decisión sobre el uso de aditivos, especialmente bacterianos, sólo debe tomarse después de realizar ensayos bajos las condiciones locales.
MAÍZ (Zea mays L.)
El maíz es un cultivo de verano, tiene su origen en México y en América Central, pero hoy en día se le cultiva para grano en todo el mundo; es considerado un cultivo perfecto para ensilar. Requiere bastante agua y temperatura, razón por la cual frecuentemente se lo cultiva bajo riego.
Se dispuso de gran cantidad de información de ensayos sobre el ensilaje de maíz, comprendiendo sus normas agronómicas, su ensilado y su valor nutritivo para el ganado. Su cosecha al momento adecuado de madurez del grano es un factor muy importante, especialmente en zonas tropicales, donde el crecimiento y el proceso de madurez son muy rápidos. Cuando el grano se encuentra entre la etapa lechosa y pastosa es el momento óptimo para cosechar. Para determinar esto en la práctica se debe abrir la mazorca, observar el grano y al apretarlo entre los dedos estimar la proporción entre la parte sólida -el almidón- y la parte líquida "la leche". Cuando estas partes son equivalentes (50 % cada una) es el momento de comenzar la cosecha, y se debiera finalizar esta faena cuando el grano muestra un 75 por ciento de su materia en forma sólida. En esta etapa - entre estado lechoso y pastoso - se espera alcanzar el rendimiento máximo de la cosecha. Una cosecha más temprana implica pérdidas potenciales de rendimiento, y una cosecha más tardía provocará pérdidas en el campo y una reducción de la digestibilidad de los granos.
En tierras en climas cálidos, la madurez correcta para cosechar se logra alrededor de los 115 días de crecimiento. En zonas con veranos largos es posible realizar dos cosechas al año, una en verano y otra en otoño. Sin embargo, hay grandes diferencias tanto en la calidad como en el rendimiento de estos cultivos cosechados en temporadas distintas.
El maíz cultivado en verano tendrá mejores condiciones climáticas para su crecimiento, y podrá completar su ciclo vegetativo, mientras que el cultivo de otoño tendrá días que se hacen más cortos y serán menos calientes hacia el fin del período de crecimiento, por ello su rendimiento será menor y la planta no tendrá las condiciones apropiadas para producir una mazorca madura. Al cosechar el maíz de verano, los granos aportan la mayor parte de la energía, casi 50 por ciento del valor nutritivo total, principalmente el almidón, -lo que es muy importante para la ración de las vacas lecheras- proviene de los granos. El contenido de granos influye sobre el contenido total de MS aumentándolo, y permite que el contenido total de MS de la planta entera de maíz tenga un tenor de humedad apropiado para un buen ensilado. Para aumentar el rendimiento y para mejorar la calidad de la cosecha de maíz de otoño, se recomienda aumentar la densidad de siembra dependiendo de las condiciones locales y someter el forraje cosechado a un proceso de marchitez antes de ensilarlo. Ashbell y Lisker (1988) estudiaron el problema de la deterioración aeróbica del ensilaje de maíz almacenado en silos trincheras comerciales en Israel, en un clima subtropical. Las pérdidas de MS fluctuaron entre 4 y 7,5 por ciento en sitios de los silos que permanecían bien sellados, pero llegaron hasta 36 por ciento donde era difícil impedir el ingreso del aire como la parte superior del silo y a lo largo de sus paredes.
TRIGO (Triticum aestivum L.)
