Pasturas persistentes, productivas y de calidad. Producción y utilización de Forraje.

En los últimos años el paisaje productivo pampeano sufrió un marcado incremento de la superficie agrícola y una disminución de la superficie ganadera (o expulsión a otras regiones), como así también el confinamiento a lotes marginales.

Esta reducción del área efectiva ganadera sin la disminución en el número de cabezas bovinas, generó una intensificación en la explotación de los recursos forrajeros. El panorama planteado está exigiendo elevados niveles de producción primaria, pero a su vez, impone riesgos para la persistencia productiva de las pasturas, que en muchos casos no supera los tres años.

Si bien todos los factores que intervienen en una explotación deben sobrepasar un umbral mínimo para lograr una producción razonable, no todos tienen la misma importancia sobre el nivel alcanzado. Se ha determinado que aquellas tecnologías relacionadas a la producción y utilización de pasturas son las que proporcionan los mayores impactos. En este grupo se pueden citar las especies, cultivares y mezclas de pasturas, la fertilización, la intersiembra, la transferencia de excedentes y el ajuste de la carga animal y la eficiencia de cosecha de forraje.

Debe destacarse que tanto la carga animal como la eficiencia de cosecha son de principal importancia, ya que determinan el éxito o fracaso biológico del sistema.

El momento de inicio del pastoreo queda determinado por el largo de vida y la cantidad de las hojas de las plantas, lo cual es una característica de cada especie y determina la acumulación neta de forraje. Si se supera este tiempo habrá muerte de forraje y se estará perdiendo producción.

El consumo representa la interfase entre la pastura y el animal, y se define como la cantidad de materia seca que ingiere un animal por unidad de tiempo cuando el alimento no es limitante. Su importancia radica en que, existe una relación directa positiva entre el consumo y la producción animal.

La eficiencia de cosecha de forraje (EC), también llamada eficiencia de utilización o de aprovechamiento debe estar orientada a lograr el ajuste preciso entre la oferta y la demanda de forraje.