Consideraciones agronómicas
El cultivo del trigo comenzó en los albores de la civilización, principalmente para consumir sus granos. En la actualidad se emplea, en algunas regiones, la planta entera como un forraje que se conserva ya sea como heno o como ensilaje. La planta entera aporta fibra digestible y energía (9,0 MJ/kg MS) y su valor nutritivo puede asimilarse al valor del ensilaje de maíz, de modo que es un excelente forraje para vacas lecheras de alta producción o bovinos de carne (Adamson y Reeve, 1992). Gran número de variedades y cultivares han sido seleccionados para poder adaptarse a diferentes climas y suelos. En climas tropicales y subtropicales, se cultiva sólo el trigo de primavera, que se siembra antes de comenzar la temporada de lluvias. La cosecha de trigo para ensilaje debe realizarse en su etapa de grano lechoso-pastoso, con un contenido de MS de 30-35 por ciento. Los rendimientos de MS de la planta entera de trigo para ensilaje son de aproximadamente 10 t/ha, variando según el cultivar usado y las condiciones de crecimiento. Una gran ventaja de sembrar trigo para ensilaje en climas tropicales y subtropicales radica en su cosecha temprana, la cual permite al agricultor la siembra de un cultivo adicional de verano como maíz, papas o maní. Las siembras múltiples contribuyen a un uso más eficaz del suelo, del agua y de los fertilizantes y contribuyen a establecer una rotación de cultivos (Ashbell y Sklan, 1985). En Israel, bajo un clima subtropical, este sistema permite a los agricultores introducir un tercer cultivo de maíz de otoño; este maíz es irrigado con aguas servidas que han sido tratadas y permiten la cosecha del forraje después de 80 días de crecimiento, antes que se desarrolle la mazorca.
Los cultivares de trigo de primavera pueden ser precoces o de maduración tardía, existiendo una diferencia entre ellos de dos a tres semanas para alcanzar la madurez necesaria. Las ventajas atribuidas a los cultivares tardíos usados para el ensilaje en climas subtropicales, incluyen:
Un período de crecimiento más largo en zonas semiáridas que facilita el uso más eficaz de la humedad que queda en el suelo después de las últimas lluvias y permite rendimientos mayores a un determinado grado de madurez;
Los días disponibles para ensilar aumentan, con lo cual se reduce la competencia por el apoyo logístico del sistema operativo agrícola; y
El momento de la cosecha de estos cultivares tardíos reduce el riesgo de lluvias durante el ensilado.
También es posible hacer siembras asociadas de trigo con leguminosas anuales como vicia, arvejas y sulla (Hedysarum coronarium) para ensilarlas mezcladas. Las ventajas atribuidas a estos sistemas son:
La planta de trigo puede reducir la tendencia de las leguminosas al vuelco;
Hay un mejoramiento de la ecología edáfica y menor incidencia de enfermedades de las plantas; y
Hay mejor calidad de ensilaje y menor riesgo de pérdidas en la preservación de las leguminosas.
La última ventaja se explica porque el cereal, que es rico en carbohidratos, se complementa con las leguminosas que son más húmedas y ricas en proteínas, asegurando una buena fermentación del ensilado, una buena estabilidad aeróbica del ensilaje y un mejor valor nutritivo. Ashbell et al. (1997) observaron que la mejor combinación para estos ensilajes mixtos era preparar una mezcla de trigo y vicia a razón de 3:1 (base materia fresca), con un contenido de 31 por ciento de MS de la mezcla. Los problemas que pueden surgir en los cultivos asociados incluyen la competencia entre las especies, diversas tolerancias a herbicidas, y falta de coincidencia en el grado de madurez óptima para la cosecha simultánea del cereal y la leguminosa.
Cambios durante la madurez
Los cambios que ocurren en la planta entera de trigo durante su maduración, especialmente después de la floración, son muy rápidos en los climas cálidos, y las etapas de maduración son breves. Estos cambios afectan los rendimientos de MS, la composición química, las propiedades del ensilado y el valor nutritivo. En el breve período que comienza con la floración y concluye en la etapa de grano de pasta blanda, la planta de trigo sufre grandes cambios; aunque hay cierta variabilidad en la composición de la planta entre distintos años y diversos cultivares, algunas tendencias de valores son claras (Cuadro 2): el contenido de MS aumenta con el avance de la madurez, mientras que el valor de PB disminuye, sobretodo entre la floración y la etapa de grano lechoso-pastoso; el almidón se acumula en el grano mientras que los carbohidratos solubles disminuyen; el contenido de fibra (ambas, NDF y ADF, expresadas como porcentajes de MS) alcanza máximos valores en el momento de la floración. El contenido de fibra afecta el valor nutritivo del forraje. Considerando el nivel de rendimiento, las características del ensilado y los aspectos nutritivos, se puede considerar que el momento óptimo para la cosecha de trigo para ensilar es en su etapa de grano lechoso (Ashbell et al., 1997; Weinberg et al., 1991).
Cuadro 2. Cambios en la composición de la planta de trigo durante su crecimiento y maduración (g/kg)

 Ensilaje de cereales y cultivos forrajeros en el trópico - Image 2
MS = materia seca; CHS = carbohidratos hidrosolubles; PB = proteína bruta; NDF = fibra neutrodetergente; ADF = fibra ácidodetergente; ADL = lignina ácidodetergente.
Ensilado de trigo
Aunque los rendimientos son algo más bajos en el momento del grano lechoso, comparado con la etapa de grano pastoso, es preferible cosechar temprano porque el trigo con grano pastoso ya puede estar muy seco y sus fibras tendrán una digestibilidad menor. En cambio si se cosecha en el momento de la floración, el trigo estará muy húmedo y será preciso un proceso prolongado de marchitez, siendo inferiores sus características para el ensilado.
Es usual el someter las plantas de trigo a un proceso de marchitez antes de ensilarlo con el propósito de asegurar un contenido de MS de 33-38 por ciento. Los cambios muy rápidos que ocurren en el trigo en el momento de la cosecha hacen difícil poder controlar su contenido de MS. Además, en climas subtropicales donde se cosecha el trigo para ensilaje en la primavera, el tiempo es muy inestable y los días cambian rápidamente de fresco a caliente y seco. Esto afecta la maduración de la planta y la tasa de deshidratación durante el proceso de marchitez.
La facilidad para compactar el ensilado triturado está condicionado por el contenido de MS y el tamaño del triturado: cuanto más seco está el forraje, mayor es su elasticidad y mayor la dificultad para compactarlo. El hecho que los tallos del trigo son huecos, hacen necesaria una fuerte compactación para remover el aire. Por ello un ensilado más seco requiere un triturado más fino. En Israel se recomienda triturar en trozos de 10 mm; al triturar muy fino, por un lado resulta más caro pero facilita un pasaje más rápido a través del rumen, funcionando con menor efectividad como un alimento voluminoso para el rumiante.
Las tasas para el ensilado del trigo en climas subtropicales son variables y dependen del contenido de MS, de la disponibilidad de carbohidratos y de un desarrollo adecuado de CAB en el ensilaje. No hay mayor información sobre la dinámica microbiana durante el ensilado de trigo en climas cálidos. Weinberg et al. (1987) encontraron que el número de lactobacilos en el cultivo fresco variaba entre 102 y 106 unidades formadoras de colonias (UFC) por gramo. Después de dos días de ensilado en mini-silos, aumentaban en todos los casos a 108-109 UFC/g.
Ashbell y Kashanchi (1987) y Ashbell y Weinberg (1992) estudiaron las pérdidas de MS en silos trinchera comerciales de trigo en Israel. Las pérdidas de MS fluctuaban entre 3 y 16 por ciento en el centro del silo; a 10 - 22 por ciento cerca de las paredes; y entre 14 y 27 por ciento bajo la cubierta superior. Los "hombros" del silo (arista entre las paredes y el tope del silo) son los sitios más susceptibles a la penetración del aire, y allí las pérdidas MS oscilaban entre 54 y 76 por ciento.
La estabilidad aeróbica del ensilaje de trigo es variable. En climas calientes los microorganismos dañinos como las levaduras y los mohos proliferan más rápido, causando mayor deterioro aeróbico. En general, un gran número de factores puede afectar la estabilidad aeróbica, incluyéndo la presencia de malezas, el manejo durante el ensilado (compactación y sellado), la composición del ensilado, tipo de aditivos y el método y tasa cotidiana de explotación al distribuir el ensilaje. En silos trinchera en clima caliente es importante que el frente de ataque del silo abierto en explotación sea removido frecuentemente, retirando porciones de 30 a 40 cm cada día, con el objeto de minimizar el efecto de la exposición al aire. La deterioración aeróbica del ensilaje de trigo se asocia con un aumento en la población de levaduras y mohos, recalentamiento, y consecuentemente, pérdidas de MS. El papel exacto del contenido de MS, carbohidratos solubles residuales y del ácido láctico sobre la desestabilización del ensilaje no se ha aclarado todavía. Tal como ocurre en otros ensilajes, los ácidos grasos volátiles como los ácidos acético, propiónico y butírico que se producen durante la fermentación del ensilado, inhiben las levaduras y los mohos.
La presencia de mohos es un problema en el ensilaje de trigo por el riesgo a encontrar micotoxinas. Se han observado varias micotoxinas en diversas concentraciones en ensilajes de trigo en Israel; sin embargo, no se dispuso de suficiente información para asociar su presencia con la incidencia de enfermedades en el ganado.
Aditivos
En el ensilaje de trigo se han usado aditivos tanto químicos como biológicos. Un aditivo químico basándose en sulfatos, que inhibe el desarrollo de levaduras y mohos, se usa comercialmente en Israel; se le atribuye reducción de pérdidas y mejora de la estabilidad aeróbica. En algunas fincas, se aplica sal gruesa corriente sobre el tope del silo trinchera (3- 4 kg/m2) para proteger esta parte susceptible del ensilaje. El amoníaco anhidro ha sido empleado también en ensilajes de maíz, trigo y sorgo y con ello mejoró la estabilidad aeróbica, aumentó el contenido en NPN pero como su uso implica riesgos prácticamente no se le emplea (Ashbell and Weinberg, 1993).
El empleo de inoculantes bacterianos que incluían bacterias homofermentativas CAB no mostró buenos resultados en el ensilaje de trigo en Israel; los ensilajes tratados con ellas tendieron a deteriorarse más rápido que los ensilajes usados como control y a favorecer el desarrollo de levaduras y mohos (Weinberg et al., 1993b). Se sugirió que la producción de ácidos grasos volátiles, que inhibe el desarrollo de levaduras y mohos, era insuficiente. Al incluir cepas especiales de ciertas bacterias este problema fue aliviado. Se está ensayando con Lactobacillus buchneri heterofermentativo en varios laboratorios de investigación y los resultados son promisorios (Weinberg et al., en imprenta).
También se han empleado enzimas que degradan la pared celular como las celulasas, hemicelulasas y pectinasas. El aporte positivo de su acción es la degradación de carbohidratos complejos transformándolos en azúcares fermentativos mejorando la digestibilidad ruminal. Se ha comprobado que estas enzimas pueden reducir el contenido de fibra y aumentar su digestibilidad sólo en ensilajes hechos con trigo húmedo ensilado al momento de la floración, pero no en ensilajes de trigo más maduro y seco (Weinberg et al., 1993a; Weinberg et al., 1995).
Características nutritivas
El valor nutritivo del ensilaje de trigo es fuertemente afectado por su grado de madurez en el momento de la cosecha ya que influye sobre el rendimiento, sobre la proporción entre grano y partes vegetativas y sobre el contenido y calidad de la MS y la pared celular. Como en Israel el ensilaje de trigo es el forraje voluminoso principal de la ración de vacas lecheras, la calidad del ensilaje es de suma importancia. Este ensilaje corresponde a un tercio de la ración, y se distribuye a una tasa de 7 kg de MS por vaca al día.
Ashbell et al. (1997) compararon las características del ensilado y la degradabilidad ruminal del ensilaje de trigo provenientes de cultivares tempranos y tardíos, en cuatro etapas de crecimiento: macollaje, floración, grano lechoso y grano pastoso. A pesar que la degradabilidad NDF del ensilaje de trigo más joven (brotes y floración) fue mayor que aquella para las etapas de granos lechosos y pastosos, los rendimientos de MS degradable y NDF (medidos como t/ha) aumentaron en función de una mayor madurez. Ben-Ghedalia et al. (1995) determinaron valores de digestibilidad MO in vivo de 69,2 y 70,5 por ciento y valores de digestibilidad NDF de 63,3 y 56,3 por ciento, para ensilajes de plantas completas de trigo cosechadas a la floración y con grano de pasta blanda, respectivamente.
Temas de investigación
Los cultivares de trigo disponibles para ensilaje fueron desarrollados originalmente con el propósito de aumentar la producción de granos, y hoy tienen un uso de doble propósito. Los futuros trabajos de investigación deberían desarrollar cultivares específicos para el ensilaje. Tales cultivares deberían estar adaptados a las condiciones locales específicas de clima y suelos, aportar mayores rendimientos y una mejor calidad. Otra posibilidad incluye desarrollar plantas con características antimicoidales intrínsecas, cuyo ensilaje pudiera ser más estable durante la exposición aeróbica.
También se requieren investigaciones adicionales sobre mejores inoculantes para el ensilaje de trigo en climas cálidos. Las características requeridas para estos inoculantes deberían incluir especificidad de cultivo, mejor fermentación del ensilado con menores pérdidas, mayor estabilidad aeróbica, y un efecto probiótico sobre el comportamiento animal (Weinberg and Muck, 1996). La ingeniería genética puede tener un papel importante en el desarrollo de inoculantes ideales.
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Guillermo Alvarez Reyna
Martinez y Staneck
24 de septiembre de 2007
Galdino Muñoz Soto: Lo que se hace con muchísimo éxito en Argentina es realizar la bolsa con la máquina y después de 25 días de realizado el silo, se reempaca en bolsas plásticas de 25-50 Kg con el material ya hecho silo. En el proceso de reempaque las perdidas son de casi cero ya que solamente y rápidamente se cierra el nuevo envase para ser transportado al lugar de destino de la comida, siendo el proceso de reoxidación muy corto y las perdidas de calidad son mínimas. De esta manera se distribuye al lugar de destino (te comento que un productor vendedor de silo con esta metodología envía silo reempaquetado a 1400 Km del lugar de origen). siendo un importantísimo proveedor de comida con este método. Cualquier consulta estoy a tu disposición Guillermo ALVAREZ REYNA
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Guillermo Alvarez Reyna
Martinez y Staneck
18 de septiembre de 2006
Jose: Le informo las características de las bolsas utilizadas en Argentina para el embolsado. Son de 3 (tres capas) y 235-250 micrones de espesor según el fabricante. La capa externa es blanca con el objeto de reflejar los rayos infrarrojos. La capa media negra para reflejar los ultraviolestas. La capa interior transparente que sella la posible entrada/salida de gases de la misma. La eliofania de nuestro país ya está estudiada por los fabricantes de las mismas, fabricando las mismas para todo tipo de clima y temperaturas, desde bajo cero a 45-50 grados; como verá, las mismas sirven para todo tipo de latitud. Según su diámetro (la máquina de embolsar viene con diferentes diámetros de túneles), en las bolsa pueden entrar en: 9 Pies y 60 mts de largo 185-200 ton de ensilado 6 Pies y 60 mts de largo 85-90 ton de ensilado 5 Pies y 60 mts de largo 65-70 ton de ensilado La máquina solamente embolsa con el tamaño del túnel fabricado, no pudiendo embolsar con bolsas de otro tamaño. Guillermo ALVAREZ REYNA Médico Veterinario Reservas Forrajeras Nutrición animal Tandil, Argentina
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Guillermo Alvarez Reyna
Martinez y Staneck
5 de septiembre de 2006
En Argentina, las reservas forrajeras se realizan en bolsas (bagging), en donde se ensila con excelentes resultados todo tipo de material: maíz, sorgo, pasturas consociadas, gluten meal, gluten feed, hez de malta, cáscara de papas, cebollas desecho, papas descarte, semilla de algodón, pulpa de citrus, remolacha forrajera, etc etc, para destino alimentación animal. La diferencia est en en el costo de MS (materia seca) final, ya que los porcentajes de pérdida de los sistemas tradicionales (bunker, puente, torta, etc) rondan el 35 o más, considerando la CALIDAD final contra máximo 5 de la bolsa (bagging). Además no está sujeto a un volumen determinado y en un lugar fijo, ya que se embolsa lo que rinda el lote, y si por ejemplo usa media bolsa, solamente la corta y guarda el resto de la misma para otra ocasión. También en Argentina se confeccionan las bolsas en los potreros donde se va a suplementar a los animales, evitando los traslados de comida por los potreros desde un solo lugar de almacén. La duración de las bolsas es de dos años con garantía según el fabricante, lo que nos permite guardar el excedente de lo guardado para el ejercicio del año venidero sin inconvenientes, y el sistema no permite lixivificación de componentes solubles valiosos en alimentación y no contamina las capas freáticas. Guillermo ALVAREZ REYNA Médico Veterinario Nutrición Animal Resevas Forrajeras Tandil, ARGENTINA
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javier robles
16 de septiembre de 2013
El ensilaje de cebada registró el valor de energía metabolizable más elevado entre los tres tipos de ensilajes estudiados, con un valor de 2,4 Mcal kg-1 de MS, similar a lo reportado por Kristensen (1992) en Dinamarca, para ensilajes de cebada cosechados con un contenido de MS superior a un 30%. Por otro lado, los ensilajes de trigo y de avena presentaron menores contenidos de energía metabolizable, de 2,3 y 2,2 Mcal kg-1 , respectivamente.
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Isaac Oswaldo Enriquez Guerrón
19 de junio de 2012
LES AGRADECERIA INFORMARME QUE RECOMENDACION ME HACEN EN CUANTO A QUE PASTOS SEMBRAR PARA GANADO DE LECHE EN UNA FINCA DE CLIMA FRIO ( 2.400 MSNM), FINCA DE 20 HECTAREAS CON SUFICIENTE AGUA DE RIEGO; LES COMENTO QUE ESTOY TRATANDO DE INICIAR EN ESTE RENGLON, ES DECIR PRODUCIR LECHE, TENEMOS EL MERCADO Y LA FACILIDAD DE ENTREGARLA A LOS COMPRADORES. LA RECOMENDACION QUE ME HAGAN PRODRIA SER FUNDAMENTAL PARA CUMPLIR CON MI PROPOSITO. GRACIAS POR SU APOYO
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Isaac Oswaldo Enriquez Guerrón
19 de junio de 2012
MUY IMPORTANTES TODOS LOS COMENTARIOS AL RESPECTO, EXISTE PREOCUPACION ENTRE LOS GANADEROS DE LECHE EN MI DEPARTAMENTO POR EL TLC, PODRIA PERJUDICARNOS A LOS QUE PRODUCMOS LECHE?
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Martin Garcia Garcia
Martin Garcia Garcia
7 de agosto de 2009
Alguien me podria orientar para poder hacer un ensilo de caña! en verdad necesito saber como hacer uno. Cualquier informacion que me puedan proporcianar en verdad lo agradeceria mucho mi correo es marty_g2@hotmail.com
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Augusto Jose Zuñiga Perea
28 de julio de 2009
Un comentario de experiencia personal en mi labor profesional. En trópico bajo (trópico caribeño) la dependencia climática que posee el maíz lo hace en algunas regiones inviable, ya que los fenómenos climatologicos no los pronostica nadie. El sorgo posee características genéticas que lo hacen menos susceptible a estos cambios, cortado ha edad correcta se logran resultados nutricionales y económicos aceptables, ademas de lograr varios cortes, los mejores materiales son los híbridos graníferos marrón. Para el ensilado del fruto de totumo debe hacer un ensilado salino, teniendo mucha precaución al ofertarlo a los animales ya que puede producir toxicidad por consumo elevado. La conservación de el tallo comestible y las hojas es preferible en heno.
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Antonio Perez Abdala
Antonio Perez Abdala
15 de julio de 2009
Hola mis amigos virtuales. Es un placer adquirir o refrescar conocimientos de personas versadas, experimentadas o interezadas, y lo más importante ubicadas geograficamente en distintos lugares de colombia y de el mundo. Tengo a cargo un curso de aprendices en el tema de ensilaje, quiero sus colaboraciones en experiencias con el totumo, y que aportes nutritivos aportaria al ensilaje como alimento para bobinos. Muchas gracias. ANTONIO PEREZ ABDALA COROZAL -SUCRE
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ANGEL RAFAEL GARRIDO OTERO
25 de diciembre de 2008
La implementacion de la suplementacion con silo en colombia es enorme y se esta haciendo tambien en canecos de 55 litros la cual esta mostrando mejor conservacion, y en lo referente a manejo tambien es facil. Todo esto se esta usando con maiz, sorgo, la cual hace que los ganaderos sean eficiente y los animales puedan expresar si genetica.
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